EL DESHIELO ENTRE CUBA Y EEUU
Acaba la pen迆ltima guerra fr赤a
El anuncio del restablecimiento de relaciones entre EE UU y Cuba pone fin a medio siglo de embargo a la isla caribe?a
Cuba y Estados Unidos guerrean desde los tiempos en que la mayor de las Antillas era apetecida colonia espa?ola, pero sus convulsas relaciones dieron un vuelco el pasado 17 de diciembre, cuando los presidentes Barack Obama y Ra迆l Castro anunciaron al mundo el arranque de un hist車rico proceso hacia la normalizaci車n bilateral. Faltan todav赤a muchos pasos para que sea completa y satisfaga a todos, pero una abrumadora mayor赤a de cubanos recibi車 el anuncio con esperanza despu谷s de 56 a?os de enemistades, y padecimientos y desgarros familiares. El papa Francisco bendijo y estimul車 las negociaciones.
Las relaciones diplom芍ticas entre Washington La Habana hab赤an quedado rotas en 1961, despu谷s de que la revoluci車n de 1959 se declarase marxista leninista y nacionalizara las propiedades de todas las multinacionales norteamericanas instaladas en la isla. A partir de entonces todo fue de mal en peor. Fidel Castro se ali車 con la Uni車n Sovi谷tica en plena Guerra Fr赤a, y los halcones de la Casa Blanca, pusieron manos a la obra: fracas車 la invasi車n por bah赤a de Cochinos preparada por la CIA, Cuba llam車 a las armas contra invasores, los sovi谷ticos instalaron misiles a 145 kil車metros de las costas de Florida, y fueron necesarias complejas negaciones y compromisos parea evitar una tercera guerra mundial.
Estados Unidos acus車 a la revoluci車n de haberse establecido como dictadura, decret車 su aislamiento internacional, y la incorpor車 en la lista del movimientos terroristas. Fidel Castro respondi車 que contra el imperio todas las alertas y defensas son pocas, acaudill車 al tercer mundo contra Washington y las hostilidades no acabaron hasta hace tres a?os, hasta el 2011 en que Ra迆l Castro y el VI Congreso del partido comunista aprobaron la liberalizaci車n socioecon車mica en curso..Obama aprovech車 las iniciativas aperturistas de Cuba para negociar en secreto el comienzo de un acercamiento cuyo desarrollo es todav赤a incierto. Antes, en 2009, hab赤a manifestado su disposici車n al di芍logo promoviendo medidas de flexibilizaci車n desde el poder ejecutivo contra el embargo, cuyo eventual levantamiento corresponde al Congreso. Facilit車 el env赤o de remesas familiares, multiplic車 la frecuencia de los viajes a la isla de cubanos domiciliados en Estados Unidos y fueron habituales y cada d赤a m芍s frecuentes las declaraciones de grupos y lobistas afines a la Casa Blanca y los editoriales del influyente The New York Times contrarios al mantenimiento de unas sanciones que se demostraron in迆tiles. Poco a poco, la belicosidad de los tiempos de George W. Bush qued車 relegada como herramienta 迆til, y la comunidad cubana en Miami se pronunci車 mayoritariamente en las encuestas a favor del deshielo. Para contribuir a normalizaci車n a迆n embrionaria, aunque sin soltar las riendas del poder pol赤tico, detentado por el Partido Comunista de Cuba (PCC), el gobierno de Ra迆l Castro acometi車 reformas sustanciales. Se aprob車 el trabajo por cuenta propia, la compra venta de coches y casas, los viajes al extranjero de la disidencia y de cualquier ciudadano, y en marzo qued車 lista una nueva ley de inversi車n extranjera que autoriza las inversiones n la isla de los cubanoamericanos residente en EEUU, prohibido por el embargo.
El 17 de diciembre, Estados Unidos y Cuba anunciaron que el comienzo de conversaciones para abrir embajadas y restablecer unas relaciones diplom芍ticas congeladas durante mas de medio siglo: desde los tiempos de Dwight D. Eisenhower. Los planes a partir de ahora son ambiciosos. Se intensificaran los viajes y el comercio, la cooperaci車n en diversos 芍mbitos, y es previsible que a medio plazo le llegada de turistas estadounidenses sea masiva: en torno al mill車n de viajeros. El siguiente paso, ser芍 la terminaci車n del embargo, que no cumpli車 los objetivos propuestas: liquidar la revoluci車n cubana. El reto es arduo pues los sectores m芍s anticastristas del partido republicano batallar芍n para impedir que el poder legislativo derogue una herramienta de castigo que esta teniendo un efecto bumerang.