?oquis de s¨¦mola de la abuela Eulalia

Tras el ¨¦xito de las alcachofas de la 'nonna' Sara, llega una nueva entrega de la serie Abuelas por el Mundo con una particular receta de ?oquis. Su art¨ªfice es una se?ora argentina llamada Eulalia, a la que no tuve el gusto de conocer pero de cuyo nieto,el fot¨®grafo Gast¨®n Gil, me considero amigo. ?l me la dio a probar en una cena hace alg¨²n tiempo, y desde entonces le he estado dando la tabarra para que me pasara la receta.

Gast¨®n recuerda que estos ?oquis eran uno de sus platos favoritos de la infancia, y el que siempre ped¨ªa cuando iba a comer a casa de su abuela en Olavarr¨ªa, provincia de Buenos Aires. Supongo que se aprovechaba del lujazo que supone para un ni?o tener un familiar que te haga pasta casera, siendo este alimento un favorito universal de los seres menores de 12 a?os. Por supuesto, Eulalia se lo pon¨ªa de entrante con un segundo potente para acompa?ar, no fuera a ser que el chaval se quedara con hambre.

Los ?oquis de s¨¦mola no se parecen mucho a los habituales que se toman en Espa?a. No llevan patata, y su tama?o es m¨¢s el de una galleta gruesa que el de una pelotilla. Por lo que he le¨ªdo se denominan ?oquis a la romana, y son parecidos en su composici¨®n a los que se consum¨ªan en Italia antes de la llegada del tub¨¦rculo a Europa desde Suram¨¦rica.

Cuando los vi por primera vez pens¨¦ que iban a ser como una losa en el est¨®mago y que no iba a poder comer m¨¢s de dos. Pero una vez en la boca resultan extra?amente ligeros, y menos pastosos que los de patata. Desde luego no es la primera comida que te dar¨ªa Dukan al empezar su dieta, pero tampoco es que te explote en el est¨®mago y te deje en letargo durante cuatro horas. En cualquier caso, es una delicia que adem¨¢s admite toda clase de salsas, desde una bolo?esa hasta una putanesca pasando por una simple mantequilla con lim¨®n y salvia.