Paloma Cuevas, la silenciosa protagonista del verano por su divorcio de Enrique Ponce

Paloma Cuevas cumple 48 a?os el pr¨®ximo 11 de septiembre, de los cuales, m¨¢s de la mitad los ha pasado junto a Enrique Ponce. La que fue una de las parejas aparentemente m¨¢s consolidadas del panorama social espa?ol se encuentra en plena negociaci¨®n sobre los t¨¦rminos de su separaci¨®n. En la mesa est¨¢ el reparto de un ingente patrimonio y la custodia de las dos hijas de la pareja. Cuevas y Ponce ha elegido un abogado en com¨²n para que se ocupe del asunto, ya que su deseo es que todo se resuelva de com¨²n acuerdo.

Y parece que as¨ª ser¨¢. El torero est¨¢ dispuesto a no poner obst¨¢culos a la repartici¨®n de sus bienes. La pareja se cas¨® en r¨¦gimen de gananciales. En lo que no ser¨¢ tan permisivo es en las informaciones que circulan sobre c¨®mo se produjo la separaci¨®n, en qu¨¦ momento ocurri¨® y cu¨¢ndo lleg¨® a su vida Ana Soria, su joven novia de 21 a?os. Al torero le importan y mucho las formas y amenaza con demandas.

Ponce lleva en los ruedos tres d¨¦cadas, en las que ha ganado mucho dinero que ha invertido en negocios inmobiliarios, ganaderos, aceiteros e incluso musicales. Su sociedad, Cetrina SL, fundada en 1994 y de la que es el ¨²nico administrador, tiene unos activos de 5,5 millones de euros (seg¨²n datos de 2018, los ¨²ltimos registrados). Sin embargo, en ese ejercicio, aunque sus ventas aumentaron, su patrimonio neto descendi¨® en medio mill¨®n de euros y el beneficio despu¨¦s de impuestos cay¨®. Enrique Ponce combina sus actuaciones taurinas con la promoci¨®n de un aceite que producen sus olivos jienenses. Seg¨²n reza la p¨¢gina web, se trata de un aceite virgen extra, ¡°¨²nico y exclusivo¡±, seleccionado de las mejores aceitunas, con utilizaci¨®n de las m¨¢s modernas tecnolog¨ªas para preservar la temperatura y todas sus caracter¨ªsticas, y embotellado en un cuidado y opaco envase, dise?ado por Paloma Cuevas. A Ponce le encanta la moda y practica el golf, la caza, el esqu¨ª y canta.

Cuentan que a estas alturas de su vida, pr¨®ximo a los 50 a?os, Ponce ten¨ªa ya previsto estar retirado pero un rev¨¦s en alguna de sus inversiones le ha obligado a cambiar de planes. En esos momentos de dificultad econ¨®mica, Paloma Cuevas tuvo un importante papel. La todav¨ªa esposa del torero no es una mujer al margen. Licenciada en la Universidad de Boston en Econ¨®micas y un m¨¢ster en esta especialidad, Cuevas ayud¨® al torero a poner en orden sus finanzas. Por eso a ella le molesta que solo se le vea como un florero. Reivindica su papel dentro de su matrimonio de 24 a?os en el que no solo se dedic¨® a su casa y a sus hijas.

Una figura clave en el proceso de separaci¨®n est¨¢ siendo Victoriano Cuevas (m¨¢s conocido como Victoriano Valencia) que es m¨¢s que un suegro o un apoderado para Ponce: ha sido amigo, padrino, acompa?ante, consejero y casi padre para el matador. De 87 a?os, es un hombre culto (licenciado en Derecho por la Universidad de Salamanca), conocedor del gremio, torero antes que empresario, que ayud¨® a dirigir las carreras de otras figuras como El Juli o Jos¨¦ Ortega Cano. De ah¨ª que los Cuevas y los Ponce hayan tejido v¨ªnculos en los que se entremezclan lo familiar con lo profesional. Ahora ¨¦l se ha convertido en el consejero de su hija.

Pero de todos estos asuntos, Paloma Cuevas no habla en p¨²blico. Desde el primero de julio cuando se oficializ¨® su separaci¨®n de Enrique Ponce, ella ha decidido guardar silencio. Eso s¨ª, insta a que el torero emita comunicados aclaratorios cuando lo considera necesario y habla con personas de su confianza para que su versi¨®n se conozca. Tampoco hay im¨¢genes de ella. Mientras Ponce y Ana Soria se prodigan en las redes sociales y en las calles mostrando lo felices que est¨¢n con su relaci¨®n, ella y sus hijas han pasado el verano en su finca de Ja¨¦n con alguna que otra escapada a la playa sin ser fotografiadas. Su c¨ªrculo de amigos act¨²an de escudo. Han estado unos d¨ªas en Sotogrande con Luis Alfonso de Borb¨®n y Margarita Vargas y tambi¨¦n han pasado tiempo con la joyera Cristina Yanes para quien en el pasado dise?¨® una colecci¨®n.

En un verano extra?o por la pandemia con una irregular temporada taurina, Enrique Ponce ocupa m¨¢s portadas que en las tardes en las que sal¨ªa por la puerta grande. Guste o no guste su historia se ha convertido en el culebr¨®n estival.