Las jugosas memorias de Perez Hilton, el bloguero m¨¢s escandaloso, entre el cotilleo y el ¡®mea culpa¡¯
El creador de la web de chismes que lleva su nombre afirma arrepentirse de su nivel de odio y de c¨®mo trat¨® a las estrellas y a sus hijos. Tambi¨¦n repasa su amistad con Lady Gaga, por quien se sinti¨® utilizado
A mediados de los a?os 2000, un joven de Florida llamado Mario Armando Lavandeira, de padres brasile?os y reci¨¦n salido de la universidad de Nueva York, decidi¨® dar el salto a Los ?ngeles para empezar a escribir en blogs y revistas LGTBI. Aquel chaval de apenas 25 a?os, con una pluma tan ingeniosa como afilada, decidi¨® tomar un nuevo nombre, un nuevo rumbo y abrir un blog que le convertir¨ªa en una estrella de la misma fama o m¨¢s que aquellas de las que escrib¨ªa: Perez Hilton.
Han pasado m¨¢s de 15 a?os desde que Internet se revolucionara con la llegada de su blog hom¨®nimo. Sus cotilleos, comentarios sarc¨¢sticos y mensajitos con Photoshop sobre las fotos de las estrellas llegaron a convertir a PerezHilton.com durante a?os en el portal de cotilleo m¨¢s famoso del mundo. Y dej¨® a su creador con una enorme cantidad de an¨¦cdotas que ahora se decide contar a trav¨¦s de un libro de memorias, TMI: My life in scandal (Demasiada informaci¨®n: una vida en el esc¨¢ndalo).
Quien espere una ristra de cotilleos o de an¨¦cdotas con famosos las tendr¨¢: desde c¨®mo Ariana Grande y su madre fueron a consultarle en 2011 (cuando ella ten¨ªa apenas ocho a?os y era una principiante) para que llevara las riendas de su carrera a c¨®mo, en una Nochevieja, el entonces novio de la cantante Jessica Simpson se le acerc¨® y se lio con ¨¦l delante de su novia. Pero la biograf¨ªa va m¨¢s all¨¢ y tambi¨¦n recorre algunas de las zonas m¨¢s oscuras del hombre m¨¢s odiado de Hollywood.
El propio Hilton ¡ªque tom¨® su nombre haciendo un juego de palabras con Paris Hilton¡ª decidi¨® rebajar el tono de su blog, ya m¨¢s cerca de lo agresivo y lo maleducado que de lo sarc¨¢stico, en el a?o 2010. Nunca dej¨® de comentar ni de sacar a famosos del armario, quisieran o no, convencido de que no deb¨ªan seguir ocultando su homosexualidad. Pero en ese momento decidi¨® dar un paso atr¨¢s. Entonces ten¨ªa cinco millones de lectores mensuales pero prefiri¨® pisar el freno y cambiar de actitud, inspirado en parte por una reveladora conversaci¨®n con Jennifer Aniston. Quer¨ªa acabar con ese calificativo que le hab¨ªa puesto el New York Post de ¡°la m¨¢s odiada entre las estrellas de Hollywood¡±. ?l mismo reconoc¨ªa que no le era f¨¢cil morderse la lengua y que su ansia de critiqueo casi le pod¨ªa.
Ahora parece que el bloguero m¨¢s c¨¦lebre de Hollywood entona el mea culpa con la perspectiva que dan la experiencia y los a?os. ¡°La gente escrib¨ªa unos comentarios con tal carga de odio que no pod¨ªa llegar a leer ni la mitad¡±, escribe el bloguero en esta nueva biograf¨ªa, coescrita junto a los autores Leif Eriksson y Martin Svensson y que sali¨® a la venta este martes, 6 de octubre. ¡°La fuerza de esa tormenta de odio me sacudi¨® y pinch¨® la burbuja en la que hab¨ªa estado viviendo¡±, relata. ¡°Por primera vez me di cuenta de que no eran simplemente unos cuantos a los que no le gustaba: era la abrumadora mayor¨ªa. Al final me percat¨¦ de que las cosas que escrib¨ªa de verdad le hac¨ªan da?o a la gente, y mucho¡±.
Aunque han pasado a?os desde su cambio de rumbo, su portal dej¨® huella y abri¨® la puerta a unas cr¨ªticas mucho m¨¢s afiladas de lo que era costumbre en el mundo del espect¨¢culo hasta el momento. Una forma de ser pionero que le ayud¨® a montar un imperio, porque el hoy empresario de 42 a?os y padre de tres hijos¡ªMario, Mia y Mayte, de siete, cinco y tres a?os¡ª es due?o de diversos portales de Internet y posee una fortuna estimada de unos 30 millones de d¨®lares.
Su odio era visceral y muy profundo. Por ejemplo, tras esa toma de contacto con Ariana Grande y su madre, finalmente fue descartado para llevar su carrera, y durante un tiempo se ensa?¨® con ella en sus publicaciones. ¡°Durante a?os fui ruin con ella, en las webs y las redes sociales. Me arrepiento¡±, confiesa. Fueron muchos los famosos que le criticaron o amenazaron con demandarle, como Demi Moore o Roseanne. ¡°Dijo algo de que quer¨ªa secuestrarme y llevarme a su granja de Haw¨¢i para poder decir que estaba invadiendo su propiedad y as¨ª dispararme¡±, relata.
A ¨¦l, en cambio, todo le daba igual. ¡°No me importaba. En parte era por ser joven y pensar que tendr¨ªa ¨¦xito para siempre, pero tambi¨¦n porque pensaba que era feliz. Pero la verdad era que me estaba ahogando en negatividad. Estaba atrapado haciendo un papel, con demasiado miedo para cambiar, demasiado preocupado por si perd¨ªa a mis lectores si de repente dejaba de ser tan malvado¡±. Pero todo cambi¨® tras aquella conversaci¨®n con Aniston, y sobre todo despu¨¦s de una pelea con el manager de los Black Eyed Peas a la salida de una discoteca en 2009, donde el bloguero insult¨® al representante y acab¨® inconsciente y con magulladuras.
Ahora, dice, de lo que m¨¢s se arrepiente es de ¡°haber herido a tanta gente poni¨¦ndoles motes desagradables, y sobre todo de tratar mal a los hijos de los famosos¡±. ¡°Ahora veo que no necesitaba ser tan malvado, tan cruel. Me habr¨ªa ido bien siendo simplemente quien era¡±.
La amistad rota con Lady Gaga
Hilton tambi¨¦n revela uno de sus episodios m¨¢s dolorosos: el de su truncada amistad con Lady Gaga. Llegaron a ser ¨ªntimos. Se encontraron en 2008 y, como confiesa ¨¦l, se qued¨® prendado con ella, con ¡°el brillo que desprend¨ªa¡±. ¡°Hay ciertas personas a las que, cuando las conoces por primera vez, pareces haberlas conocido durante toda la vida, y as¨ª ocurri¨® con Gaga¡±, relata. Su nivel de intimidad era tal que se pasaban horas al tel¨¦fono, se iban de vacaciones juntos e incluso ¨¦l la llamaba cari?osamente ¡°wifey¡±, ¡°mujercita¡±.
Pero dice que, seg¨²n la fama de ella fue aumentando, las cosas se fueron truncando. ¡°Cuando se fue convirtiendo en Lady Gaga para el mundo, empez¨® a beber m¨¢s y tambi¨¦n a tomar todo tipo de pastillas¡±, relata. Pero ¨¦l estaba ah¨ª siempre para ella, e incluso cuando se coment¨® que era una copia de Christina Aguilera o que ¨¦sta hab¨ªa lanzado una canci¨®n similar, Hilton se lanz¨® contra ella en sus p¨¢ginas: ¡°Empec¨¦ a ponerle a Christina todo tipo de terribles nombres¡±.
¡°Si miro atr¨¢s¡±, confiesa ahora, ¡°es una de las cosas de las que m¨¢s me averg¨¹enzo, y puedo ver que Gaga me usaba como una herramienta. No solo contra Christina sino contra otros de sus rivales. Nunca me pidi¨® de forma expl¨ªcita que escribiera cosas desagradables sobre nadie, pero al quejarse conmigo me hac¨ªa sentir que, como su mejor amigo, deb¨ªa hacer algo al respecto".
Su ruptura definitiva ocurri¨® cuando viaj¨® a Australia, en 2011, para entrevistarla por el lanzamiento de su ¨¢lbum Born this way. Reci¨¦n bajado del avi¨®n, en pleno jet lag, de noche, le sentaron ante Gaga para entrevistarla. Ella estaba borracha. Le pregunt¨® sobre la canci¨®n Judas, de car¨¢cter religioso, y ella se enfad¨®. Despu¨¦s, trat¨® de reconducirlo hablando sobre su novio. Ella se levant¨® y se fue. ?l fue tras ella entre l¨¢grimas. ¡°Si no hubiera estado tan borracha y si lo hubiera pensado, habr¨ªa visto que era lo ¨²ltimo que pretend¨ªa¡±, relata. Acabaron la entrevista un par de d¨ªas despu¨¦s, pero tambi¨¦n fue el fin de su amistad.
Gaga le guard¨® rencor durante tiempo y se lo demostr¨®. En 2013 Hilton estaba buscando piso en Nueva York y en un momento se encontr¨® con su correo lleno de amenazas y cr¨ªticas por supuestamente perseguir a la cantante. ¡°Despu¨¦s de leer algunos mensajes me di cuenta de que Gaga hab¨ªa tuiteado algo de m¨ª, y lo comprob¨¦: me acusaba de seguirla, de ser un acosador. La cabeza me daba vueltas. ?Se hab¨ªa vuelto loca, hab¨ªa bebido, tomado drogas que le hab¨ªan hecho perder del todo el sentido de la realidad?¡±, reflexiona. Resulta que hab¨ªa visto un piso en el mismo bloque de apartamentos de Gaga y un fan le hab¨ªa visto. "?Por qu¨¦, tras dos a?os de silencio, empezar¨ªa de repente a acosarla? Fue pura man¨ªa persecutoria, pero una vez que super¨¦ el impacto inicial y borr¨¦ todos esos correo de odio, siento tristeza por ella¡±.
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