Isabel de B¨¦lgica, una nueva manera de prepararse para ser reina

No solo su pa¨ªs observa los pasos que da su pr¨®xima reina. Isabel de B¨¦lgica, de 19 a?os, es la mayor de un grupo de princesas que est¨¢n llamadas a reinar en Holanda, Noruega o Espa?a. La duquesa de Brabante, cuya preparaci¨®n se ha acelerado desde que alcanz¨® la mayor¨ªa de edad, est¨¢ inmersa en su formaci¨®n militar, que durar¨¢ un a?o, tras haber cursado su bachillerato en el UWC Atlantic College de Gales, donde tambi¨¦n se formar¨¢ la princesa Leonor. Los estudios y las pr¨¢cticas para asumir en un futuro la jefatura de las Fuerzas Armadas han sido un par¨¦ntesis antes de su carrera universitaria, que la prensa belga da por hecho que ser¨¢ tambi¨¦n en el extranjero.

B¨¦lgica ve a la princesa Isabel, hija de Felipe y Matilde, como un soplo de aire fresco en una familia real perseguida por los esc¨¢ndalos, desde los abusos de la colonizaci¨®n del Congo que el actual rey tuvo que condenar hasta su triste papel durante la Segunda Guerra Mundial, cuando fue trasladada a Alemania. Los papeles que apuntan a un romance secreto del rey Balduino con su madrastra y la batalla judicial de ocho a?os emprendida por de Delphine Bo?l hasta ser reconocida como hija leg¨ªtima del rey em¨¦rito, Alberto, no ha dado tregua a las generaciones posteriores. El ascenso de la primera mujer al trono gracias a la derogaci¨®n de la ley s¨¢lica en 1991 es vista como un revulsivo para la Corona.

Isabel, nacida ya en el actual milenio, creci¨® en el castillo de Laeken junto a sus hermanos Emmanuel, Gabriel y ?l¨¦onore. La heredera al trono fue escolarizada en Saint-Jan Berchmans, un colegio cat¨®lico y neerland¨¦s ubicado en el centro de Bruselas, cerca de la iglesia de Notre-Dame de la Chapelle. Fue la misma escuela elegida para su hermano Gabriel y a la que ya hab¨ªan ido las princesas Luisa Mar¨ªa y Mar¨ªa Laura. No fue hasta los 11 a?os cuando asisti¨® a su primer acto oficial en la inauguraci¨®n del hospital universitario de Gante que lleva su nombre. En 2013 dio su primer discurso, con motivo de la conmemoraci¨®n de la Gran Guerra, en franc¨¦s, flamenco y alem¨¢n.

Su gran acto p¨²blico, sin embargo, se produjo en su 18? aniversario. En esos momentos, Isabel estaba estudiando ya su bachillerato internacional en el Castillo de St Donat, situado a unos 26 kil¨®metros de Cardiff (Gales) y construido en el siglo XII. ¡°No existe una escuela para futuras reinas. No hay educaci¨®n ni un curso espec¨ªfico. Pero esa escuela se aproxima a eso¡±, explica el periodista especializado en realeza del diario Het Nieuwsblad, Wim Dehandschutter, quien imagina que Felipe VI llam¨® al monarca belga para pedirle referencias sobre ese centro de cara a la escolarizaci¨®n de la princesa Leonor.

La familia real belga eligi¨® esa escuela por su diversidad ¨Cacoge a 350 alumnos de 119 pa¨ªses¡ª y por basarse en el m¨¦todo educativo del profesor alem¨¢n Kurt Hahn, que ha hallado una gran aceptaci¨®n entre la realeza europea. All¨ª Isabel obtuvo conocimientos sobre cambio clim¨¢tico, religiones o geopol¨ªtica y tuvo que realizar trabajos sociales. Pero los regios muros del castillo brindaban tambi¨¦n a la familia real la posibilidad de que su heredera pudiera seguir siendo Lizzie durante un tiempo m¨¢s, preservando su adolescencia y alej¨¢ndola de los focos de palacio. Dehandschutter se?ala que ello tiene que ver con que Felipe quisiera preservar esa etapa de la vida de su hija despu¨¦s de que ¨¦l tuviera una juventud infeliz a causa de las turbulencias que atravesaba el matrimonio de Alberto y Paola. Y pens¨® que una ¡°aventura internacional¡± pod¨ªa ser una buena experiencia para la joven.

Isabel acab¨® a distancia su educaci¨®n en Gales a causa de la pandemia. Y, una vez finalizada, empez¨® su formaci¨®n militar en la Escuela Militar, en Bruselas. Esa nueva etapa s¨ª ha generado un cierto debate, puesto que parte de la sociedad belga se cuestiona si es necesario que un monarca pase por un campamento militar. La heredera belga, sin embargo, redujo ese cap¨ªtulo de su educaci¨®n de los tradicionales cuatro a?os a solo uno, durante el cual se ha sometido a una f¨¦rrea disciplina f¨ªsica y ha aprendido t¨¦cnicas del ej¨¦rcito.

B¨¦lgica se pregunta ahora cu¨¢l es el pr¨®ximo paso para la princesa. Se da por hecho que Isabel ir¨¢ a la universidad, y probablemente de nuevo la familia real optar¨¢ por enviarla al extranjero. Eso evitar¨¢ el debate de si debe ir a una universidad franc¨®fona o neerlandesa, o a un centro libre o cat¨®lico. Y aunque su formaci¨®n universitaria llegar¨¢, tampoco tiene por qu¨¦ hacerlo de inmediato y, como recuerda Dehandschutter, podr¨ªa decidir quedarse un tiempo m¨¢s al ej¨¦rcito o bien cumplir con una idea que barrunta hace tiempo: tomarse un a?o sab¨¢tico para descubrir el mundo antes de reinar su pa¨ªs.