Matthew McConaughey: ¡°Mi libro no va de c¨®mo abusaron de m¨ª. Eso convertir¨ªa a mis lectores en ¡®voyeurs¡±
El oscarizado actor publica en espa?ol su autobiograf¨ªa, ¡®Greenlights¡¯, una mezcla de vivencias con literatura de superaci¨®n personal
Como muchas de las historias de falsa modestia que llenan Hollywood, Matthew McConaughey dice que no ten¨ªa ning¨²n discurso preparado la noche en que gan¨® el Oscar. ¡°Eleg¨ª subir con un discurso muy personal de lo que me ha funcionado a m¨ª en mi vida en lugar de ser gen¨¦rico¡±, dice el actor, quien se llev¨® el premio de la Academia de cine a mejor actor en 2014 por su interpretaci¨®n de un enfermo de sida en Dallas Buyers Club. Sobre el escenario despach¨® en pocos segundos los agradecimientos de ri...
Como muchas de las historias de falsa modestia que llenan Hollywood, Matthew McConaughey dice que no ten¨ªa ning¨²n discurso preparado la noche en que gan¨® el Oscar. ¡°Eleg¨ª subir con un discurso muy personal de lo que me ha funcionado a m¨ª en mi vida en lugar de ser gen¨¦rico¡±, dice el actor, quien se llev¨® el premio de la Academia de cine a mejor actor en 2014 por su interpretaci¨®n de un enfermo de sida en Dallas Buyers Club. Sobre el escenario despach¨® en pocos segundos los agradecimientos de rigor al director y a los rivales derrotados. Despu¨¦s habl¨® de las tres cosas que necesita todos los d¨ªas: alguien a quien admirar, alguien a quien esperar y alguien a quien seguir. ¡°Mi h¨¦roe soy yo en 10 a?os¡±, dijo entonces en un discurso con el pegajoso timbre de un aforismo. El momento se hizo viral con m¨¢s de 24 millones de reproducciones.
Aquellas palabras pronunciadas en tres minutos conten¨ªan lo esencial de una filosof¨ªa personal que McConaughey (Uvalde, Texas, 51 a?os) profundiza en Greenlights (Luces verdes), su autobiograf¨ªa. El libro, publicado en espa?ol por C¨²pula, es una mezcla entre los diarios que comenz¨® a escribir a los 15 a?os, an¨¦cdotas de su vida y carrera y algunos elementos de la literatura de superaci¨®n personal. ¡°Puede ser autoayuda, pero tambi¨¦n puede ser optimismo implacable¡±, dice de buen humor McConaughey, quien se refiere por momentos a s¨ª mismo en tercera persona, y aparece en la videollamada de Zoom con gafas de sol y el pelo largo sujetado con una liga. A su espalda una bandera de Estados Unidos y decenas de ejemplares de su libro, que se ha convertido en un ¨¦xito de ventas gracias a la transparente ventana al interior de una celebridad.
¡°Los mejores momentos del libro son cuando soy m¨¢s personal. Y a m¨¢s intimidad m¨¢s hablo a la gente sobre lo que es ser humano¡±, reflexiona McConaughey, quien muestra su poder de narrador describiendo el violento ambiente familiar en el que creci¨® y las salvajes peleas y malos tratos entre su madre, Katy, y su padre, Jim. En una de estas, la discusi¨®n comenz¨® a la hora de la cena. ?l tir¨® enfurecido la mesa por los gritos de Katy, a quien persigui¨® por la cocina. Ella busc¨® un cuchillo y lo amenaz¨® con cortarlo en dos, pero termin¨® golpe¨¢ndolo con el tel¨¦fono y rompi¨¦ndole la nariz. Jim, de 1,90 metros y casi 100 kilos, la ba?¨® en salsa de tomate como respuesta. ¡°Se dejaron caer hasta quedar de rodillas, hasta el suelo de lin¨®leo lleno de sangre y k¨¦tchup¡ e hicieron el amor¡±, escribe McConaughey.
Algunos lectores han confesado el esc¨¢ndalo que les han producido algunos relatos de la casa de los McConaughey, un matrimonio que se divorci¨® dos veces y se cas¨® tres entre ellos. Jim le rompi¨® a Katy el dedo coraz¨®n en cuatro ocasiones. Tambi¨¦n se lio a golpes con su primog¨¦nito Mike y estuvo cerca de hacerlo con Matthew como parte de un rito de masculinidad que hoy ser¨ªa calificado de t¨®xico. A pesar de esto fue una figura muy importante en su vida que nunca lo vio triunfar. Muri¨® teniendo sexo con su esposa antes de que McConaughey debutara.
¡°Tenemos que bajarnos de esa nube de que el amor y el romance es solo belleza y suavidad. El amor es duro. Mis padres ten¨ªan momentos feos, pero estos nunca superaron al amor que se ten¨ªan¡±, afirma McConaughey, quien dice haber utilizado estas historias para apuntalar su teor¨ªa de las luces verdes, la necesidad de cruzar por una experiencia para ver el resultado al otro lado desde una nueva perspectiva. ¡°Aqu¨ª es donde la gente cree que es el punto donde todo estalla, donde inicia el triste final de algo. Pero no. As¨ª es como ellos se comunicaban¡±, se?ala. ?l y su esposa, la modelo brasile?a Camila Alves, a?ade, ¡°no practican el castigo corporal¡± con sus tres hijos, de 8, 11 y 13 a?os. ¡°No juzgo a mis padres por haberlo utilizado. No nos castigaban porque los castigos quitan tiempo y el tiempo es el bien m¨¢s preciado. Eso es una gran filosof¨ªa. As¨ª que dec¨ªamos ¡®hazlo si es r¨¢pido y no hay mucho dolor¡¯. Despu¨¦s segu¨ªamos adelante y no volv¨ªamos a hablar de ello nunca m¨¢s¡±.
McConaughey muestra en Greenlights su lado m¨¢s ¨ªntimo, pero evita el morbo. Deja fuera sus relaciones amorosas previas a su matrimonio. Tampoco profundiza en algunos momentos de dolor, donde la prensa ha picado. ¡°Algunas de esas historias no son para que yo las cuente. Las alcobas tienen puertas por un motivo¡±, cuenta con su inconfundible acento sure?o. ¡°Si desarrollaba las historias de c¨®mo me obligaron a tener sexo a los 15 a?os o de c¨®mo abusaron de m¨ª cuando ten¨ªa 17 esos ser¨¢n los titulares. El libro no va de eso. Eso convertir¨ªa a mis lectores en voyeurs [mirones] de mi historia¡±, afirma.
En lo que s¨ª profundiza es en el inicio de una exitosa carrera cinematogr¨¢fica, a la que nunca se sinti¨® llamado. McConaughey era el chico guapo que sal¨ªa a divertirse con sus compa?eras en su pickup en un peque?o pueblo tejano a mitad de camino entre San Antonio y la frontera con M¨¦xico. Toda su juventud quiso ser abogado y entr¨® en la Facultad de Derecho en Austin, la capital del Estado. ¡°Antes de los 17 solo hab¨ªa visto dos pel¨ªculas. La fantas¨ªa u otra cosa que no fuera la realidad era materia de mis sue?os¡±, afirma. En el segundo a?o de la carrera el camino comenz¨® a hacerse cuesta arriba y decidi¨® dejarlo para comenzar a estudiar cine despu¨¦s de leer un libro de autoayuda de Og Mandino. Comenz¨® a ir a audiciones para convertirse en actor, pero segu¨ªa sin ver cine. ¡°Empec¨¦ a ver cosas de Paul Newman despu¨¦s de que comenzara a actuar y la gente me dijera que les recordaba a ¨¦l¡±, confiesa.
Una de esas comparaciones lleg¨® poco despu¨¦s de que apareciera por primera vez en una pantalla de cine. Lo hizo en 1992 gracias a Don Phillips, a quien conoci¨® tomando vodkas en un hotel de Austin. Phillips estaba en la ciudad produciendo Dazed & Confused (Movida del 76), de Richard Linklater y le bastaron pocos minutos para ver en McConaughey a Wooderson, un cr¨¢pula fumador de marihuana a quien le gustaba salir con chicas del instituto a pesar de haber egresado varios a?os atr¨¢s. Fue en ese papel, en las primeras l¨ªneas que dijo nunca, que acu?¨® su famoso ¡°all right, all right, all right¡± (bueno, bueno, bueno), que ha sido su sello durante casi 30 a?os.
Pasaron seis a?os y unas 12 pel¨ªculas para que McConaughey recibiera clases formales de actuaci¨®n. Lo hizo en 1998 cuando Phillips, su amigo y compa?ero de golf, le recomend¨® asistir para ¡°bajar su handicap a cerca de cero¡±. As¨ª comenz¨® a trabajar con Penny Allen, una veterana actriz y maestra de actores a quien visit¨® semanalmente durante 19 a?os. ¡°Esa fue mi primera clase de actuaci¨®n¡±, dice con picard¨ªa.
Greenlights es tambi¨¦n un intento de su autor por luchar con la idea de todo le ha sido f¨¢cil. ¡°En mis a?os de comedias rom¨¢nticas hab¨ªa una percepci¨®n de m¨ª, y creo que a¨²n la hay, de que McConaughey se levanta por la ma?ana y solo se para frente a la c¨¢mara para decir ¡®?cu¨¦ntenme, qu¨¦ vamos a hacer hoy?¡±, indica. Sin embargo, son contados los casos de quienes como ¨¦l pudieron decir no a Hollywood y siguen vivos para contarlo. Durante 20 meses rechaz¨® guiones en un intento de dar un viraje y alejarse de los roles de gal¨¢n. Al otro lado de esa luz verde estaban Dallas Buyers Club, Mud, Magic Mike, El lobo de Wall Street y True Detective. El propio actor acu?¨® una palabra para su periodo sab¨¢tico y su renacimiento: lo llam¨® McCoinassance.
McConaughey se ha convertido hoy en una presencia habitual en las redes sociales gracias a la presentaci¨®n de su libro, que lleva ocho meses promocionando sin salir de casa. El actor coquetea con la idea de presentarse a las elecciones para gobernador de Texas en 2022, pero dice que no haber tomado a¨²n la decisi¨®n. Asegura que a su edad le ¡°importa un bledo¡± si la gente nota o no si se ha preparado un papel. ¡°He trabajado igual de duro en las comedias rom¨¢nticas que en Dallas Buyers Club¡±, asegura, y a?ade: ¡°Cuando me dicen que me interpret¨¦ a m¨ª mismo es el mejor halago que me pueden hacer¡±.
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