Salvar la Sala Dor¨¦
Zardoya-Otis: factur¨® 3.700 millones
Los espa?oles tuvieron once horas para votar
Nace la Asociaci¨®n de Vecinos Embajadores-Pe?uelas
Acusaciones de los nacionalistas rodesianos a Gran Breta?a y USA
Los estudiantes de la rama de Imagen
Dimite la junta sindical de Iberia
Concepci¨®n Su¨¢rez y Enrique Ramirez,
Viren, operado
Libro rojo de las empresas de obras p¨²blicas
Trato discriminatorio para Almer¨ªa
Sevilla: numerosa afluencia
Los camioneros canarios
La Copa cambiar¨¢ de nombre definitivamente
Se celebr¨® el claustro de la Universidad de Salamanca
CIC: aumentaron las operaciones
Atentado a una librer¨ªa de Barcelona
Vigo: detenci¨®n de cuatro abstencionistas
Arruza, contratado para las principales ferias
Tercera dimisi¨®n
Mar¨ªa Fernanda G. de Nadal,
EI nuevo presupuesto, un intento para salvar la libra
Un trotskista, en la direcci¨®n laborista
Lugar y oficio de la pintura de Broto
Lugar y oficio de la pintura de Broto. Ambito ideal esta muestra para la reflexi¨®n sobre algunas cuestiones que no son caras. Reflexi¨®n que la pintura misma, y no s¨®lo su ?teor¨ªa?, est¨¢ propiciando en la medida en que es objeto de conocimiento. No perdamos, por tanto, de ?vista? la pintura; no nos dejemos retrotraer a otros tiempos en que, por mec¨¢nica de ese desgraciado sambenito del soporte y la superficie, se barajaban hip¨®tesis sobre el car¨¢cter ?correcto? o ?no correcto? de lo que se daba a ver. Aqu¨ª se da a ver; un pintor que dentro del grupo de Trama aparece ya como el m¨¢s maduro; alguien sobre el que Federico Jim¨¦nez, parafraseando a Boc¨¢ngel, nos dice que ?tiene por oficio, que no por privilegio, la hermosura?.Me parecen datos m¨¢s que de sobra para justificar (no aqu¨ª, ya que estas columnas, dif¨ªcilmente podr¨¢n ser escenario del goce anal¨ªtico) un an¨¢lisis en profundidad. En todo caso, datos a contraponer a la falta de reacci¨®n del buen p¨²blico capitalino, el cual decididamente no parece dispuesto a compartir la hermosura (cuya privacidad y privilegio se mantendr¨¢n as¨ª en contra de lo deseado) ni a ?terminar? estos cuadro espl¨¦ndidos m¨¢s que por una palabra ignorante o un silencio muy expl¨ªcito, reacciones que nos recuerdan lo que la teor¨ªa art¨ªstica china dice del mal p¨²blico al que no conviene ense?arle, ni siquiera materialmente, la pintura: en castellano, margaritas comidas por cerdos.