Misiles sovi¨¦ticos contra EE UU.
?Sabiduria o decadencia?
Comienza a funcionar en Ibiza una nueva 'universidad' internacional del Mediterraneo
El coordinador niega que se trate de una r¨¦plica pol¨ªtica a la UIMP
El presidente navarro, a favor de "un enfrentamiento radical con ETA"
El polic¨ªa que retir¨® la bomba del autob¨²s turco confiesa haberla colocado ¨¦l mismo
Fernando Mor¨¢n abandona la cl¨ªnica donde fue operado
Thorn, en la Costa Brava.
La Xunta crea un cuerpo aut¨®nomo de polic¨ªa para controlar la actividad pesquera
Duro enfrentamiento entre la polic¨ªa aut¨®noma vasca y grupos independentistas que agredieron a las autoridades donostiarras
Miles de polacos conmemoran el cuarto aniversario de las huelgas de Gdansk
Lo sagrado y lo mundano en el verano art¨ªstico Munich
Belfast vive la mayor manifestaci¨®n de protesta cat¨®lica desde 1981
Dos j¨®venes asaltan al corresponsal del peri¨®dico 'Frankfurter Allgemeine'
Belisario Betancur condena el ataque del M-19 contra Yumbo
De las 600 obras
Prohibida la manifestaci¨®n de Hendaya en apoyo de los refugiados
La televisi¨®n sovi¨¦tica dice que la broma de Reagan demuestra el bajo nivel de sus ideas
Un pesquero brit¨¢nico
Detenidos dos incendiarios.
Ingresan en una prisi¨®n de Mauritania los 16 tripulantes del pesquero 'Cigala ll'
La Administraci¨®n asigna 1.300 millones m¨¢s de inversiones en Canarias
Las donaciones de ¨®rganos
Las donaciones de ¨®rganos. LA MUCHA frecuencia con que se publican noticias acerca de trasplantes de ¨®rganos vitales puede confundir con respecto a la existencia de donaciones post m¨®rtem: la realidad es que en Espa?a siguen siendo muy reducidas (y en algunos casos hasta hay que acudir a importaciones del extranjero). La abundancia de las informaciones est¨¢ claramente justificada por la importancia cient¨ªfica del hecho y de sus avatares posteriores, y por la expectativa de salvaci¨®n: todos somos enfermos en potencia, incluso con seguridad de ello para un futuro m¨¢s o menos lejano. En cambio, no todos nos consideramos como salvadores, o como donantes. Es una situaci¨®n psicol¨®gica muy conocida, y quiz¨¢ mayor en ¨¦pocas en las que disminuyen los valores de abnegaci¨®n, sacrificio y amor ajeno. Muchas personas creen que estamos atravesando por una de esas etapas, como consecuencia de una mayor concurrencia por sobrevivir que puede reflejarse en una actitud m¨¢s general de lejan¨ªa al pr¨®jimo.La realidad es que los trasplantes no son todav¨ªa mas que casos -y el hecho de que se informe de ellos revela que son noticia, algo fuera de lo normal, y no pr¨¢ctica com¨²n de la medicina- y los donantes siguen siendo muy raros. Ejemplos como los del joven de 22 a?os Tom¨¢s Goyer Alvarez, que leg¨® para trasplantes todo lo que se pudiera utilizar de su cuerpo -y fue utilizado, en efecto, cuando muri¨® en accidente de tr¨¢fico, a principio de este mes-, son muy escasos. La disposici¨®n invirtiendo la legalidad de la utilizaci¨®n del cad¨¢ver -todo cuerpo podr¨¢ ser utilizado para trasplantes de ¨®rganos de no existir una declaraci¨®n explicita en contra; en lugar de exigir la declaraci¨®n positiva a favor- no ha dado suficientes resultados, y en algunos centros se in siste en la cesi¨®n de los familiares sup¨¦rstites, por miedo a complicaciones legales posteriores y hasta por delicadeza. La introducci¨®n de la burocracia es probablemente justa en teor¨ªa, pero inquietante en la pr¨¢ctica: el Ministerio de Sanidad ha compuesto una comisi¨®n ministerial para saber en cu¨¢les de los centros que de ¨¦l de penden, y en cu¨¢les no, se podr¨¢n realizar los trasplantes vitales, y advertido de la necesidad de su autorizaci¨®n mediante una circular. Parece l¨®gico que Sanidad requiera unas garant¨ªas t¨¦cnicas y materiales, y una solvencia profesional de su personal, cuando se trata de operaciones en las que la vida de alguien dependa de esos elementos; pero la realidad es que en todos los centros se realizan diariamente, por necesidad perentoria, operaciones a vida o muerte en las que no intervienen trasplantes sin que tengan que estar vigiladas o autorizadas por comisi¨®n especial alguna. El resultado, hasta ahora, es el de un considerable bloqueo o retraso en algunos centros -como pasa en el de,Naldecilla (Cantabria), que se considera a s¨ª mismo capacitado para trasplantes, incluso de coraz¨®n-, lo que significa que precisamente la muerte puede alcanzar en ese retraso a quien est¨¢ esperando el trasplante como ¨²ltima sal vaci¨®n.