Un yacimiento mineral de Lleida que atesora obras de Bill Viola, Anselm Kiefer o Chiharu Shiota

En 1995 la artista Chiharu Shiota (Osaka, Jap¨®n, 49 a?os) colg¨® de una hebra de lana su propio cord¨®n umbilical, conservado por su madre desde el parto como dicta una tradici¨®n japonesa. Era una instalaci¨®n en un templo budista de Kioto y una de sus primeras obras con hilos, evoluci¨®n natural de una ...

En 1995 la artista Chiharu Shiota (Osaka, Jap¨®n, 49 a?os) colg¨® de una hebra de lana su propio cord¨®n umbilical, conservado por su madre desde el parto como dicta una tradici¨®n japonesa. Era una instalaci¨®n en un templo budista de Kioto y una de sus primeras obras con hilos, evoluci¨®n natural de una performance en la que, siendo a¨²n estudiante de arte, era ella misma la que quedaba sujeta al techo por un simb¨®lico cord¨®n umbilical de lana roja. A lo largo de su carrera, Shiota ha atado elementos como patas de pollo, mu?ecos, zapatos, sillas, barcas o pianos de cola.

Ahora vuelve a los or¨ªgenes: en In The Beginning Was¡­, la instalaci¨®n que acaba de inaugurar en el complejo art¨ªstico Planta de Lleida (la primera suya de car¨¢cter permanente en Europa), lo que suspende de una mara?a de hilo negro es una tonelada y media de piedras reci¨¦n salidas del yacimiento que queda justo al lado.

Planta es un proyecto del grupo empresarial catal¨¢n de materiales de construcci¨®n Sorigu¨¦ y su fundaci¨®n. Consta de una serie de pabellones que contienen instalaciones de gran formato firmadas por artistas internacionales como Anselm Kiefer, Juan Mu?oz o William Kentridge. Es un conjunto de obras de dimensiones y relevancia inusuales, pero lo peculiar del caso es que se integran entre las naves industriales del mayor centro de producci¨®n de la empresa, ubicado a las afueras de Lleida: una inmensa gravera de la que se extrae la roca que permite elaborar hormigones y otros materiales constructivos.

Cuando a Chiharu Siota ¨Cque reside en Berl¨ªn y en 2015 represent¨® a Jap¨®n en la Bienal de Venecia¨C le ofrecieron aportar una obra a Planta, su punto de partida fue el ruido de los cantos rodando por los c¨²mulos de piedra: ¡°Me pareci¨® un sonido tan bello que de ah¨ª vino la noci¨®n del t¨ªtulo¡±, explica, sobre la frase que juega con el primer vers¨ªculo del Evangelio seg¨²n San Juan (¡°En el principio era el Verbo¡±).

Para ella, sin embargo, la referencia cristiana no es tan importante como el pensamiento de que originalmente todo es una misma materia, todo proviene de lo mismo, tanto las piedras como los seres humanos. Y podr¨ªa argumentarse que esa es una idea tan radical como la que en su d¨ªa le llev¨® a desafiar las convenciones culturales de su pa¨ªs utilizando su cord¨®n umbilical en una obra de arte.

Cuando el espectador entra en el pabell¨®n de Shiota, un paralelep¨ªpedo de 13 por 11 metros y otros 10 de altura, tiene la sensaci¨®n de adentrarse en una gigantesca tela de ara?a donde las piedras fueran v¨ªctimas listas para un banquete entomol¨®gico. Pero no es esa la intenci¨®n de la autora, que habla m¨¢s bien de preservar algo, un recuerdo o una sensaci¨®n, que de devorarlo: ¡°Los hilos son una conexi¨®n, eso es lo importante¡±. Esto enlazar¨ªa con la leyenda japonesa del hilo rojo que conecta a quienes est¨¢n destinados a encontrarse. La artista ha utilizado el color rojo en muchas otras instalaciones, m¨¢s ligadas a lo emocional, mientras que aqu¨ª el negro aporta un enfoque m¨¢s abstracto y filos¨®fico.

Es parca en palabras aunque, si se le presta atenci¨®n, su obra resulta siempre muy expl¨ªcita acerca de sus intenciones y su propia biograf¨ªa. Si durante gran parte de su carrera realiz¨® performances (el trabajo de Ana Mendieta ha sido una de sus fuentes de inspiraci¨®n, y durante a?os fue colaboradora de Marina Abramovi?), tras el nacimiento de su hija hace 14 a?os decidi¨® que no pod¨ªa seguir entregando su cuerpo a esa actividad, por lo que se limit¨® a seguir explorando las posibilidades de las instalaciones con hilos.

El doble trauma de un aborto y la muerte de su padre la llevaron a reincidir fugazmente en la performance con los v¨ªdeos de Earth & Blood, un trabajo que pudo verse en NF/Nieves Fern¨¢ndez, su galer¨ªa de Madrid, en 2014. Haber atravesado hasta en dos ocasiones la ordal¨ªa de un c¨¢ncer tambi¨¦n ha tenido impacto en sus temas y enfoques. ¡°Todo lo que le sucede personalmente afecta a su trabajo¡±, resume Nerea Fern¨¢ndez, codirectora de la galer¨ªa.

De hecho, durante el montaje de sus obras siempre trabaja con el mismo equipo, compuesto por las hermanas Christina y Athena Tsantekidou, con las que no se desgaja ya la relaci¨®n personal de la profesional. Sin embargo, en su instalaci¨®n para Planta este n¨²cleo se ha ampliado con un contingente de trabajadores de Sorigu¨¦, que montaron una estaci¨®n de perforaci¨®n para agujerear cada una de las piedras de manera que pudieran ser atravesadas por los hilos.

Entre los primeros que se han adentrado en la propuesta de Shiota est¨¢n precisamente los 200 empleados de la empresa y sus familiares, que han solicitado una visita especial. Los trabajadores y departamentos de Sorigu¨¦ siempre se involucran en las actividades de Planta, una tipolog¨ªa de proyecto art¨ªstico en un centro de trabajo del que existen pocos casos en nuestro pa¨ªs.

Por ejemplo, el pabell¨®n que alberga Ocean WIthout a Shore, una espectacular videoinstalaci¨®n del norteamericano Bill Viola, se erigi¨® empleando tierra prensada seg¨²n un m¨¦todo constructivo inventado para la ocasi¨®n, que adem¨¢s incide en el objetivo de la sostenibilidad: ¡°Lo ide¨® nuestro departamento de Innovaci¨®n utilizando un subproducto que es b¨¢sicamente arena¡±, explica Ana Vall¨¦s, presidenta de Sorigu¨¦ y principal impulsora de su proyecto art¨ªstico.

La Fundaci¨®n Sorigu¨¦ ha acumulado una colecci¨®n de arte compuesta por unas 250 piezas, pero la evoluci¨®n que permiti¨® el nacimiento de Planta fue gradual. Aunque el centro comenz¨® a recibir al p¨²blico en 2018, su origen se ubica a principios de la pasada d¨¦cada, cuando se abri¨® el primer pabell¨®n art¨ªstico con tres piezas monumentales del pintor alem¨¢n Anselm Kiefer. Despu¨¦s llegar¨ªan las instalaciones de Juan Mu?oz, Bill Viola y William Kentridge, y por fin le lleg¨® el turno a Chiharu Shiota. Todas tienen en com¨²n un impactante elemento escenogr¨¢fico, y unas dimensiones que no har¨ªan posible su emplazamiento en otros centros de arte m¨¢s convencionales.

Quiz¨¢ la m¨¢s excepcional de todas ellas sea la de Juan Mu?oz. Se trata de una reproducci¨®n de Double Bind, ¨²ltima obra del escultor espa?ol fallecido en 2001, cuando a¨²n se estaba exponiendo en la sala de turbinas de la Tate Modern de Londres. La complej¨ªsima tramoya del original pudo instalarse en uno de los pabellones de Planta gracias a la cesi¨®n durante cinco a?os por parte del legado de Mu?oz, encabezado por su viuda, la tambi¨¦n artista Cristina Iglesias. Faltan dos a?os para que venza el plazo del pr¨¦stamo, aunque Ana Sorigu¨¦ cree factible la ampliaci¨®n: ¡°Nos encantar¨ªa que se quedara m¨¢s tiempo, y es probable que as¨ª sea, pero eso depende de los herederos del artista¡±. Si tuviera que salir, hay un plan B art¨ªstico para la enorme nave: la idea ser¨ªa instalar en ¨¦l la colecci¨®n de la Fundaci¨®n, que por el momento permanece en sus almacenes de Lleida.

Esas instalaciones custodian tambi¨¦n al que ser¨¢ el pr¨®ximo inquilino de Planta. Se trata de una obra del argentino Tom¨¢s Saraceno, otro artista conocido por sus trabajos con cuerdas, que en este caso no reh¨²ye los paralelismos con las telas de los ar¨¢cnidos. La pieza que se instalar¨¢ en Lleida ya form¨® parte de la carta blanca que le dedic¨® hace dos a?os el parisino Palais de Tokyo, y a¨²n no se ha decidido su ubicaci¨®n exacta en el complejo ni la fecha en que se inaugurar¨¢.

Planta cerr¨® sus puertas en marzo de 2020 debido a la pandemia, pero el pr¨®ximo 12 de junio volver¨¢ a abrir al p¨²blico general bajo cita previa a trav¨¦s de la web. Entre tanto, la Fundaci¨®n Sorigu¨¦ est¨¢ produciendo dos pel¨ªculas. Una la dirige el cineasta alem¨¢n Wim Wenders, que ya expuso sus fotograf¨ªas en el centro de arte de la Fundaci¨®n en 2013. Y la otra es un proyecto del documentalista nacido en Italia Armin Linke (en cuya exposici¨®n actual en el Matadero de Madrid tambi¨¦n ha colaborado Sorigu¨¦), que se centra en el antropoceno y el impacto de la huella humana en el cambio clim¨¢tico. Es otra forma de divulgar el proyecto entre un p¨²blico m¨¢s amplio, y de generar emociones m¨¢s all¨¢ del arte en directo.

Ese parece ser el propio objetivo de Chiharu Shiota cuando valora el impacto de su obra en cada espectador que la contempla: ¡°Cada persona es distinta¡±, afirma. ¡°Y si vienen cien personas, ser¨¢n cien emociones diferentes¡±.