La estrella del f¨²tbol americano y la novia muerta que jam¨¢s existi¨®: as¨ª fue el gran enga?o a Manti Te¡¯o
¡®Secretos del deporte: la novia que no exist¨ªa¡¯, junta por primera vez a Manti Te¡¯o y a la persona que hace m¨¢s de una d¨¦cada lo enga?¨® y enamor¨® en una falsa relaci¨®n por internet que se convirti¨® en un chiste internacional
A principios de la pasada d¨¦cada, Manti Te¡¯o (Laie, Haw¨¢i, 31 a?os) era la estrella del hist¨®rico equipo de f¨²tbol americano de la Universidad de Notre Dame (Indiana). Sports Illustrated lo lleg¨® a nombrar ¡°su coraz¨®n emocional y f¨ªsico¡± en una apasionada loa en la que, de paso, destacaba el delicado momento emocional que atravesaba el deportista en octubre de 2012: su adorada abuela y su novia hab¨ªan fallecido con apenas seis horas de diferencia.
Te¡¯o hab¨ªa mantenido durante casi un a?o una relaci...
A principios de la pasada d¨¦cada, Manti Te¡¯o (Laie, Haw¨¢i, 31 a?os) era la estrella del hist¨®rico equipo de f¨²tbol americano de la Universidad de Notre Dame (Indiana). Sports Illustrated lo lleg¨® a nombrar ¡°su coraz¨®n emocional y f¨ªsico¡± en una apasionada loa en la que, de paso, destacaba el delicado momento emocional que atravesaba el deportista en octubre de 2012: su adorada abuela y su novia hab¨ªan fallecido con apenas seis horas de diferencia.
Te¡¯o hab¨ªa mantenido durante casi un a?o una relaci¨®n con una mujer llamada Lennay Kekua, una atractiva hawaiana de ojos rasgados, aunque la mayor parte de ese tiempo ella hab¨ªa permanecido hospitalizada a causa de un grave accidente de coche. Apenas un par de meses despu¨¦s le hab¨ªan diagnosticado leucemia. ?l viv¨ªa en Indiana y ella en California: hablaban por tel¨¦fono a diario. Ella era su principal apoyo y ¨¦l la acompa?aba en su enfermedad. ¡°Los familiares de Lennay contaron que en sus momentos m¨¢s bajos, mientras luchaba por salir del coma, su ritmo respiratorio aumentaba al o¨ªr la voz de Te¡¯o¡±, revelaba la publicaci¨®n.
Tras el fallecimiento, los seguidores de Notre Dame acudieron al campo ataviados con leis, la tradicional guirnalda hawaiana. Aquella tarde el jugador hizo su mejor partido y se lo dedic¨®: ¡°Estoy muy contento de haber tenido la oportunidad de homenajear a mi abuela, a mi novia y a mi familia¡±. No asisti¨® al funeral porque ¡°todo lo que ella quer¨ªa era que le enviase unas rosas blancas¡±.
Nominado a los premios m¨¢s importantes del a?o y responsable de la mejor temporada de Notre Dame en d¨¦cadas, Te¡¯o era tambi¨¦n un devoto morm¨®n volcado en su familia. Su imagen, tan alejada de los excesos habituales de las estrellas universitarias, hac¨ªa que los patrocinadores se frotasen las manos. Hasta que la web deportiva Deadspin recibi¨® un correo an¨®nimo que hizo saltar todo por los aires.
Una ¡°muerte¡± para evitar el rid¨ªculo
¡°Aunque Manti Te¡¯o es un hijo muy querido aqu¨ª en Haw¨¢i, tambi¨¦n es un fraude. La historia de la muerte de su novia es completamente inventada. La historia que circula por la isla es esta: Manti fue enga?ado por un hombre que se hac¨ªa pasar por una chica. Cuando Manti descubri¨® que lo hab¨ªan enga?ado, se invent¨® la historia de que ella hab¨ªa muerto para que nadie hiciera preguntas y evitar el rid¨ªculo¡±.
Los reporteros Timothy Burke y Jack Dickey empezaron a tirar del hilo y no tardaron en descubrir que algo no encajaba. Lennay Kekua parec¨ªa existir solo en relaci¨®n a Manti Te¡¯o, carec¨ªa de huella digital, no hab¨ªa ninguna informaci¨®n sobre ella al margen de las declaraciones del jugador. Tambi¨¦n las fechas y los detalles rom¨¢nticos de la relaci¨®n variaban de una entrevista a otra cuando los contaba Te¡¯o.
En enero de 2013, la web solt¨® la bomba: ¡°La novia muerta de Manti Te¡¯o, la historia m¨¢s desgarradora e inspiradora de la temporada de f¨²tbol americano universitario, es un bulo¡±. La persona a la que el jugador hab¨ªa estado unido emocionalmente durante un a?o era realmente Ronaiah Tuiasosopo, un exquarterback reconvertido en m¨²sico que actuaba regularmente en una iglesia fundamentalista y pertenec¨ªa al c¨ªrculo de amistades del jugador.
Manti Te¡¯o hab¨ªa sido v¨ªctima de catfish, o sea, alguien hab¨ªa creado una personalidad falsa para seducirlo. Una pr¨¢ctica que debe su nombre al documental Catfish. Mentiras en la red, en el que el fot¨®grafo Nev Schulman descubr¨ªa ante las c¨¢maras que la mujer de la que se hab¨ªa enamorado a trav¨¦s de Facebook no era una estudiante de 19 a?os, sino un ama de casa de 40, casada y con hijos. El documental dio paso a un programa que ya va por su octava temporada en MTV y cuenta con una versi¨®n en el Reino Unido, lo que da una medida de la popularidad de la pr¨¢ctica y nos conduce a una pregunta inevitable: ?qu¨¦ lleva a una persona a fingir una personalidad para seducir a otra? ¡°Las razones por las que alguien elabora un relato de s¨ª mismo idealizado pueden ser de lo m¨¢s variado¡±, explica la psic¨®loga Beatriz Cuervo, ¡°desde una pura cuesti¨®n econ¨®mica hasta una perversa din¨¢mica de poder donde seducir nos devuelve una imagen de nosotros mejorada, deseable: somos en tanto que conseguimos¡±.
El catfishing siempre ha estado ah¨ª. Hace 20 a?os encontraba su sustrato en los primitivos canales del IRC-Hispano, hace 30 en el hoy olvidado party-line telef¨®nico que reun¨ªa a 10 desconocidos en l¨ªnea, y siempre ha anidado en los anuncios de contactos de los medios escritos. La tecnolog¨ªa es secundaria, cualquier mecanismo que favorezca el encuentro entre desconocidos abre la puerta de acceso a los estafadores emocionales.
Como suele ser habitual en esta pr¨¢ctica, para dar credibilidad a su personaje, Ronaiah Tuiasosopo hab¨ªa utilizado la foto de una mujer real, en este caso Diane O¡¯Meara, una amiga del colegio que era absolutamente ajena al romance fraudulento. Un d¨ªa su amigo le hab¨ªa pedido una foto para ¡°animar¡± a un primo enfermo y ella accedi¨®. Tuiasosopo la utiliz¨® para crear perfiles en Instagram, Twitter y Facebook y acceder as¨ª al objeto de su devoci¨®n. Tambi¨¦n cont¨® con la colaboraci¨®n de dos amigos que se comunicaban con Te¡¯o haci¨¦ndose pasar por familiares de Lennay que incluso hablaban regularmente con el entorno del jugador, y siguieron haci¨¦ndolo tras la muerte de ella.
Todos los medios se hicieron eco del esc¨¢ndalo y la pregunta obvia. Si Lennay Kekua era una invenci¨®n, pero Te¡¯o afirmaba en varias entrevistas haberla conocido, ?estaba tambi¨¦n implicado? ?Hab¨ªa sido todo un ardid del jugador para aumentar su popularidad? La realidad era m¨¢s triste. Seg¨²n confes¨®, era por la verg¨¹enza que le produc¨ªa aceptar que se hab¨ªa enamorado de una mujer a la que no hab¨ªa visto jam¨¢s. ¡°P¨®nganse en mi lugar¡±, declar¨® a Katie Couric en la ABC. ¡°Acabo de descubrir que mi novia es una gran broma y yo soy un chico de 21 a?os al que le hacen preguntas en la televisi¨®n nacional apenas dos d¨ªas despu¨¦s de descubrir la verdad¡±.
La enfermedad es un tema recurrente en los catfish: no solo sirve para tejer una red emocional m¨¢s profunda con el enga?ado, sino tambi¨¦n para posponer el inevitable momento en el que, tras conocerse, se rompe el enga?o. La muerte es la mejor manera de deshacerse de una personalidad falsa sin dejar huellas. Pero en este caso fue a¨²n m¨¢s enrevesado.
Tres semanas antes de que se publicara el art¨ªculo, Te¡¯o les hab¨ªa confesado a sus padres que su novia, a la que cre¨ªa fallecida desde hac¨ªa meses, lo hab¨ªa llamado para informarle de que no estaba realmente muerta, sino que hab¨ªa fingido su fallecimiento para enga?ar a unos traficantes de drogas que pretend¨ªan asesinarla. La huida hacia adelante es otra de las caracter¨ªsticas del catfish. Los padres contactaron con el agente de las estrellas Tom Condon para que, junto a la Universidad de Notre Dame, elaborase un plan para proteger la imagen del jugador. No lleg¨® a tiempo. Tras el bombazo de la exclusiva de Deadspin, Te¡¯o confes¨® todos los detalles de la falsa relaci¨®n.
La prensa no perd¨ªa de vista ni a Te¡¯o ni al art¨ªfice del enga?o, Ronaiah Tuiasosopo. Tras especular con un montaje, una venganza por alguna cuita del pasado o simplemente una broma pesada, el propio Tuiasosopo confes¨® la realidad en el programa del Dr. Phill: estaba ¡°profunda y rom¨¢nticamente enamorado de Te¡¯o¡±. ¡°Despu¨¦s de todo lo que hab¨ªa pasado quer¨ªa terminar la relaci¨®n, finalmente me di cuenta de que ten¨ªa que seguir adelante con mi vida¡±. Y a?adi¨®: ¡°Tuve que empezar a vivir y dejar ir esto. Hubo muchas veces en las que Manti y Lennay hab¨ªan roto, pero algo los volver¨ªa a unir, ya fuera algo que estuviera pasando en su vida o en la vida de Lennay o, en este caso, en mi vida¡±. Para mostrar los mecanismos de su ardid, durante el programa incluso habl¨® con la voz femenina que hab¨ªa encandilado a Te¡¯o.
?Qu¨¦ lleva a alguien a mantener una charada as¨ª a¨²n sabiendo que va a ser descubierto? ¡°Muchos de los mecanismos que mantienen la mentira pueden ser inconscientes, no racionales, lo que hace m¨¢s dif¨ªcil que lleguemos a plantearnos las consecuencias emocionales, e incluso legales, que puede acarrear, y desde luego, mucho menos que nos pongamos en el lugar del seducido. Adem¨¢s, una vez iniciado un relato, aunque sea mentira, tenemos tendencia a comprometernos con ¨¦l. Nos cuesta admitir que hemos ido demasiado lejos, que podemos habernos equivocado, incluso aunque solo lo tengamos que admitir ante nosotros mismos¡±, explica Cuervo. Seg¨²n el entorno del embaucador a la web TMZ, Tuiasosopo, que estaba intentando recuperarse de su homosexualidad, hab¨ªa inventado el personaje de Kekua para normalizar sus sentimientos hacia los hombres.
Manti Te¡¯o pas¨® de provocar pena a despertar sospechas y su cotizaci¨®n se fue diluyendo. ¡°No puedo esperar hasta el d¨ªa en que pueda volver a encender la televisi¨®n o leer la p¨¢gina de deportes sin ver esta historia sobre m¨ª¡±, se lamentaba.
Su vida se desmoron¨®. ¡°Me fui a casa, me met¨ª en la cama e intent¨¦ afrontarlo. Pero cuando sal¨ªa me daba cuenta de que la gente me miraba. Pod¨ªa o¨ªrlos susurrar sobre m¨ª¡±, declar¨® a la cadena ABC. Que la relaci¨®n hubiese sido un trampantojo no atenuaba el dolor. ¡°Si se te muere alguien a quien quieres y descubres que la persona no es real, que todo es una gran broma, sigues sintiendo la p¨¦rdida de esa persona. La relaci¨®n, para m¨ª, era real. La enfermedad, el accidente, su muerte... todo eso era real. As¨ª que mis sentimientos al respecto eran reales¡±.
Te¡¯o toc¨® fondo, pero el suyo no es el ¨²nico caso de un famoso seducido fraudulentamente. El actor Thomas Gibson, protagonista de Mentes criminales y Dharma y Greg, inici¨® en 2011 una relaci¨®n con una mujer a la que conoci¨® v¨ªa Twitter. Durante dos a?os estuvieron hablando y envi¨¢ndose fotos y v¨ªdeos hasta que ¨¦l descubri¨® que los de ella estaban sacados de una web pornogr¨¢fica. La mujer de la que se hab¨ªa enamorado no exist¨ªa, pero la real se dedic¨® a enviar las im¨¢genes m¨¢s comprometedoras del actor a la web TMZ.
El catfish no distingue entre an¨®nimos y famosos. ¡°La necesidad de encajar, de ser ¡®reconocidos¡¯ por lo que somos es algo b¨¢sico en el ser humano. ?Qu¨¦ hay m¨¢s reconfortante que ser aceptados?¡±, explica Cuervo. ¡°Encontrar un lugar seguro donde poder ser quienes somos, donde abrirnos y confiar es una experiencia emocionalmente muy intensa que nos lleva a ignorar se?ales de que algo no nos conviene.¡±
Finalmente, Tuiasosopo contact¨® con Te¡¯o ya bajo su personalidad real. ¡°Ronaiah ha llamado y no solo ha confesado, sino que tambi¨¦n se ha disculpado, pero no creo que haya nada que pueda decirme que pueda arreglar esto¡±, revel¨® Te¡¯o a ABC. Los familiares de Tuiasosopo creen que Te¡¯o sab¨ªa m¨¢s de lo que confiesa. ¡°?C¨®mo de espeso tendr¨ªa que ser Manti Te¡¯o para no darse cuenta de que era su amigo quien estuvo detr¨¢s de la cuenta todo el tiempo?¡±, se pregunt¨® su t¨ªo. ¡°No creo que pueda ser tan tonto¡±.
Una d¨¦cada despu¨¦s, el pr¨®ximo 16 de agosto, Netflix estrenar¨¢ Secretos del deporte: la novia que no exist¨ªa, un documental que da voz a sus dos protagonistas. En 2022 Manti Te¡¯o no tiene la carrera deportiva que auguraba su talento, pero es un hombre felizmente casado que parece haber encontrado el equilibrio emocional. Ronaiah Tuiasosopo es ahora Naya, una mujer transg¨¦nero que ha superado las dudas y los miedos que lo llevaron a crear a Lennay.
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