6,5 millones de seguidores para una asesina: el caso de Gypsy Rose Blanchard
Un documental reci¨¦n estrenado se suma a la lluvia de productos que intentan saciar la curiosidad por la joven que asesin¨® a su madre y que tras salir de la c¨¢rcel se ha convertido en una celebridad en todo el mundo
¡°?Primer selfie en libertad!¡±. El mensaje escrito por Gipsy Rose Blanchard el 28 de diciembre en su cuenta de Instagram acumula ya m¨¢s de seis millones y medio de me gusta y la libertad de la que habla no es metaf¨®rica: era su primer selfie tras salir de una prisi¨®n para mujeres de Misuri en la que llevaba ocho a?os reclu¨ªda por el asesinato de su madre Dee Dee Blanchard.
Si su rostro ya era famoso, pero desde su salida de prisi¨®n se ha convertido en una celebridad. Su cara se multiplica en los tabloides, todas las televisiones quieren escuchar su historia y cada una de sus publicaciones en Instagram (donde acumula m¨¢s de 6,5 millones de seguidores) y TikTok (donde suma la misma cifra) recibe millones de interacciones, la mayor¨ªa relacionadas con su imagen. Se analizan sus complementos, su peinado o su manicura como si fuese una concursante de un reality o una nueva estrella pop. Tambi¨¦n hay quien no se suma al entusiasmo: ¡°Me hace sentir muy inc¨®moda que sea tan famosa ahora mismo por hacer algo tan horrible¡±, dice uno de los comentarios. D¨ªas antes de abandonar la prisi¨®n concedi¨® una larga entrevista a People en la que mostr¨® su arrepentimiento por un crimen que lamenta ¡°todos los d¨ªas¡±. ¡°Ella no lo merec¨ªa, merec¨ªa estar donde estoy yo, sentada en prisi¨®n cumpliendo condena por comportamiento criminal¡±.
La expectaci¨®n que ha provocado su liberaci¨®n es tal que seg¨²n TMZ la polic¨ªa de Misuri se vio obligada a frustrar su intenci¨®n de asistir a un partido de los Kansas City Chiefs donde pensaba conocer a su ¨ªdolo Taylor Swift, habitual en el palco desde el inicio de su relaci¨®n con el jugador Travis Kelce. Para saciar el ansia de informaci¨®n sobre el caso, la cadena Lifetime estren¨® anoche The Prison Confessions of Gypsy Rose Blanchard (Las confesiones desde prisi¨®n de Gypsy Rose Blanchard), un documental de seis cap¨ªtulos en el que se anuncian nuevas revelaciones sobre el caso, que se hizo famoso en todo el mundo gracias a un documental anterior, Mommy Dead and Dearest (en Espa?a se puede ver en HBO Max).
¡°Tras toda una vida de silencio, por fin puedo usar mi voz para compartir mi historia y decir mi verdad. Como superviviente de un implacable abuso infantil, la serie narra mi b¨²squeda de la liberaci¨®n y mi viaje a trav¨¦s del autodescubrimiento¡±, anuncia. ¡°Soy yo misma sin disculpas y sin miedo a exponer las partes ocultas de mi vida que nunca han sido reveladas hasta ahora¡±.
?Qui¨¦n es el monstruo?
El 4 de junio de 2015 la polic¨ªa del Condado de Greene, Misuri, se person¨® en casa de Dee Dee Blanchard tras ser alertados por los vecinos. Estaban inquietos tras haber visto unos mensajes extra?os en su Facebook. ¡°La perra est¨¢ muerta¡±, pod¨ªa leerse en una cuenta habitualmente poblada de positividad y centrada en su hija Gypsy, una ni?a enferma que era el centro de su vida. Al no poder contactar con ella temieron que algo pod¨ªa haberles sucedido.
Cuando entraron en la casa se encontraron el cad¨¢ver de Dee Dee cosido a pu?aladas, pero ni rastro de su hija, solo su silla de ruedas. Salt¨® la alarma. Temieron un secuestro. La ni?a era una triste celebridad de la zona, una habitual de actos ben¨¦ficos. La ni?a padec¨ªa leucemia, problemas cardiacos y distrofia muscular.
La teor¨ªa del secuestro se desmont¨® cuando la polic¨ªa rastreo la IP de las publicaciones del Facebook de Dee Dee. Se correspond¨ªa con una casa en Wisconsin. All¨ª se encontraron con Gypsy y Nicholas Godejohn con quien, seg¨²n se descubri¨®, manten¨ªa una relaci¨®n sentimental secreta. La polic¨ªa los arrest¨® a ambos. Lo m¨¢s sorprendente dentro de aquel c¨²mulo de atrocidades es que Gypsy caminaba por s¨ª misma y ya no parec¨ªa la fr¨¢gil ni?a que pod¨ªa verse en sus redes sociales siempre acompa?ada de princesas Disney. Seg¨²n los primeros datos de la investigaci¨®n, el crimen hab¨ªa sido planificado por Gipsy y ejecutado por Godejohn, a qui¨¦n hab¨ªa conocido en una red de citas entre cristianos.
Gipsy no era la ni?a que sus vecinos cre¨ªan, sino una mujer de veinticinco a?os a la que su madre hab¨ªa falsificado la partida de nacimiento. Tampoco estaba enferma, era Dee Dee quien la enfermaba. Nunca hab¨ªa padecido leucemia, pero le afeitaba la cabeza para que lo pareciese. Tambi¨¦n la hab¨ªa sometido a complejas intervenciones quir¨²rgicas innecesarias en su af¨¢n por convertirla en una persona totalmente dependiente. C¨®mo hab¨ªa podido suceder algo as¨ª es una pregunta que todav¨ªa resuena. Dee Dee hab¨ªa mantenido a su hija apartada de la sociedad y tambi¨¦n de su padre que contribu¨ªa con la manutenci¨®n, pero al que apenas le permit¨ªa acercarse. ?Qu¨¦ puede provocar que una madre someta a un sufrimiento continuado a su propia hija?, se preguntaba Estados Unidos. Dee Dee sufr¨ªa trastorno facticio, que seg¨²n la Cl¨ªnica Mayo es ¡°un trastorno mental grave en el cual una persona enga?a a los dem¨¢s haci¨¦ndose el enfermo, enferm¨¢ndose a prop¨®sito o lastim¨¢ndose a s¨ª mismo¡±, una afecci¨®n que com¨²nmente se conoce como S¨ªndrome de Munchausen. Cuando, como en el caso de Dee Dee los pacientes no se enfermaban a s¨ª mismos, sino que enfermaban a otras personas ,se le denomina S¨ªndrome de M¨¹nchhausen por poderes y las v¨ªctimas suelen ser ni?os, adultos vulnerables o incluso animales dom¨¦sticos. Tras cada dato que sal¨ªa a la luz durante la investigaci¨®n policial la pregunta era: ?qui¨¦n es el monstruo?
Una madre perfecta
No hab¨ªa duda de que Gipsy era complice de asesinato. Hab¨ªa dejado la puerta abierta para que su novio pudiese acceder a la vivienda la noche del crimen y hab¨ªa escrito las palabras en el Facebook de su madre. Durante meses ambos hab¨ªan intercambiado mensajes que salieron a la luz en el juicio. Pasaron de los comentarios de elevado contenido sexual a las preguntas sobre cinta adhesiva y cuchillos. La ley iba a ser implacable, pero la sociedad ten¨ªa dudas respecto a su culpabilidad.
Nick Godejohn fue condenado a cadena perpetua por asesinato en primer grado y Gypsy fue sentenciada a 10 a?os de prisi¨®n, el m¨ªnimo posible. Gracias a un acuerdo de culpabilidad que reconoc¨ªa la relaci¨®n abusiva con su madre, cumpli¨® ocho. El caso conten¨ªa todos los elementos para generar fascinaci¨®n en el p¨²blico y los medios lo capitalizaron. Se estrenaron dos documentales, el mencionado Mommy Dead and Dearest y Gypsy¡¯s Revenge. En 2019, Hulu produjo The Act con Joey King y Patricia Arquette, que recibi¨® un Emmy a la mejor actriz de reparto. Fue uno de los ¡°cr¨ªmenes abyectos¡± de Ley y orden: Unidad de v¨ªctimas especiales y aparece de manera poco disimulada en The Politician, de Ryan Murphy, donde Jessica Lange ejerce de trasunto sure?o de Dee Dee. El s¨ªndrome de Munchausen siempre ha cautivado a la ficci¨®n.
Cada respuesta generaba otra pregunta. ?C¨®mo hab¨ªa podido Dee Dee enga?ar durante a?os a m¨¦dicos y enfermeras? Aunque la ficci¨®n los muestre como monstruos desquiciados, los afectados por el ¡°trastorno facticio¡± suelen ser personas articuladas y estables que pasan a?os aprendiendo a esquivar el control del sistema y cuando se sienten acechados cambian de centro m¨¦dico. La recompensa para tanto esfuerzo es el reconocimiento, sentirse indispensables, que se vea como heroico algo tan cotidiano como el cuidado de los hijos. Esa es una de las razones que hacen ese tipo de enfermos, generalmente mujeres blancas de clase media, tan atractivos para la ficci¨®n. ?Qu¨¦ puede haber m¨¢s aterrador que una madre perfectamente normal que vive haciendo un da?o continuado a su hija?
Hay otro protagonista en esta historia de madres e hijas: Nicholas Godejohn. Gypsy y ¨¦l hablaron durante dos a?os antes de conocerse en persona. Su primera cita fue en un cine y la segunda cuando viaj¨® de Wisconsin a Missouri para matar a Dee Dee. Gypsy declar¨® en Mommy Dead and Dearest que la noche del asesinato ambas se hab¨ªan hecho la manicura y cuando su madre se qued¨® dormida, Godejohn entr¨® en casa y la apu?al¨® mientras ella permanec¨ªa escondida en el ba?o. Durante el juicio Gypsy confes¨® haberlo convencido, pero a pesar de que los abogados de ¨¦l alegaron manipulaci¨®n, fue condenado a cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional.
¡°Estaba ciegamente enamorado¡±, declar¨® durante el juicio. En una entrevista posterior dijo que el tiempo que pas¨® con Gypsy hab¨ªa sido el mejor de su vida. ¡°Desde el principio sab¨ªa que ¨¦ramos almas gemelas¡± confes¨®, ¡°esos cinco d¨ªas en los que estuve con ella f¨ªsicamente fueron los m¨¢s intensos, m¨¢gicos e impresionantes que he tenido¡±. Tambi¨¦n declar¨® que hab¨ªa asesinado a Dee Dee porque con ella viva jam¨¢s podr¨ªan estar juntos.
El fin del romance
Se supo que Gypsy y Nicholas hab¨ªan roto cuando ella anunci¨® su compromiso con otro hombre. En 2020 lleg¨® a su vida Ryan Scott Anderson, un profesor de secundaria de Luisiana, uno de los hombres con los que se carteaba desde prisi¨®n. Se casaron en prisi¨®n en julio de 2022, en una peque?a ceremonia sin invitados, y ahora planean una gran fiesta con todos sus amigos. ¡°Nos la merecemos¡± cont¨® ella en exclusiva a People. Tambi¨¦n revel¨® que sent¨ªa cierta inquietud porque jam¨¢s hab¨ªa vivido con un hombre: en su vida s¨®lo han estado su madre y sus compa?eras de prisi¨®n.
Su relaci¨®n parece ir sobre ruedas, a tenor de un pol¨¦mico comentario que ha escrito como respuesta a un post de su marido en Instagram en el que se jactaba de la intensidad de su vida sexual. ¡°No escuches a los detractores, te amo y t¨² me amas. No le debemos nada a nadie. Nuestra familia es lo importante. Si te comentan cosas buenas, est¨¢ bien, si hay odio, ign¨®ralo, porque ellos no importan. Te amo, a pesar de los celos porque me complaces todas las noches¡ s¨ª, lo dije, el sexo es genial. Esposa feliz, vida feliz¡±, escribi¨®. Su marido le respondi¨® a continuaci¨®n: ¡°?Qui¨¦n dijo que me importaba un carajo lo que dicen estas personas celosa?s, de todos modos, jaja... Ahora ven a buscarlo, cari?o¡±.
La vida de Gypsy tras su liberaci¨®n est¨¢ siendo fren¨¦tica y a la vez ins¨®litamente convencional. Sus navidades no est¨¢n siendo demasiado diferentes a las de cualquiera, excepto porque en Estado Unidos es dif¨ªcil no ver su cara en todos los programas. Es una mujer de 32 a?os que graba v¨ªdeos en TikTok y comparte fotos en Instagram con familiares y amigos que festejan su regreso a casa, tan normal como si en lugar de una prisi¨®n estatal hubiese estado recorriendo el Egeo en un crucero.
Otros criminales buscan el anonimato tras cumplir su condena, pero no es su caso. Hay quien alerta del peligro que puede suponer para una persona que ha pasado toda su vida cautiva y custodiada, primero por su madre y despu¨¦s por el estado. La historia de las celebridades a las que parece intentar emular est¨¢ repleta de vidas tr¨¢gicas y juguetes rotos. ¡°No convirtamos a Gypsy Rose Blanchard en un meme¡± escrib¨ªa Lois Shearing en Cosmopolitan. A juzgar por la velocidad con la que se est¨¢ viralizando cada an¨¦cdota de su nueva vida tal vez la advertencia llegue demasiado tarde.
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