Fuera de juego

Hubo un tiempo, no tan lejano, en que lo m¨¢s complicado del f¨²tbol era la regla del fuera de juego. Ahora todo es mucho m¨¢s complicado. Desde que el capitalismo es turbocapitalismo y el f¨²tbol (o al menos su parte m¨¢s lujosa) es turbof¨²tbol, quienes permanecemos fuera de juego somos los clientes, o consumidores, o como quieran llamarnos a los que antes ¨¦ramos p¨²blico.

Consideremos, por ejemplo, el asunto de Kylian Mbapp¨¦, el delantero franc¨¦s que ha protagonizado ...

Hubo un tiempo, no tan lejano, en que lo m¨¢s complicado del f¨²tbol era la regla del fuera de juego. Ahora todo es mucho m¨¢s complicado. Desde que el capitalismo es turbocapitalismo y el f¨²tbol (o al menos su parte m¨¢s lujosa) es turbof¨²tbol, quienes permanecemos fuera de juego somos los clientes, o consumidores, o como quieran llamarnos a los que antes ¨¦ramos p¨²blico.

Consideremos, por ejemplo, el asunto de Kylian Mbapp¨¦, el delantero franc¨¦s que ha protagonizado la negociaci¨®n cu¨¢ntica del verano. Digo cu¨¢ntica porque dependiendo de la posici¨®n del observador, Mbapp¨¦ estaba ya en el Real Madrid o se hab¨ªa quedado definitivamente en el Paris Saint Germain. En ciertos momentos, Mbapp¨¦ se encontraba en dos lugares a la vez. Finalmente result¨® que no hubo nada.

Mbapp¨¦ fue el objeto, el elemento exterior hacia el que se dirige la actividad del sujeto. Sujetos hubo dos: Florentino P¨¦rez, presidente del Real Madrid, y Nasser al Khelaifi, propietario del PSG. Florentino P¨¦rez es tambi¨¦n presidente de la gigantesca constructora ACS. Nasser al Khelaifi es tambi¨¦n presidente de Qatar Sports Investments, subsidiaria de Qatar Investment Authority, un fondo soberano con unos activos valorados en torno a los 300.000 millones de d¨®lares.

Cuando Florentino P¨¦rez encabez¨® hace unos meses el proyecto de la Superliga Europea de f¨²tbol no incluy¨® al PSG entre los clubes participantes. El club parisiense de Qatar qued¨® al margen. No creo que en ello tuviera que ver Iberdrola, esa compa?¨ªa el¨¦ctrica tan popular y estimada ¨²ltimamente. Pero qui¨¦n sabe. El proyecto de la superliga de los ricos se coci¨® mientras Florentino P¨¦rez y ACS intentaban hacerse con el control de Iberdrola. El presidente de Iberdrola, Jos¨¦ Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n, se defendi¨® del asalto con el escudo de los inversores de Qatar, que a resultas de ello se erigieron en accionistas de referencia de la compa?¨ªa el¨¦ctrica.

Gal¨¢n impuls¨® a principios de a?o la creaci¨®n del Comit¨¦ Empresarial Qatar-Espa?a con un mont¨®n de empresarios importantes (entre ellos, Joseph Oughourlian, presidente del grupo editor de este diario) y, por alguna raz¨®n, Javier Tebas, presidente de la Liga espa?ola, enfrentado a Florentino por la cosa de la Superliga.

Iberdrola (recu¨¦rdese su sangre catar¨ª) demand¨® en junio a la ACS de Florentino P¨¦rez por ¡°competencia desleal¡±. Iberdrola dijo que ACS hab¨ªa cometido un ¡°acto de denigraci¨®n contra un competidor¡± al hacer saber que, si Iberdrola era imputada por su, digamos, ¡°cooperaci¨®n¡± con el comisario jubilado Jos¨¦ Manuel Villarejo, iba a demandarle 2.600 millones de euros. La Audiencia Nacional imputa al presidente de Iberdrola, Jos¨¦ Ignacio S¨¢nchez Gal¨¢n, los presuntos delitos de cohecho, atentado contra la intimidad y falsedad en documento mercantil. Hay muchos otros impu?tados entre la realeza del Ibex. Lo de Villarejo viene a ser un pringue general.

Por supuesto, la bronca entre Iberdrola-Qatar y Florentino P¨¦rez no tiene por qu¨¦ estar relacionada con las frustradas negociaciones entre el PSG-Qatar y el Real Madrid de Florentino P¨¦rez. Si es que realmente hubo negociaciones. Puede que todo fuera un farol. Puede que nada tenga que ver con nada. O s¨ª.

El fuera de juego resulta a veces discutible, pero la mayor¨ªa de los casos son clar¨ªsimos. En el turbof¨²tbol nada lo es.

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