Alain Badiou. ¡°Las situaciones de gran desorientaci¨®n terminan en guerra mundial¡±
Es uno de los pensadores franceses vivos m¨¢s influyentes, un ave extra?a. No reniega del mao¨ªsmo y no vota desde 1969. Pronostica una guerra mundial a medio plazo
Alain Badiou (Rabat, de 85 a?os) es uno de los fil¨®sofos franceses vivos m¨¢s influyentes en el mundo. Es un intelectual peculiar, un ave extra?a: no ha renegado del comunismo ni ¡ªm¨¢s ex¨®tico a¨²n¡ª del mao¨ªsmo. El autor del monumental El ser y el acontecimiento es el ¨²ltimo de una estirpe que tiene en Sartre, Lacan, Althusser¡ a algunos de sus antecedentes, sus ¡°maestros¡±, como se?ala el profesor Jordi Riba en ...
Alain Badiou (Rabat, de 85 a?os) es uno de los fil¨®sofos franceses vivos m¨¢s influyentes en el mundo. Es un intelectual peculiar, un ave extra?a: no ha renegado del comunismo ni ¡ªm¨¢s ex¨®tico a¨²n¡ª del mao¨ªsmo. El autor del monumental El ser y el acontecimiento es el ¨²ltimo de una estirpe que tiene en Sartre, Lacan, Althusser¡ a algunos de sus antecedentes, sus ¡°maestros¡±, como se?ala el profesor Jordi Riba en Alain Badiou: lo pol¨ªtico y la pol¨ªtica (Gedisa, 2021). Se le estudia como a un cl¨¢sico, pero ¨¦l no deja de producir. En franc¨¦s acaba de publicar, en la editorial Gallimard, el op¨²sculo Observaciones sobre la desorientaci¨®n del mundo.
De cerca impone. Tiene un aire de profeta b¨ªblico. O de un intelectual de otro tiempo, un tiempo de intelectuales a los que se escuchaba y que a menudo, en sus opiniones pol¨ªticas, se equivocaban espectacularmente.
PREGUNTA.?¡°Estamos desorientados¡±, escribe usted. ?Qu¨¦ nos desorienta?
RESPUESTA.?La desorientaci¨®n son aquellos momentos de la historia en los que a la poblaci¨®n no se le propone ninguna elecci¨®n clara. Conoc¨ª una ¨¦poca orientada. En pol¨ªtica, se enfrentaban una derecha y una izquierda claramente identificadas. La derecha: conservadora, nacionalista, partidaria de la propiedad privada. La izquierda: socialista, comunista e internacionalista, partidaria de una lucha de clases. En Francia hab¨ªa una elecci¨®n fundamental: ?se estaba a favor o en contra de la guerra de Argelia? ?Y de las guerras coloniales?
P.??Se acab¨® todo esto?
R.?Ahora este tipo de definici¨®n es dif¨ªcil de encontrar y de definir. El mundo dirigente ¡ªpropietarios de bienes, accionistas, pero tambi¨¦n partidos y dipu?tados¡ª est¨¢ de acuerdo en que no habr¨¢ una transformaci¨®n fundamental. Tampoco hay partidos pol¨ªticos realmente diferentes unos de otros. La elecci¨®n pol¨ªtica se vuelve muy dif¨ªcil y confusa, y se expresa a trav¨¦s de protestas m¨¢s o menos violentas contra este o aquel punto. Pero son protestas desligadas de una visi¨®n de conjunto. Quienes protestan se sienten desorientados. No saben cu¨¢l ser¨¢ la etapa siguiente, no saben qu¨¦ significa su derrota o victoria. Es como un viaje mar¨ªtimo sin br¨²jula.
¡°El mundo dominante est¨¢ de acuerdo en que no habr¨¢ una transformaci¨®n fundamental¡±
P.?No le convencen movimientos como los chalecos amarillos.
R.?Entiendo su naturaleza. S¨¦ que detr¨¢s hay una cuesti¨®n real: el abandono progresivo del mundo rural y provincial por las autoridades y tambi¨¦n las poblaciones. Pero el movimiento en s¨ª no indica por medio de qu¨¦ m¨¦todo piensa resolver sus problemas. Por falta de una visi¨®n clara sobre qu¨¦ hacer se busca una cabeza de turco. ¡°?Es culpa de Macron!¡±. Se imaginan que, haciendo caer a Emmanuel Macron, la situaci¨®n cambiar¨¢. Son movimientos de c¨®lera, pero la c¨®lera no es una buena pasi¨®n pol¨ªtica porque es negativa: sabemos qu¨¦ no quiere, pero no qu¨¦ quiere.
P.?La pandemia, ?nos desorient¨®?
R.?Lleg¨® en una ¨¦poca ya desorientada, pero lo agrav¨®. Nadie estaba preparado. En el fondo, lo que se impuso fue la c¨®lera, nuestras costumbres se ve¨ªan perturbadas: no poder ir al caf¨¦, tener que llevar mascarilla, vacuna. La pandemia nos permiti¨® medir hasta qu¨¦ punto est¨¢bamos desorientados.
P.??Y la guerra en Ucrania?
R.?Recuerda m¨¢s bien al momento antes de la guerra de 1914, un conflicto posiblemente mundial que est¨¢ ligado a situaciones de detalle en Europa Central, como la Primera Guerra Mundial, que se desencaden¨® por Serbia y por disputas por los imperios coloniales. Era un enfrentamiento para saber si Alemania iba a ser admitida en el club de las grandes potencias. Hoy en el horizonte est¨¢ la cuesti¨®n de si China va a ser admitida en el concierto de las naciones. Para que esta situaci¨®n se clarifique hace falta que Rusia ya no sea un factor en el juego.
P.??No hay simplemente un pa¨ªs soberano y democr¨¢tico, invadido y bombardeado?
R.??Y cuando los americanos bombardearon Belgrado en 1999? ?No hab¨ªa algo inaceptable ah¨ª? ?No habr¨ªa habido que salir de la OTAN? Hay una disimetr¨ªa total. ?Qu¨¦ fue a hacer el Ej¨¦rcito americano a Afganist¨¢n? ?Por qu¨¦ destruy¨® Irak? En el ¨²ltimo periodo, los desperfectos internacionales principales no son obra de Rusia ni China, sino de las guerras del Ej¨¦rcito americano. Con nuestro apoyo. Ahora nos damos cuenta de que Ucrania es un pa¨ªs soberano. ?Irak tambi¨¦n era un pa¨ªs soberano!
P.??Significa que, puesto que sucedieron aquellos episodios, no hay que decir nada ahora?
R.?Significa que los ejercicios de la soberan¨ªa deben ser igualitarios. Yo soy un antiputiniano resuelto, con m¨¢s raz¨®n a¨²n porque considero que Putin es el resultado final de la descomposici¨®n del comunismo en Rusia. Hay una agresi¨®n injustificada, pero no debe permitir olvidar el contexto general. ?Por qu¨¦ habr¨ªa que escandalizarse por la agresividad de Rusia hacia uno de sus vecinos sin escandalizarse por la agresi¨®n de EE UU por todo el mundo? Hay que condenar la acci¨®n de Putin, pero desde una independencia total respecto a la OTAN y los americanos. Yo digo: ni Putin ni Joe Biden.
P.?Personalmente, ?usted se siente desorientado?
R.?La desorientaci¨®n es una situaci¨®n, no es algo subjetivo. Uno puede tener una orientaci¨®n personal, pero esto no cambiar¨¢ la desorientaci¨®n general. Vivimos en una ¨¦poca hist¨®rica confusa. Quiero hacer un triste pron¨®stico, que no s¨¦ si ver¨¦ porque empiezo a tener una edad. Las situaciones mundiales de gran desorientaci¨®n terminan en una guerra mundial. Es mi previsi¨®n a medio plazo.
El mejor dirigente posible es el mejor apoderado del capital con buena relaci¨®n con las ciudadelas del capitalismo. En este papel, Macron me parece conveniente
P.??Pronostica una guerra mundial?
R.?Pronostico una guerra mundial. Veo multiplicarse los accidentes ¡ªla situaci¨®n en Ucrania es uno de ellos, pero la derrota americana en Afganist¨¢n era otro¡ª como los que precedieron a la guerra de 1914, m¨¢s que a la guerra de 1940, porque la de 1940 era ideologizada, entre dem¨®cratas, fascistas y comunistas: tres protocolos de orientaci¨®n. La de 1914 era entre potencias para consolidar la hegemon¨ªa.
P.?Francia ha celebrado elecciones presidenciales. Usted nunca vota.
R.?No he votado desde 1969, entonces lo hice por un candidato local del Partido Socialista Unificado. Nunca he vuelto a encontrar razones para hacerlo. Pienso que votar deber¨ªa ser una de las formas de expresi¨®n de los conflictos de las orientaciones. Pero visiblemente no es esto, sino una elecci¨®n para saber si mantenemos al hombre que est¨¢ en el cargo a falta de nada mejor.
P.?A falta de nada mejor, ?Macron?
R.?No a falta de nada mejor, pero est¨¢ en la l¨®gica de la desorientaci¨®n. Marx defin¨ªa a los dirigentes de las grandes metr¨®polis capitalistas como apoderados del capital. Hemos regresado, despu¨¦s de ¨¦pocas m¨¢s complicadas con la larga interrupci¨®n de las ideolog¨ªas socialista y comunista, al hecho de que el mejor dirigente posible es el mejor apoderado del capital, aquel que desarrolla el capitalismo local y conserva una buena relaci¨®n con las ciudadelas del capitalismo. En este papel, Macron me parece conveniente.
P. En las elecciones presidenciales, la candidata de la extrema derecha, Marine Le Pen, perdi¨®, pero obtuvo su mejor resultado, 13 millones de votos. ?Le preocupa?
R. El aumento de la extrema derecha forma parte de la desorientaci¨®n. La ausencia de toda perspectiva m¨¢s all¨¢ de la continuaci¨®n de la dictadura parlamentaria del capital, falsamente denominada democracia, ha empujado a millones de personas al campo de la pura reacci¨®n: el deseo de regresar al pasado y la hostilidad hacia los extranjeros. Mire el desarrollo del antisemitismo antes de la ¨²ltima guerra mundial. El desarrollo de un concepto identitario de las naciones, que pretende devolver a su miseria a los proletarios que vienen de ?frica, Asia o Am¨¦rica del Sur, es lo mismo. Y tambi¨¦n es un factor de guerra, civil e internacional.
P. La uni¨®n de la izquierda en Francia, ?es motivo de esperanza para usted?
R. ?Qu¨¦ es hoy, en Francia, la izquierda, entre comillas? ?Los socialistas, completamente descompuestos y dispuestos a aliarse con quien sea? ?Los comunistas que tienen la orden de no pronunciar la palabra comunismo en su propaganda, y que est¨¢n a punto de convertirse en un grup¨²sculo? Nuestra ¨²ltima uni¨®n de la izquierda se hizo en 1981 bajo la presidencia de Mitterrand. ?El resultado? El inicio de la contrarrevoluci¨®n de los a?os ochenta y noventa, que instalaron en Francia un capitalismo ¨¢vido y reforzado. La izquierda no puede unificarse, porque pr¨¢cticamente no existe.
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