El Tribunal de Estrasburgo condena al Reino Unido por violar los derechos humanos en el Ulster
La decisi¨®n responde a las denuncias presentadas por familiares de 14 personas, entre ellas ocho miembros del IRA, que murieron a manos de las fuerzas de seguridad
Seg¨²n el tribunal, el Estado brit¨¢nico ha violado el art¨ªculo 2 de la Convenci¨®n Europea de Derechos Humanos que garantiza que "el derecho de toda persona a la vida est¨¢ protegido por la ley" al no realizar una adecuada investigaci¨®n sobre las circunstancias de las muertes.
Sin embargo, el tribunal considera que las autoridades brit¨¢nicas no violaron otros tres art¨ªculos relativos al derecho a un juicio justo, la prohibici¨®n de cualquier discriminaci¨®n y el derecho a un recurso efectivo.
El tribunal ha dictaminado que cada uno de los familiares que presentaron la denuncia recibir¨¢ 10.000 libras (2.670.000 pesetas) como compensaci¨®n.
Los cuatro casos estudiados por la m¨¢xima instancia europea de defensa de los Derechos Humanos tienen en com¨²n que todos ellos fueron cerrados y todav¨ªa no han sido concluidos por "falta de pruebas" o porque las pruebas de que se dispon¨ªa no eran concluyentes.
El primer caso es el de Pearse Jordan, de 22 a?os, abatido de tres disparos por la espalda por la Polic¨ªa Real del Ulster (RUC) en Belfast el 25 de noviembre de 1992, cuando no iba armado. La investigaci¨®n judicial a¨²n no ha terminado y el procedimiento civil iniciado por su familia est¨¢ estancado.
Su caso es similar al de Gervaise McKerr, Eugen Toman y Sean Burns, abatidos por agentes del RUC el 11 de noviembre de 1982 cuando viajaban a bordo de un coche contra el que los polic¨ªas habr¨ªan disparado 109 balas. El magistrado encargado de juzgar a los tres agentes acusados cerr¨® el caso por falta de pruebas.
Miembros del IRA
En los otros dos casos denunciados las v¨ªctimas fueron miembros del Ej¨¦rcito Revolucionario de Irlanda del Norte (IRA) y el Sinn Fein (brazo pol¨ªtico del IRA).
El 8 de mayo de 1987, un grupo de soldados y polic¨ªas de la RUC tendi¨® una emboscada a una unidad del IRA que se dispon¨ªa a atacar un puesto policial. En el incidente murieron los ocho miembros del comando y un civil que pasaba por el lugar en el momento del tiroteo. El caso tambi¨¦n fue archivado por falta de pruebas.
La ¨²ltima de las denuncias evaluadas por el Tribunal Europeo es la presentada por la madre de Patrick Shanaghan, miembro del Sinn Fein, quien tras recibir varias amenazas y advertencias del RUC fue asesinado por un desconocido el 12 de agosto de 1991.
Seg¨²n el Tribunal, "estos casos plantean un cierto n¨²mero de cuestiones fundamentales en cuanto a los hechos, que (el tribunal) est¨¢ analizando de forma interna". En este sentido, critica el que "las jurisdicciones civiles no sean capaces de aclarar los hechos o pronunciarse sobre la regularidad o no de una muerte o sobre las infracciones o irregularidades cometidas por las fuerzas de seguridad", porque otras instancias gubernamentales les impidan tener acceso a los hechos y las pruebas.
Adem¨¢s, el Tribunal pone en duda la conveniencia de "sacar conclusiones de las pruebas aportadas por las partes sobre la responsabilidad de los asesinatos", ya que en la mayor¨ªa de estos casos los documentos escritos "no han sido verificados mediante interrogatorios o contrainterrogatorios".
Reacciones de Londres
Desde Londres, el secretario de Estado, John Reid, citado por la cadena BBC, ha expresado su satisfacci¨®n por que el Tribunal no hubiera encontrado "nada en estas muertes que haga suponer que se trat¨® de asesinatos ilegales".
"Las cr¨ªticas del tribunal son sobre los procesos y las investigaciones, no sobre las muertes en s¨ª mismas", ha afirmado, a?adiendo que Londres "pretende estudiar esas cr¨ªticas seriamente".
Por su parte, el primer ministro de Irlanda del Norte, David Trimble, ha calificado la sentencia de "asombrosa y perversa".
"Es una acusaci¨®n contra el Gobierno brit¨¢nico y su pol¨ªtica de disparar a matar y una acusaci¨®n contra el sistema legal existente en Irlanda del Norte", ha declarado Mark Thompson, miembro de la asociaci¨®n Relatives for Justice (Familiares por la Justicia), a?adiendo que "las personas responsables deber¨ªan rendir cuentas y ser acusadas de asesinato".
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