El juez chileno Juan Guzm¨¢n pide el levantamiento de la inmunidad de Pinochet

En un nuevo intento de llevar al dictador chileno Augusto Pinochet ante la Justicia, el juez Juan Guzm¨¢n Tapia ha pedido hoy a la Corte de Apelaci¨®n de Santiago que levante la inmunidad de la que goza el ex mandatario. Esta vez, el juez se basa en la presunta participaci¨®n de Pinochet en la llamada Operaci¨®n C¨®ndor, una campa?a para la eliminaci¨®n de opositores pol¨ªticos en varias dictaduras del Cono Sur.

El juez ha enviado su petici¨®n a la Corte de Apelaci¨®n de Santiago tras recibir un recurso de los abogados Eduardo Contreras, Francisco Bravo y Sergio Concha, que solicitaban el levantamiento de la inmunidad de que disfruta el dictador en virtud de su condici¨®n de presidente de Chile entre 1973 y 1990. Pinochet disfrutaba, a su vez, de inmunidad como senador vitalicio, aunque la perdi¨® cuando dimiti¨® de ese cargo.

Sin embargo, tampoco este movimiento tiene demasiadas posibilidades de terminar con Pinochet en el banquillo de los acusados. No es probable que la Corte de Apelaciones acepte la petici¨®n del juez, dado que el Supremo chileno ya declar¨® que Pinochet no pod¨ªa ser juzgado debido a su estado de salud. En el caso de que la Corte de Apelaciones admitiera la petici¨®n, el Supremo posiblemente la parar¨ªa y, en el caso de que no lo hiciera, los abogados del dictador volver¨ªan a solicitar ex¨¢menes m¨¦dicos para certificar que su estado mental, que el Supremo calific¨® de "demencia ligera", no le permite asegurarse una defensa apropiada.

El juez Guzm¨¢n se hizo c¨¦lebre hace tres a?os cuando, despu¨¦s de la llegada a Chile de Pinochet tras permanecer arrestado en Londres durante unos meses mientras el juez Baltasar Garz¨®n intentaba su extradici¨®n Espa?a, le inculp¨® por su implicaci¨®n en la muerte de cientos de opositores a su dictadura. Guzm¨¢n interrog¨® al ex dictador y le mantuvo en arresto domiciliario durante seis semanas entre febrero y marzo de 2001. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia chilena archiv¨® el caso en julio de 2002 al estimar que el dictador, de 88 a?os, no estaba en condiciones de ser juzgado por padecer una demencia ligera que le imped¨ªa ejercer su propia defensa.