El vicepresidente Cheney desvel¨® la identidad de la agente de la CIA, seg¨²n 'The New York Times'

El caso de la filtraci¨®n ilegal de la identidad de la agente clandestina de la CIA Valerie Plame, ha topado en las ¨²ltimas horas con un nombre de altos vuelos. Seg¨²n informa hoy el prestigioso diario The New York Times, fue el propio vicepresidente, Richard Cheney, quien revel¨® la identidad de la agente a su asesor, Lewis Libby.

Para documentar sus afirmaciones, el rotativo cita fuentes de "abogados del caso". Seg¨²n esta informaci¨®n, los apuntes que tom¨® el propio Libby en una reuni¨®n con Cheney el 12 de junio de 2003 demuestran que el vicepresidente le cont¨® en aquella ocasi¨®n que Valerie Plame era agente de la CIA. La informaci¨®n fue filtrada a la prensa tres semanas m¨¢s tarde.

Actualmente Libby es, junto al asesor del presidente Bush, Karl Rove, el principal sospechoso de haber participado en la filtraci¨®n, pero siempre ha argumentado que conoci¨® el nombre Plame por los periodistas. De hecho, si estas informaciones publicadas por The New York Times se confirman, Libby podr¨ªa ser acusado de obstrucci¨®n a la justicia.

La identidad de Plame, esposa del diplom¨¢tico estadounidense Joseph Wilson, fue filtrada a la prensa en julio de 2003, pocos d¨ªas despu¨¦s de que ¨¦ste denunciara en el New York Times y el Washington Post que hab¨ªa advertido a la Administraci¨®n del presidente George W. Bush que carec¨ªan de fundamento las informaciones sobre supuestos intentos de Sadam Husein de comprar uranio apto para armas a N¨ªger.

Venganza contra Wilson

El hecho de que Cheney y Libby, ambos con acceso a toda informaci¨®n secreta en la Administraci¨®n Bush, hablaran de la identidad de un agente de la CIA o su relaci¨®n con la Administraci¨®n, no constituye en s¨ª un delito, pero la conversaci¨®n que Libby apunt¨® en su cuaderno de notas aumenta los indicios de que el Gobierno podi¨¢ estar recabando informaci¨®n sobre Wilson al ver que desbarataba su tesis sobre los planes nucleares de Sadam.

Wilson, quien indic¨® que la Administraci¨®n de Bush hab¨ªa enga?ado a la sociedad sobre los motivos para la invasi¨®n de Irak en marzo de 2003 al insistir en las supuestas aspiraciones nucleares de Sadam, considera que la filtraci¨®n de la identidad de su esposa supon¨ªa una represalia.

Los apuntes de Libby indican que Cheney se enter¨® de la ocupaci¨®n secreta de Plame cuando le pidi¨® al entonces director de la CIA, George Tenet, informaci¨®n sobre Wilson, quien hab¨ªa hecho un viaje especial a N¨ªger para investigar los rumores sobre el inter¨¦s de Irak en comprar uranio a N¨ªger. Los medios de comunicaci¨®n en Estados Unidos conjeturan ampliamente que el fiscal especial Fitzgerald pueda presentar esta misma semana cargos contra Libby y tambi¨¦n contra Karl Rove, el gur¨² pol¨ªtico del presidente Bush y su vicejefe de gabinete.

La Casa Blanca respalda a Cheney

Tras conocer la informaci¨®n del rotativo estadounidense, el portavoz de la Casa Blanca Scott McClellan se ha limitado a destacar ante los medios de comunicaci¨®n el "buen trabajo" del vicepresidente en la administraci¨®n Bush. Sin embargo, a las preguntas de los periodistas sobre la veracidad de estas informaciones, el portavoz ¨²nicamente ha se?alado que la Casa Blanca no va a pronunciarse sobre "especulaciones".

El fiscal especial Patrick Fitzgerald podr¨ªa presentar cargos esta misma semana, en una iniciativa que podr¨ªa da?ar seriamente el prestigio de la Casa Blanca.