El llamamiento a la calma del Gobierno de Costa de Marfil no frena las protestas contra la ONU
Las manifestaciones en las principales ciudades de Costa de Marfil continuaban hoy, por cuarto d¨ªa consecutivo, a pesar del llamamiento hecho por el Gobierno de Laurent Gbagbo para que cesen los disturbios y las protestas contra la ONU, cuya recomendaci¨®n de suspender la Asamblea Nacional ha sido el desencadenante de la actual crisis.
En Abiy¨¢n, la capital econ¨®mica del pa¨ªs, han vuelto a aparecer barricadas en el barrio de Plateau, donde se concentran numerosas oficinas. Muchas negocios est¨¢n cerrados y numerosos empleados que hab¨ªan llegado a su trabajo est¨¢n regresando a sus casas.
Las protestas est¨¢n protagonizadas por los llamados J¨®venes Patriotas, integrados por partidarios radicales del presidente, Laurent Gbagbo, que est¨¢ en el poder desde el 2000, pero que est¨¢ viendo sus poderes mermados como parte del proceso de paz. En el 2002 estall¨® un conflicto militar en Costa de Marfil que se prolong¨® por varios meses. Aunque las hostilidades est¨¢n suspendidas, la situaci¨®n sigue inestable y el pa¨ªs sigue dividido en dos. "Nada ha cambiado respecto a nuestras demandas", ha denunciado uno de los partidarios de Gbagbo despu¨¦s de que el propio presidente llamara anoche a la calma y que se suspendieran los disturbios.
"Continuamos apoyando al presidente Gbagbo contra el neocolonialismo franc¨¦s, que utiliza a la ONU para avasallar a Costa de Marfil", ha agregado este joven. La ONU est¨¢ encargado de supervisar el proceso de paz en Costa de Marfil. Mantiene unos 6.000 "cascos azules" en este pa¨ªs, que se encargan de vigilar la zona desmilitarizada del centro del pa¨ªs, junto con otros 4.000 efectivos de una fuerza de paz de Francia.
Mientras tanto, en Yamoussoukro, la capital del pa¨ªs desde 1983, existe riesgo de enfrentamiento entre los j¨®venes de partidos rivales, que cortaron a primera hora de hoy la principal avenida de la ciudad.
Las protestas contra la misi¨®n de la causaron la muerte de cuatro manifestantes ayer en la poblaci¨®n occidental de Guiglo, cuando fue asaltada una base de los cascos azules, de nacionalidad bengal¨ª.
Propaganda de odio
Naciones Unidas ha expresado su preocupaci¨®n por la ola de violencia. "Es particularmente inquietante el uso de propaganda de odio en los medios de comunicaci¨®n, que contin¨²an transmitiendo mensajes en los que instan a la gente a armarse y a atacar al personal de la ONU. Esto es inaceptable y debe cesar inmediatamente", ha declarado el portavoz de la organizaci¨®n, Stephane Dujarric.
Dujarric ha indicado que el secretario general de la ONU, Kofi Annan, ha estado realizando intensas gestiones para estabilizar la situaci¨®n, y se ha puesto en contacto con el presidente de Nigeria, Olusegun Obasanjo, que ostenta la regencia de turno de la Uni¨®n Africana. Obasanjo, quien anunci¨® que viajar¨¢ a Costa de Marfil, se ha comprometido a reunirse con su hom¨®logo marfile?o lo antes posible para buscar una soluci¨®n a la situaci¨®n de violencia.
Un pa¨ªs dividido en dos
Costa de Marfil, el principal productor de cacao del mundo, sufre una guerra civil larvada desde que el grupo rebelde Fuerzas Nuevas se hizo con el control del norte del pa¨ªs, hace tres a?os. La crisis que atraviesa el peque?o pa¨ªs africano, la peor de su historia desde su independencia de Francia en 1960, estall¨® el 19 de septiembre de 2002 con el levantamiento armado de 800 militares que exig¨ªan la renuncia de Gbagbo, entre otras demandas. La guerra civil caus¨® al menos 2.000 muertos y m¨¢s de un mill¨®n de desplazados, y las hostilidades cesaron a comienzos de 2003, aunque se reanudaron brevemente en noviembre pasado.
A pesar de que han sido firmados tres acuerdos de alto el fuego para preparar el camino para la paz y de que en diciembre pasado se form¨® un Gobierno de unidad nacional con representantes de todas las partes, la situaci¨®n a¨²n es inestable. Hasta ahora, los esfuerzos para lograr un acuerdo de paz y reunificar Costa de Marfil, llevados a cabo por Naciones Unidas, han fracasado.
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