Los taxistas de Lima aprenden mandar¨ªn
Los conductores se preparan para el A?o de las Cumbres, en el que recibir¨¢n a los participantes en las reuniones americanas con la UE y Asia-Pac¨ªfico
Entre la multitud de iniciativas puestas en marcha en la capital peruana para acoger las dos grandes cumbres de jefes de Estado que se avecinan, los taxistas de Lima reciben clases de mandar¨ªn para dar la bienvenida a los viajeros chinos que llegar¨¢n para el Foro de Cooperaci¨®n Econ¨®mica Asia-Pac¨ªfico (APEC).
Esa cita, que aglutinar¨¢ en noviembre a los l¨ªderes de las 21 mayores econom¨ªas del mundo, ser¨¢ el segundo gran episodio del a?o para Per¨², ya que seguir¨¢ a la V Cumbre de la Uni¨®n E¡¤uropea-Am¨¦rica Latina y el Caribe, a la que se prev¨¦ asista otro medio centenar de gobernantes en mayo.
Dentro de la expectaci¨®n en torno al ya conocido como A?o de las Cumbres, que incluye fuertes medidas de seguridad, obras de acondicionamiento urbano y remodelaci¨®n de hoteles, han surgido acciones como la del Gobierno regional del Callao, donde se ubica el aeropuerto internacional, que se ha empe?ado en que sus taxistas atiendan a los visitantes llegados de China en su propio idioma.
As¨ª, frases cortas como "bienvenido", "por favor, suba al carro", "llegamos" y "?¨¦stos son sus equipajes?" son recitadas en mandar¨ªn cada d¨ªa en un local del Callao por cerca de 30 taxistas, cuyas edades oscilan entre los 20 y 60 a?os.
Siguiendo escrupulosamente las indicaciones de la maestra, los alumnos se r¨ªen de la pronunciaci¨®n de alguno de sus compa?eros, lo que no obsta para que se tomen muy en serio las clases, que son dictadas por profesores nativos y de forma gratuita.
Un idioma dif¨ªcil
"Se requiere de bastante estudio y esfuerzo para poder lograrlo, porque el idioma chino mandar¨ªn parece m¨¢s complicadito que el ingl¨¦s; pero con un poquito de esfuerzo se puede lograr", explica Jos¨¦ Navarrete, un taxista con m¨¢s de 20 a?os de experiencia. "Nunca pens¨¦ que iba a hacer esto, pero es bueno estar capacit¨¢ndonos para recibir a nuestros amigos turistas", asegura, todav¨ªa asombrado por los derroteros a los que le ha llevado la profesi¨®n.
En el aula se cumplen los t¨®picos de cualquier escuela, con el grupo de revoltosos en las ¨²ltimas filas y el buen estudiante en la primera, siempre ansioso por demostrar sus conocimientos. El proceso de las clases tambi¨¦n es similar: la maestra escribe en la pizarra los ideogramas, junto a su significado y la pronunciaci¨®n, en la que m¨¢s se incide durante el aprendizaje.
"La entonaci¨®n para los chicos [alumnos] es muy dif¨ªcil, porque la manera china s¨®lo tiene cuatro tonos, pero ellos aprenden muy r¨¢pido", explica la profesora Kao Siao Lee, que prefiere que en Per¨² la llamen Sonia, "porque es m¨¢s f¨¢cil".
El propio Navarrete reconoce que no es sencillo, pero con orgullo asegura haber aprendido "lo b¨¢sico del di¨¢logo" e incluso ha sacado partido a sus nuevos conocimientos gracias a la colonia de origen chino que vive en la capital peruana, una de las mayores de Latinoam¨¦rica, con un mill¨®n y medio de integrantes.
El objetivo es que, para el pr¨®ximo julio, m¨¢s de 300 taxistas de Lima sean capaces de atender a sus clientes en mandar¨ªn, aunque sea b¨¢sico.
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