Golpe de Estado en Mauritania

Un golpe militar ha acabado este mi¨¦rcoles con el Gobierno democr¨¢tico de Mauritania, al menos de momento. Varios generales que hab¨ªan sido destituidos de sus puestos en la c¨²pula militar del pa¨ªs han encabezado una asonada contra el presidente Sidi Mohamed Ould Cheikh Abdallahi, el primer presidente democr¨¢tico del pa¨ªs, que hab¨ªa llegado al poder en marzo de 2007 en unas elecciones avaladas por la comunidad internacional que supusieron el primer paso en el camino hacia la democracia. La Uni¨®n Africana (UA) y la Uni¨®n Europea ya ha condenado el golpe de Estado y han pedido la restauraci¨®n del gobierno democr¨¢tico.

El jefe de la Guardia Presidencial de Mauritania, el general Mohamed Abdelaziz, que hab¨ªa sido destituido por el presidente esta misma ma?ana junto a otros generales que formaban la c¨²pula militar, ha tomado el Palacio Presidencial en Nuakchot, capital del pa¨ªs. Retienen al presidente Abdallahi y al primer ministro, Yahya Uld Ahmed El Waghef, y al ministro del Interior. Los golpistas se han hecho con otros edificios p¨²blicos, entre ellos la televisi¨®n y la radio estatales, que han dejado de emitir y est¨¢n rodeados de soldados.

Abdelaziz, hasta el mi¨¦rcoles jefe de la Guardia Presidencial, y los jefes del Ej¨¦rcito, de la Guardia Nacional y de la Gendarmer¨ªa, han constituido un "Consejo de Estado" al frente del cual se ha situado Abdelaziz, que se ha referido a Abdallahi como "ex presidente". Los cuatro hab¨ªan sido destituidos esta ma?ana por Abdallahi de sus puestos en la c¨²pula militar. Adem¨¢s, ya participaron en 2005 en otro golpe de Estado que derroc¨® al r¨¦gimen de entonces y que desemboc¨® en las elecciones de marzo del a?o pasado, las primeras democr¨¢ticas en la historia del pa¨ªs. Pese a ello, Abdallahi estaba considerado como un t¨ªtere de los militares que dieron ese golpe.

Inestabilidad pol¨ªtica

Los sucesos son el resultado de varios meses de grave crisis pol¨ªtica, agravada recientemente. En mayo, el presidente destituy¨® al Gobierno, que no supo hacer frente al alza de los precios de los alimentos, y nombr¨® otro, en el que no estaba el principal partido de la oposici¨®n y el islamista Tawassoul. El nuevo Gobierno dimiti¨® en bloque en julio antes de someterse a una moci¨®n de censura. Adem¨¢s, ayer se produjo una deserci¨®n en masa de diputados del partido de Abdallahi, que anunciaron una nueva coalici¨®n. Fuentes pol¨ªticas ya ve¨ªan la mano de los golpistas en esta espantada.

Ould Abdallahi, de 70 a?os, era el primer presidente de Mauritania elegido democr¨¢ticamente desde que el pa¨ªs accedi¨® a la independencia en 1960. Lleg¨® a la presidencia en marzo de 2007, tras una re?ida segunda vuelta que los observadores internacionales aprobaron por su transparencia. Sustituy¨® a la Junta Militar que hab¨ªa derrocado en un golpe de Estado al presidente Muauia Uld Taya, que estuvo al mando entre 1984 y 2005. Sus detractores afirmaban que era el pol¨ªtico de aquella junta.

El golpe militar corta por completo el camino emprendido por el pa¨ªs del Magreb hacia la consolidaci¨®n democr¨¢tica. Desde que Abdallahi lleg¨® al poder, Mauritania era un modelo democr¨¢tico en el mundo ¨¢rabe e incluso Reporteros Sin Fronteras aplaud¨ªa su libertad de prensa.

Entre los haberes del presidente figura la ley de septiembre pasado que criminaliza la esclavitud (antes estaba prohibida, pero no se preve¨ªan penas de c¨¢rcel para los que la practicaban) y la repatriaci¨®n de los 20.000 mauritanos negros violentamente expulsados a Senegal y Mal¨ª hace m¨¢s de 20 a?os. Esta operaci¨®n se hab¨ªa empezado a llevar a cabo con la ayuda del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados. Como uno de los principales focos de la inmigraci¨®n clandestina hacia Europa, la cooperaci¨®n con Espa?a por resolver el problema se hab¨ªa intensificado en los ¨²ltimos meses.

Pero el pa¨ªs pasaba por una mala racha econ¨®mica por tres motivos: el petr¨®leo no da los r¨¦ditos esperados; la crisis alimentaria golpea con demasiada fuerza y el poco turismo se ha hundido despu¨¦s de la cancelaci¨®n, en enero, del rally Par¨ªs-Dakar, que era una importante fuente de ingresos de divisas.

Golpe de Estado militar en Mauritania