La UE concede garant¨ªas a Irlanda para que ratifique el Tratado de Lisboa
Dubl¨ªn consigue sus demandas sin que sea necesaria una nueva ratificaci¨®n por los Estados miembros.- Los irlandeses votar¨¢n de nuevo en octubre
Finalmente, Irlanda ha conseguido que la Uni¨®n Europea asumiese sus demandas para poder someter de nuevo el Tratado de Lisboa a un refer¨¦ndum de ratificaci¨®n. Dubl¨ªn ped¨ªa una serie de garant¨ªas (sobre derecho a la vida, neutralidad militar, derechos sociales y autonom¨ªa fiscal) para poder vender el Tratado a sus ciudadanos y asegurarse de que ¨¦stos dan el 's¨ª' -ya rechazaron el texto el a?o pasado. El escollo esta ma?ana ha sido la forma en la que quedaban registradas esas concesiones. Al final, los Veintisiete han acordado incluir esas garant¨ªas en un protocolo que ser¨¢ completamente compatible con el Tratado de Lisboa y no necesitar¨¢ ninguna nueva ratificaci¨®n de ese Tratado por parte de los Estados que ya lo han asumido. Ante esas concesiones, el primer ministro irland¨¦s ha anunciado que convocar¨¢ un nuevo refer¨¦ndum en octubre.
"Creo que estaremos en condiciones de celebrar un segundo refer¨¦ndum a comienzos de octubre", ha dicho Cowen al finalizar el Consejo. El anuncio del primer ministro irland¨¦s ha llegado tras una cumbre en la que ha conseguido lo que pretend¨ªa de la UE. Las garant¨ªas que ped¨ªa para que el Tratado no fuera rechazado por los irlandeses de nuevo le han sido concedidas. Adem¨¢s, ha logrado que esas condiciones salgan con una naturaleza jur¨ªdica reforzada. Esta ma?ana, Cowen exig¨ªa en una carta que las garant¨ªas estuvieran incluidas en un protocolo que tuviera el mismo valor jur¨ªdico que los Tratados. Finalmente, ¨¦stas las garant¨ªas estar¨¢n inclu¨ªdas en un protocolo completamente compatible con el Tratado de Lisboa, por lo que ¨¦ste no necesitar¨¢ re-ratificaci¨®n por parte del resto de pa¨ªses europeos. En el momento en que se concluya un nuevo Tratado de Adhesi¨®n se establecer¨¢ las previsiones de ese nuevo protocolo, que no alterar¨¢ de ninguna manera las relaciones de la UE con los Estados miembros. Su ¨²nico objetivo es clarificar las preocupaciones del pueblo irland¨¦s.
Los jefes de Estado ofrecieron inicialmente que estas garant¨ªas estuvieran recogidas en un anexo con valor pol¨ªtico pero no jur¨ªdico. Temen que incluir las garant¨ªas en un protocolo pueda abrir un proceso de ratificaci¨®n del mismo en los distintos parlamentos, como ya ha amenazado expresamente el presidente checo Vaclav Klaus. Ayer el primer ministro checo y actual presidente de la UE, Jan Fisher, reconoci¨® que la palabra clave era "protocolo". Los t¨¦cnicos siguen negociando en la confianza de encontrar un punto de encuentro tras pasar por los habituales momentos de dramatismo t¨ªpicos de estas reuniones.
Por otra parte, el nombramiento de Jos¨¦ Manuel Barroso que para un segundo mandato al frente de la Comisi¨®n est¨¢ en manos de las negociaciones con el Parlamento. Barroso cuenta con el "apoyo un¨¢nime" de los Veintisiete para que la presidencia checa y la sueca que tomar¨¢ el relevo a partir de julio, inicie negociaciones con los grupos parlamentarios. El d¨ªa clave es el 9 de julio en que se ver¨¢ si Barroso cuenta con la mayor¨ªa suficiente, en cuyo caso ser¨ªa presentado oficialmente por el Consejo y podr¨ªa ser votado el 14 de julio en el primer plenario de Estrasburgo.
El Consejo acord¨® apoyar un nuevo marco de supervisi¨®n financiera de la UE, dejando claramente expl¨ªcito que las decisiones de las Autoridades europeas no "afectar¨¢n de manera alguna la autonom¨ªa fiscal de los Estados miembros", tal como exig¨ªan Reino Unido, Eslovenia y Eslovaquia.
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