El diputado derechista holand¨¦s Wilders podr¨¢ viajar al Reino Unido

Geert Wilders, l¨ªder de la derecha radical holandesa, estaba este martes euf¨®rico despu¨¦s de haber ganado una demanda hist¨®rica contra el ministerio brit¨¢nico de Interior, por no dejarle entrar en el Reino Unido. La decisi¨®n, tomada por el Tribunal de Asilo e Inmigraci¨®n, revoca la orden dictada en febrero pasado por la entonces ministra, Jacqui Smith, que impidi¨® al pol¨ªtico holand¨¦s presentar su pel¨ªcula Fitna, contraria al Islam. Seg¨²n el Gobierno brit¨¢nico, sus cr¨ªticas contra los musulmanes superaban los l¨ªmites de la libertad de expresi¨®n. Es m¨¢s, "pod¨ªan comprometer la armon¨ªa social y la seguridad c¨ªvica al promover la violencia entre distintas religiones". Sorprendido por el giro que ha dado la situaci¨®n, fuentes de Interior han hecho saber que "mantienen sus puntos de vista y no descartan apelar la decisi¨®n judicial".

En el campo del pol¨ªtico holand¨¦s, el ambiente es bien distinto. Arropado en bloque por su Partido por la Libertad, Wilders ha anunciado su intenci¨®n de viajar a Londres la pr¨®xima semana. Esta vez le invita Lord Pearson, cabeza visible del Partido para la Independencia. El mismo que acab¨® proyectando Fitna en la C¨¢mara de los Lores, en una sesi¨®n especial.

Cuando hace ocho meses se qued¨® a las puertas de Londres, Wilders mostr¨® su sorpresa en medio de una nube de fot¨®grafos. "No hago nada malo", dijo. "No ando por las calles protestando. La democracia permite debatir distintas opiniones, y es muy triste ver c¨®mo el Reino Unido rechaza a un diputado electo". El debate sobre la libertad de expresi¨®n derivado de su viaje frustrado, tuvo eco internacional. Tambi¨¦n le vali¨® una publicidad preciosa a Fitna. La cinta, de 17 minutos, califica el Cor¨¢n de "libro fascista" y fue descargado de Internet 4 millones de veces en su versi¨®n holandesa nada m¨¢s aparecer. La traducci¨®n inglesa sum¨® 3,5 millones de descargas. Su popularidad no convenci¨® a Ban Ki-moon, secretario general de Naciones Unidas. En un duro alegato, la critic¨® por "ofensiva y por a?adir tensiones a las relaciones entre los pa¨ªses musulmanes y Occidente". Por su parte, el Consejo de Europa calific¨® el documental de "manipulador al aprovechar la ignorancia, el prejuicio y el miedo". Amenazado de muerte, a Wilders le espera en Holanda un juicio por incitar el odio.