La Iglesia rechaza informar sobre el aborto en las escuelas de Colombia
La Corte Constitucional obliga al Gobierno a poner sobre aviso a los adolescentes
La Iglesia cat¨®lica puso el grito en el cielo y rechaz¨® de plano la sentencia de la Corte Constitucional que obliga al Gobierno colombiano a impartir en las escuelas informaci¨®n sobre el derecho que tienen las mujeres de abortar en tres casos concretos: violaci¨®n, malformaci¨®n del feto y riesgo de muerte materna. La misma Corte lo estableci¨® as¨ª en mayo de 2006.
"Los educadores cat¨®licos no vamos a ense?ar eso", dijo monse?or Juan Vicente C¨®rdoba, secretario de la Conferencia Episcopal. "Vamos a ense?ar el respeto a la vida". Y fue tajante: "No nos puede obligar a ello".
La orden obliga a hacer ajustes en la educaci¨®n sexual, y ser¨¢n los ministerios de Educaci¨®n y Protecci¨®n Social los que determinen a partir de qu¨¦ grado se impartir¨¢ la informaci¨®n. En un pa¨ªs tan cat¨®lico, el Estado, dicen algunos entendidos, est¨¢ entre la espada y la pared. As¨ª lo plante¨® en una entrevista el ministro de Protecci¨®n Social.
Para M¨®nica Roa, directora de programas de la organizaci¨®n Women's Link Worldwic y abanderada de esta causa, la pol¨¦mica desatada es l¨®gica. "No vamos a cambiar la realidad de un pa¨ªs, la mentalidad de un d¨ªa para otro", dijo a EL PA?S. Y puntualiz¨® que "el cambio cultural es m¨¢s duro que la lucha legal". Roa tiene claro que su pelea no es con la Iglesia. "En un Estado laico la Iglesia tiene derecho a opinar. Seguir¨¢ siendo gu¨ªa sobre el comportamiento moral de sus feligreses y cada quien decide si lo acoge o no", asegura la abogada a la vez que apunta que el debate se debe dar en materia de pol¨ªticas p¨²blicas claras sobre este tema.
Roa ve en la sentencia de la Corte una herramienta valiosa para propiciar el cambio cultural. La obligaci¨®n de impartir esta informaci¨®n en las aulas supone s¨®lo un 10% de las ¨®rdenes y presiones contempladas en la sentencia. Entre otras, estipula que las j¨®venes a partir de 14 a?os pueden abortar sin tener el consentimiento previo de los padres. La informaci¨®n que recibir¨¢n los alumnos deja claro que no se puede apelar a la objeci¨®n de conciencia institucional para esquivar la obligaci¨®n de practicar un aborto. Los jueces tampoco pueden negar las tutelas con el argumento de que el aborto va en contra de sus creencias.
"La sentencia es una gu¨ªa de c¨®mo se debe prestar el servicio", resume Roa. "Despu¨¦s de este fallo ya no hay m¨¢s excusas para acudir a pr¨¢cticas ilegales o a argumentos de desconocimiento de la norma". La batalla para conseguir que se cumpla con lo establecido en 2006 ha sido dura. Hospitales y m¨¦dicos se niegan a interrumpir embarazos. Los centros sanitarios no han informado, como es su obligaci¨®n, del n¨²mero de abortos solicitados y practicados.
Un caso emblem¨¢tico del desacato al derecho de las mujeres en este tema es el de una ni?a de 13 a?os violada por un vecino. Un total de siete hospitales se negaron a practicarle el aborto y un juez le neg¨® una tutela. La menor tuvo el beb¨¦ y lo dio en adopci¨®n.
La ni?a, infectada de una enfermedad ven¨¦rea, intent¨® suicidarse, y ahora ella y su madre sufren amenazas porque denunciaron al violador, que fue condenado. El caso lleg¨® a la Corte Interamericana de Derechos Humanos, y el fallo, que obliga a medidas cautelares, es el primero que se da en un tema de aborto.
El Gobierno debe dise?ar una estrategia de formaci¨®n escolar sobre derechos sexuales y reproductivos de la mujer.
Para M¨®nica Roa debe ser una informaci¨®n completa que le permita a las adolescentes evitar embarazos no deseados, conocer sus derechos, y que, adem¨¢s, les oriente sobre anticoncepci¨®n para no abortar. Deber ser, enfatiza, una educaci¨®n responsable. No se trata de hacer apolog¨ªa del aborto, sino que ante un caso de los planteados en la despenalizaci¨®n de esta pr¨¢ctica, las j¨®venes sepan qu¨¦ hacer y tomen la decisi¨®n correcta.
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