El presunto 'cerebro' del 11-S ser¨¢ juzgado en un tribunal federal en Nueva York
Jalid Saij Mohamed y otros cuatro imputados ser¨¢n trasladados desde Guant¨¢namo.- El fiscal general pedir¨¢ la pena de muerte si son condenados.- El consejero legal de Obama encargado del cierre de la prisi¨®n dimite por la falta de avances
El cerebro de los atentados del 11 de septiembre de 2001, Jalid Sheij Mohammed, ser¨¢ juzgado en un tribunal civil en Nueva York junto a otros cuatro sospechosos de haber planeado los ataques terroristas. Los cinco hombres se encuentran en Guant¨¢namo. El anuncio lo ha hecho este viernes el secretario de Justicia y fiscal general de EE UU, Eric Holder, que declar¨® que en los cinco casos se pedir¨¢ una condena a muerte.
Aparte de estos reos, otros 40 de los 215 que a¨²n permanecen en la prisi¨®n tambi¨¦n ser¨¢n juzgados por tribunales civiles o militares de fuera de la base. Otros 90 ser¨¢n enviados a terceros pa¨ªses y 75 quedar¨¢n flotando en el vac¨ªo jur¨ªdico.
La medida es sin duda un primer paso para acabar con el limbo legal de la base naval de Guant¨¢namo, en Cuba, y pone de manifiesto que la Administraci¨®n Obama intenta acelerar sus planes para cerrar el pol¨¦mico centro de detenci¨®n. Pero la decisi¨®n tomada sobre el futuro juicio a Mohammed y el resto de los supuestos responsables de la muerte de cerca de 3.000 personas el 11-S ha levantado cr¨ªticas y dudas.
Cr¨ªticas por parte de los legisladores republicanos, que consideran que Guant¨¢namo es el lugar m¨¢s seguro e id¨®neo para juzgar a esos detenidos. La prisi¨®n militar supuso una inversi¨®n de m¨¢s de 400 millones de d¨®lares (270 millones de euros). Dudas tambi¨¦n porque, en opini¨®n de los conservadores, el juicio en Nueva York supone riesgos para la poblaci¨®n civil que no se presentan en la base militar en territorio cubano.
La sombra de la tortura cubre cada uno de estos cinco casos que ser¨¢n juzgados en Nueva York. Muchas de las confesiones conseguidas por los interrogadores de la CIA que estaban a cargo de la custodia de Mohammed y los otros cuatro presos -Walih Bin Attash, Ramzi Bin Al Shibh, Ali Abdul Aziz y Mustafa Al Hawsawi- fueron extra¨ªdas mediante torturas, como reconoci¨® el propio Holder, y t¨¦cnicas de interrogatorio ahora prohibidas por la Casa Blanca. Al autoproclamado cerebro del 11-S se le aplic¨® 183 veces en 2003 la t¨¦cnica conocida como waterboarding (asfixia simulada bajo el agua).
La Administraci¨®n dem¨®crata debe de haber dado por hecho, a la hora de anunciar el traslado de los presos a un tribunal federal civil, que las posibilidades de una puesta en libertad de los sospechosos son m¨ªnimas. "Nuestro pa¨ªs conf¨ªa en el pleno respeto al imperio de la ley", dijo Holder en una conferencia de prensa celebrada en el Departamento de Justicia. "Una vez m¨¢s, pediremos que nuestro sistema legal responda a esa m¨¢xima", puntualiz¨® Holder, que se puso a s¨ª mismo como ejemplo de garant¨ªa -"yo mismo he sido fiscal", dijo- de que la medida era la correcta y de que los sospechosos se sentar¨ªan en el banquillo de los acusados. "Los responsables de los atentados comparecer¨¢n finalmente ante la justicia", insisti¨® Holder. Los sospechosos ser¨¢n juzgados ante un tribunal federal de Nueva York, cerca del lugar donde se levantaban las dos torres gemelas del World Trade Center destruidas por los terroristas en 2001.
"Estoy completamente convencido de que Mohammed estar¨¢ sujeto a las m¨¢s rigurosas exigencias de la justicia. Los estadounidenses insistir¨¢n en ello. Mi Administraci¨®n insistir¨¢ en ello", avanz¨® Obama desde Tokio, donde realiza una visita de dos d¨ªas como parte de su gira asi¨¢tica.
Seg¨²n el Departamento de Justicia, los sospechosos ser¨¢n trasladados a Nueva York despu¨¦s de que el Gobierno d¨¦ al Congreso los 45 d¨ªas de notificaci¨®n requeridos y se realicen las consultas con las autoridades locales y estatales. La Administraci¨®n Obama ha decidido que otros cinco prisioneros de Guant¨¢namo ser¨¢n juzgados por tribunales militares fuera de Guant¨¢namo, entre ellos Abdul al Rahim al Nashiri, el supuesto arquitecto del ataque en Yemen en 2000 contra el destructor de la Armada USS Cole.
Seg¨²n el Departamento de Justicia, 40 de los 215 prisioneros que permanecen en Guant¨¢namo ser¨¢n juzgados en tribunales federales o militares fuera de la base naval. Aproximadamente 90 presos tienen el visto bueno de las autoridades para ser repatriados o enviados a un tercer pa¨ªs. Esto supone que 75 reclusos siguen sumidos en un limbo legal que les mantiene en Guant¨¢namo al ser considerados muy peligrosos, por no haber pruebas concretas o estar clasificados sus casos como material secreto.
La noticia del juicio en Nueva York es un gran primer paso en el plan de Obama de cerrar Guant¨¢namo antes del 22 de enero de 2010. Aunque a la vez existe una aceptaci¨®n t¨¢cita por parte de la Administraci¨®n de que ese calendario no se cumplir¨¢, y hoy, una vez m¨¢s, lo hizo saber Holder. A su vez, el hecho de que pocas horas antes de hacerse el anuncio dimitiera el consejero de la Casa Blanca Gregory Craig, es una prueba m¨¢s de ello. Craig era el hombre designado por Obama para conseguir la clausura de Guant¨¢namo. Pero su labor cada d¨ªa resultaba m¨¢s dif¨ªcil de cumplir y sus cr¨ªticos le acusaron de no haber tenido en cuenta aspectos tan importantes como la oposici¨®n que surgir¨ªa entre los congresistas por el cierre de la prisi¨®n y la pol¨¦mica que supondr¨ªa la posible transferencia de detenidos al territorio de EE UU.
La salida de Craig era un secreto a voces desde hace semanas y se daba por hecho que el asesor hac¨ªa tiempo que ya no estaba al frente del cierre de Guant¨¢namo. Le sustituye Bob Bauer, abogado personal del presidente Obama.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.