Guerra de nervios entre Francia y Reino Unido por la nueva Comisi¨®n Europea

Reino Unido y Francia se han entregado estos d¨ªas a uno de sus entretenimientos m¨¢s legendarios: atacarse unos a otros. Acabadas desde la noche de los tiempos las guerras reales, ahora se divierten con guerras virtuales. La que ahora nos ocupa ha empezado con un cruce de acusaciones por el nombramiento de Michel Barnier como comisario europeo de Mercado Interior y ha llegado a su c¨²spide con la suspensi¨®n de una visita a Downing Street del presidente franc¨¦s, Nicolas Sarkozy, que ten¨ªa que haberse visto hoy con el primer ministro Gordon Brown para limar asperezas. Ambas partes se han atribuido la iniciativa de la cancelaci¨®n "por problemas de agenda".

La batalla empez¨® la semana pasada cuando Sarkozy celebr¨® el nombramiento de Barnier proclamando: "Quiero que el mundo vea la victoria del modelo europeo, que no tiene nada que ver con los excesos del capitalismo financiero". A su juicio, los brit¨¢nicos "son los grandes perdedores" de la composici¨®n de la nueva Comisi¨®n. Una declaraci¨®n quiz¨¢s precipitada si se tiene en cuenta que Londres ha conseguido colocar a una pol¨ªtica completamente desconocida, la baronesa Catherine Ashton, como alto representante de la Pol¨ªtica Exterior europea y al mismo tiempo vicepresidenta de la Comisi¨®n.

Las palabras de Sarzkozy han sido recibidas por los muy nacionalistas medios brit¨¢nicos como una aut¨¦ntica declaraci¨®n de guerra a la City de Londres. Como siempre en estos casos, apenas ha habido espacio para los matices y Napole¨®n y Waterloo han vuelto a las p¨¢ginas de la prensa.

Y no s¨®lo en la prensa: tambi¨¦n la City ha saltado a la yugular del presidente de la Rep¨²blica. "Estamos muy decepcionados por este comportamiento insultante. Tambi¨¦n estamos trastornados por el hecho de que ni el primer ministro ni el canciller del Exchequer se han dado cuenta de lo que nos ven¨ªa encima y no han hecho lo bastante para evitar el nombramiento de Monsieur Barnier", ha declarado David Buik, de BGC Partners, poniendo en cuesti¨®n por adelantado la neutralidad del comisario franc¨¦s.

Una manera de envolverse en la bandera como mejor ant¨ªdoto contra el criticismo enorme que sufre desde hace meses la industria financiera brit¨¢nica en el propio Reino Unido despu¨¦s de que el Gobierno haya tenido que respaldarla con cerca de un bill¨®n de euros para combatir sus excesos.

Tambi¨¦n ha habido espacio para el sentido com¨²n. En un editorial, el diario The Financial Times ha subrayado que la City no tiene nada que temer de la UE y que las reformas que ya est¨¢n en marcha son necesarias. "No todo lo que viene de Bruselas es una conspiraci¨®n. Los intereses de Gran Breta?a no son necesariamente opuestos a los de Francia y una City de Londres fuerte es del inter¨¦s de Francfort y de Par¨ªs".