La identidad nacional divide al partido de Sarkozy
Parte de la derecha francesa tacha el debate de contraproducente
El debate sobre la identidad nacional lanzado por el Gobierno franc¨¦s corre el riesgo de envenenarse cada d¨ªa m¨¢s y convertirse en un bumer¨¢n capaz de volverse contra el propio Nicolas Sarkozy. De hecho, miembros de la Uni¨®n por un Movimiento Popular (UMP), el partido de centro-derecha del jefe del Estado, en p¨²blico o en privado, piden que acabe cuanto antes. Otros son partidarios de que se reconvierta. Temen que la controversia acabe salpicando sus filas en las elecciones regionales de marzo, y creen que la pol¨¦mica que se ha echado a rodar s¨®lo sirve para dividir a la sociedad francesa.
Hace seis semanas, el ministro de Inmigraci¨®n, Eric Besson, puso en marcha una iniciativa, encaminada a destilar lo intr¨ªnsecamente franc¨¦s. La pregunta, en principio, parec¨ªa inofensiva: "?En qu¨¦ consiste ser franc¨¦s?" . En la pr¨¢ctica, seis semanas despu¨¦s, el debate se ha reducido a discutir, cada vez m¨¢s acaloradamente, sobre el papel de los musulmanes en Francia.
El lunes, la ministra de Familia, Nadine Morano, contribuy¨® a atizar la llama y la discordia. Participaba en Charmes en uno de los numerosos coloquios organizados sobre el asunto cuando un joven cercano al Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen le pregunt¨® si consideraba que el islam y la Rep¨²blica eran compatibles. La ministra entr¨® al trapo: "Lo que quiero es que los j¨®venes musulmanes se sientan franceses porque son franceses. Quiero que amen Francia cuando vivan en este pa¨ªs, que encuentren trabajo y que no hablen en jerga". Y a?adi¨®: "Y que no lleven la gorra al rev¨¦s".
La izquierda describi¨® su comentario de "paternalista e ignorante" y a?adi¨® que "estigmatizaba a una parte de la juventud".
Morano aclar¨® despu¨¦s que su intenci¨®n es que los j¨®venes de los barrios huyan de su propia caricatura a fin de que se integren. Hoy se ha reafirmado: "Si esos socialistas amigos del caviar que no han puesto nunca un pie en esos barrios les aconsejan a esos j¨®venes que lleven la gorra de lado, hablen en jerga y se eternicen en su caricatura, yo no".
Pero la bronca y sus consecuencias eran imparables. El peri¨®dico Lib¨¦ration citaba hoy a dos ministros que, desde el anonimato, critican la manera en que el debate est¨¢ siendo organizado. No son los ¨²nicos dirigentes pol¨ªticos de las filas de Sarkozy en hacerlo: el ex ministro de Jacques Chirac y diputado de la UMP Fran?ois Baroin, asegura que esta discusi¨®n "desata los bajos instintos" y que "hay que dejarla en suspenso por lo menos durante los periodos electorales".
Dos antiguos primeros ministros conservadores tambi¨¦n han manifestado sus reservas: Jean-Pierre Raffarin asegura que al debate le falta "rigor intelectual". Dominique de Villepin (enemigo declarado de Sarkozy), va m¨¢s lejos y pide su anulaci¨®n por considerar que no conduce a ninguna parte y constituye un sinsentido en tiempos de crisis econ¨®mica.
Por medio de un comunicado, Arielle Schwab, presidente de la Uni¨®n de Estudiantes Jud¨ªos en Francia, tambi¨¦n ha solicitado hoy que el Gobierno termine con la pol¨¦mica. "A fuerza de servir de veh¨ªculo para opiniones racistas, el debate est¨¢ dividiendo a la sociedad francesa y dificulta el hecho de vivir juntos".
Yazid Sabeg, comisario de la Diversidad, encargado por el Gobierno de arbitrar medidas encaminadas a integrar a la poblaci¨®n inmigrante, aunque cree que el debate es necesario, manifest¨® el domingo en el Journal du Dimanche que, actualmente, "se escapa a todo control". Y a?adi¨®: "Da a los musulmanes la sensaci¨®n, una vez m¨¢s, de que est¨¢n discriminados. Lo que yo tem¨ªa ya est¨¢ a punto de pasar. Cuando se organiza un debate p¨²blico, hay que aclarar qu¨¦ se busca y d¨®nde se quiere ir".
La exasperaci¨®n sobre la identidad nacional ha coincidido con el t¨¦rmino de una comisi¨®n parlamentaria dedicada a estudiar el uso por parte de las mujeres musulmanas en Francia del burka y del niqab, vestimenta que s¨®lo deja descubiertos los ojos. Los diputados de la mayoritaria UMP son partidarios de una ley que proh¨ªba esta manera de vestir en el espacio p¨²blico.
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