Nueva etapa en la guerra autonomista de Bolivia

Ansioso por consolidar una total hegemon¨ªa en Bolivia, el gobernante Movimiento Al Socialismo (MAS) ha comenzado ya su campa?a electoral para los comicios regionales de abril de 2010 con la designaci¨®n de candidatos para copar las nueve gobernaciones y las alcald¨ªas de 327 municipios. Adem¨¢s, paralelamente, desarrolla una estrategia de acoso judicial a sus principales oponentes de la ag¨®nica media luna, compuesta por los cuatro departamentos autonomistas: Santa Cruz, Tarija, Beni y Pando.

Los resultados oficiales de la Corte Nacional Electoral establecieron que el 95% de los electores acudi¨® a las urnas el 6 de diciembre para reelegir, con un 64% de los votos, a Evo Morales como presidente, a ?lvaro Garc¨ªa Linera como vicepresidente, y a los aspirantes a un esca?o en la Asamblea Legislativa Plurinacional, donde el MAS obtuvo los dos tercios con los que aprobar¨¢ un centenar de leyes para poner en pr¨¢ctica el cambio en Bolivia.

El l¨ªder del MAS, el presidente Morales, y sus principales colaboradores nombraron a los candidatos a gobernadores y alcaldes despu¨¦s de las reuniones mantenidas en las tres ¨²ltimas semanas con sus organizaciones de base. En las ¨²ltimas horas, sin embargo, han aflorado muchas protestas debido al descontento generado por tales designaciones, mientras aumentan las quejas ante la presunta ausencia de consultas a los llamados movimientos sociales y juntas vecinales para los nombramientos.

Pese a que los dirigentes del MAS han insistido en que los candidatos fueron proclamados con el apoyo mayoritario de las organizaciones sociales, la influyente Federaci¨®n de Juntas Vecinales de El Alto ha cuestionado la designaci¨®n del dirigente sindical Edgar Patana como candidato a alcalde de esa ciudad, al que acusan de v¨ªnculos con casos de corrupci¨®n.

El secretario de esa federaci¨®n, Rub¨¦n Mendoza, ha solicitado la reconsideraci¨®n del nombramiento y ha advertido que, si el presidente Morales no designa a otra persona con el consentimiento de las juntas vecinales, buscar¨¢n mediante alianzas un candidato propio. El Alto es el basti¨®n del MAS, donde obtuvo las mayores y decisivas cifras de apoyo en las urnas.

Morales ha convocado a sus seguidores a que en las elecciones del 4 de abril de 2010 se logre una aplastante victoria, mucho mayor que la obtenida el 6 de diciembre. El vicepresidente Garc¨ªa Linera anticip¨® ya el prop¨®sito de que el poder pol¨ªtico consolidado en las urnas pueda expandirse a un control territorial para hacer efectivo el cambio revolucionario en Bolivia.

Ese prop¨®sito hegem¨®nico aparentemente supone inhabilitar a sus principales adversarios con el inicio de procesos judiciales contra los prefectos de Tarija, Mario Coss¨ªo; Santa Cruz, Rub¨¦n Costas, y Beni, Ernesto Su¨¢rez, as¨ª como al detenido prefecto de Pando, Leopoldo Fern¨¢ndez, esta vez por presunta malversaci¨®n de fondos para financiar el refer¨¦ndum de aprobaci¨®n de los estatutos auton¨®micos, que fueron respaldados por el 80% de los ciudadanos.

Los tres primeros han confirmado que ir¨¢n a la reelecci¨®n de gobernadores, convencidos de que obtendr¨¢n al menos la misma votaci¨®n -un promedio del 70%- lograda en el ¨²ltimo refer¨¦ndum revocatorio del 10 de agosto. El MAS obtuvo hace tres semanas el segundo lugar, con un 39% de votos en Santa Cruz y un 40% en Beni y Pando, respectivamente.

Costas, Coss¨ªo y Su¨¢rez pueden ser procesados por malversaci¨®n de fondos, seg¨²n confirm¨® el Ministerio de Lucha contra la Corrupci¨®n. Su titular, Nardy Suxo, rechaz¨® la presunta persecuci¨®n pol¨ªtica de la que se han quejado varios de los candidatos. "No existe ning¨²n tipo de persecuci¨®n pol¨ªtica ni nada que se asemeje a ello. Lo que existe es una persecuci¨®n por delitos penales y lo que corresponde es asumir una defensa jur¨ªdica", afirm¨® la ministra Suxo, que persigue judicialmente a los gobernadores por haber utilizado, presuntamente, recursos no autorizados para financiar la consulta popular sobre los estatutos auton¨®micos.

El Gobierno de Morales convoc¨® en julio de 2006 un refer¨¦ndum sobre las autonom¨ªas, a cuyo t¨¦rmino cuatro departamentos expresaron su voluntad de ser aut¨®nomos y cinco -La Paz, Oruro, Potos¨ª, Chuquisaca y Cochabamba- mantuvieron su vocaci¨®n centralista. Al amparo de estos resultados, los cuatro departamentos autonomistas procedieron a llamar a una consulta de aprobaci¨®n de los estatutos auton¨®micos, que al final quedaron estrangulados en su aplicaci¨®n ante el recorte de los ingresos econ¨®micos dispuesto por el Gobierno. Los otros cinco departamentos apoyaron mayoritariamente el r¨¦gimen auton¨®mico en las elecciones del 6 de diciembre, a instancias del propio Gobierno.