Para evitar un nuevo desastre en Hait¨ª
Semanas despu¨¦s del cataclismo generado por el terremoto que mat¨® a m¨¢s de 220.000 personas en Hait¨ª, una nueva tragedia acecha a los haitianos a menos de que haya ayuda inmediata. El da?o f¨ªsico es r¨¢pidamente visible. Menos obvia, pero igual de real, es la amenaza de una crisis de alimentos causada por el colapso del sector agr¨ªcola.
Por lo tanto, la prioridad absoluta hoy es ayudar a los agricultores haitianos a que produzcan sus propios alimentos, equipando al menos 100.000 familias rurales con semillas, herramientas y otros insumos para la temporada de siembra de primavera que comienza este mes y genera el 60% de la producci¨®n nacional de alimentos. Otras 100.000 familias urbanas deben recibir ayuda para que produzcan vegetales frescos para su propio consumo.
Pero de los 70 millones de d¨®lares EE UU que el llamamiento urgente de ayuda de las Naciones Unidas busca para las necesidades agr¨ªcolas inmediatas de Hait¨ª, s¨®lo se ha recibido el 17% de los fondos.
Si los agricultores no pueden sembrar sus campos puede ser que abandonen sus granjas y se sumen a las filas de desempleados y despose¨ªdos que ya se acumulan en la ciudad y en el campo, hacia donde ya han huido 500.000 personas.
Inmediatamente despu¨¦s del terremoto, la atenci¨®n se centr¨® -correctamente- en la ayuda alimentaria, el agua, la sanidad, los servicios m¨¦dicos y en el refugio. Pero al ignorar la agricultura hoy ponemos en peligro la capacidad de los haitianos de alimentarse por si mismos el d¨ªa de ma?ana.
Esto es m¨¢s grave a¨²n ya que la agricultura representa la mayor esperanza para un mejor futuro para el pa¨ªs. Hait¨ª tiene un enorme potencial, como lo demostr¨® en el pasado cuando exportaba az¨²car, caf¨¦ y otras cosechas.
Hoy ese potencial se puede dar una vez m¨¢s y traer un renacimiento haitiano surgido de las ruinas del terremoto. Seg¨²n el Banco Mundial, el crecimiento del PIB liderado por la agricultura es cuatro veces m¨¢s efectivo a la hora de aumentar los ingresos de los extremadamente pobres que cualquier otro tipo de crecimiento.
El gobierno de Hait¨ª, junto con sus aliados de las Naciones Unidas y de otras agencias, han preparado un plan de 700 millones de d¨®lares EE UU para impulsar la producci¨®n agr¨ªcola y los ingresos rurales, reparar la infraestructura y comenzar a rehabilitar un medio ambiente gravemente degradado.
Se requiere de un apoyo significativo de parte de los donantes de manera urgente para implementar este plan. De lo contrario, el pa¨ªs perder¨¢ una gran oportunidad para reconstruir su agricultura, que en 2009 creci¨® en cu¨¢nto a sus cereales en un 14% con respecto a 2008, bajo el liderazgo del gobierno de Hait¨ª apoyado por la FAO.
Las agencias de la ONU con sede en Roma -FAO, PMA y FIDA- han establecido un Grupo de Trabajo Conjunto sobre Hait¨ª con el fin de aportar una respuesta firme y coordinada para ayudar al gobierno haitiano a restablecer la seguridad alimentaria. Pero Hait¨ª necesita un compromiso fuerte de los donantes para poner el plan en acci¨®n.
El camino hacia la seguridad alimentaria sostenible requerir¨¢ de una compleja combinaci¨®n de esfuerzos regionales, multilaterales y de gobierno, con la participaci¨®n necesaria de todos los actores, incluido el sector privado y la sociedad civil. Estoy convencido que un esfuerzo coordinado de todas las partes interesadas en invertir en la agricultura haitiana durante los pr¨®ximos meses y a?os reducir¨¢ la pobreza y la inseguridad alimentaria.
Jacques Diouf, Director General de la Organizaci¨®n de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentaci¨®n (FAO)
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