El Supremo de Brasil rechaza la revisi¨®n de la ley de amnist¨ªa
La petici¨®n para modificar la norma pretend¨ªa el castigo de algunos cr¨ªmenes cometidos durante la dictadura militar (1964-1985) que no deber¨ªan ser considerados pol¨ªticos
Con una decisi¨®n hist¨®rica y con siete votos a favor y dos en contra, el Supremo Tribunal Federal de Brasilha rechazadouna petici¨®n de laOrden Nacional de Abogados para que pueda ser revisada la ley de amnistia aprobada despues de la dictadura militar (1964-1985) y de esa forma poder castigar algunos cr¨ªmenes que no deber¨ªan ser considerados pol¨ªticos como la tortura, la desaparici¨®n de personas y el estupro. El Gobierno del presidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva estaba dividido. Por ejemplo, el ministro de Derechos Humanos Paulo Vannuchi y el ex ministro de Justicia, Tarso Genro, ambos de la izquierda del Partido de los Trabajadores (PT) estaban a favor de revisar la ley de amnist¨ªa, mientras que el ministro de Defensa, Nelson Jobim estaba encontra.
"Brasil hizo una opci¨®n a favor de la concordia nacional"
La discusi¨®n de los miembros del Supremo fue p¨²blica y retransmitida por televisi¨®n. El Presidente, Cezar Peluso resumi¨® en la motivaci¨®n de su voto a favor de mantener la ley de amnist¨ªa el parecer de la mayor¨ªa de los magistrados con estas palabras: "Brasil hizo una opci¨®n a favor de la concordia nacional y debe ser respetada". Seg¨²n Peluso, adem¨¢s, la revisi¨®n de nada servir¨ªa en la pr¨¢ctica, ya que todos los cr¨ªmenes ya han prescrito.
El magistrado Celso de Melo aleg¨® que la ley fue el resultado de un amplio debate nacional para hacer posible la transici¨®n entre el r¨¦gimen militar y el r¨¦gimen democr¨¢tico actual. La mayor¨ªa de los que defendieron que no se revise la ley insistieron en que fue una ley de consenso entre ambas partes que asegur¨® una transici¨®n pac¨ªfica a la democracia. "La amnist¨ªa fue un acto de amor, fundado en la convivencia pac¨ªfica de los ciudadanos", argument¨® el magistrado Marco Aurelio Mello.
Una tarea del Congreso
Los dos ¨²nicos que votaron a favor de revisar la ley, Ayres Britto y Ricardo Lewandowski, insisitieron en que la ley no pod¨ªa incluir cr¨ªmenes que no son pol¨ªticos, como la tortura, ya que "el torturador no es un ide¨®logo". Britto resalt¨® que la mayor¨ªa de los torturadores no fueron militares y que la revisi¨®n de la ley ser¨ªa incluso "una forma de purificar a las fuerzas armadas". Los defensores de la revisi¨®n de la ley ya han anunciado que podr¨¢n recurrir a los tribunales internacionalescontra la sentencia del Supremo, aunque ¨¦ste, en realidad, no ha hecho m¨¢s que rechazar la petici¨®n de la Orden de Abogados. Algunos magistrados han recordado que el Supremo no podr¨ªa revisar la ley, algo que s¨®lo el Congreso podr¨ªa replantearse, como sostuvo, por ejemplo el magistrado Eros Grau, relator del proceso y que a pesar de haber sido ¨¦l mismo una de las v¨ªctimas de la dictadura de los militares, se manifest¨® en contra de la revisi¨®n de la ley.
Incluso los que est¨¢n contra la revisi¨®n de la ley para evitar in¨²tiles revanchismo en un pa¨ªs ya pacificado y consolidado en su democracia, est¨¢n de acuerdo en que se abran todos los archivos de la dictadura para que se pueda saber, por ejemplo, donde fueron enterradas muchas de las v¨ªctimas dadas a¨²n hoy por desaparecidas.
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