M¨¢s de 7.500 armas nucleares operativas alejan el sue?o de un mundo libre de la amenaza at¨®mica
Greenpeace publica un art¨ªculo en el aniversario del bombardeo de Hiroshima con datos que restan credibilidad a los planes de desarme nuclear de la comunidad internacional
Despu¨¦s de 65 a?os del bombardeo nuclear de Hiroshima , el sue?o de un mundo libre de la amenaza at¨®mica est¨¢ a¨²n muy lejos de poderse realizar, seg¨²n los datos publicados por Greenpeace Espa?a. Las ocho potencias nucleares (EE UU, Rusia, Reino Unido, Francia, China, India, Pakist¨¢n e Israel) poseen m¨¢s de 7.500 armas nucleares operativas y un total superior a 22.000 cabezas nucleares, cifras que la ONG obtiene de un estudio reciente del SIPRI , un instituto de investigaci¨®n sueco especializado en conflictos armados y pol¨ªticas de desarme.
Ante estos n¨²meros, parecen demasiado optimistas las palabras del secretario general de Naciones Unidas , Ban Ki-Moon, que ha propuesto fijar 2012 como el a?o de entrada en vigor del Tratado para la Prohibici¨®n de Pruebas Nucleares y espera poder celebrar en 2020 la existencia de un mundo libre de amenazas at¨®micas. "En ambos casos, se trata de declaraciones bien intencionadas, pero dif¨ªciles, si no imposibles de conseguir en los plazos auspiciados por Ban Ki-Moon", declara Mabel Gonz¨¢lez Bustelo, responsable de Conflictos y Medio Ambiente de Greenpeace Espa?a.
"En este a?o se han producido algunos avances, aunque muy limitados e insuficientes, en materia de desarme y no proliferaci¨®n nuclear", se lee en el sitio de la organizaci¨®n. La referencia es al tratado firmado por Rusia y EE UU en abril pasado en Praga. Seg¨²n Greenpeace, se trata, sin embargo, de reducciones sobre el armamento desplegado, no el almacenado. "Ha habido pasos importantes desde que el presidente de EE UU, Obama, habl¨® del fin de la era nuclear, en Praga en 2009, con un discurso que no signific¨® nada en concreto, pero s¨ª un cambio de actitud importante. Por lo menos, despu¨¦s de a?os en el olvido, el tema ha vuelto a la agenda pol¨ªtica y a la opini¨®n p¨²blica", opina Gonz¨¢lez.
Tambi¨¦n la Conferencia de Revisi¨®n del Tratado de No Proliferaci¨®n (TNP), celebrada en mayo, y que concluy¨® con un documento de consenso en el que se habla de impulsar la idea de hacer de Oriente Pr¨®ximo una zona libre de armas de destrucci¨®n masiva, es "un paso limitado e insuficiente" seg¨²n la organizaci¨®n, dado que, al mismo tiempo, "varias de las potencias at¨®micas est¨¢n modernizando sus arsenales". "Greenpeace est¨¢ contra los dobles est¨¢ndares de la comunidad internacional", apunta Gonz¨¢lez, "no se pueden tolerar programas at¨®micos de pa¨ªses amigos como India, Pakist¨¢n e Israel y luego pedir a Ir¨¢n que no desarrolle su capacidad nuclear".
La ONG sigue en su lucha contra los armamentos at¨®micos, sobre todo en los pa¨ªses directamente interesados: "Nuestras delegaciones en Turqu¨ªa, B¨¦lgica, Holanda e Italia se han manifestado m¨¢s veces para que EE UU retire las armas nucleares de sus bases militares en estos pa¨ªses. En Reino Unido, Greenpeace se opone activamente al remplazo de los submarinos at¨®micos. Aunque en ning¨²n caso se trata de problemas locales, sino algo que interesa a toda la humanidad", concluye la representante de Greenpeace.
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