Lula pidi¨® a Ch¨¢vez que bajara el tono contra EE UU
El presidente brasile?o envi¨® a su ex lugarteniente, Jos¨¦ Dirceu, a advertirle a su par venezolano de que no "jugara con fuego"
La incendiaria ret¨®rica de Hugo Ch¨¢vez desde su primera investidura presidencial no solo molestaba a Estados Unidos, el principal destinatario de las inventivas, sino tambi¨¦n a Brasil, cuyo presidente, Lula da Silva, quiso aplacar la virulencia del discurso bolivariano con mensajes privados que le solicitaban contenci¨®n. Uno de los emisarios de Lula a Caracas fue Jos¨¦ Dirceu, su lugarteniente en el Gobierno, que habr¨ªa advertido a Ch¨¢vez sobre la conveniencia de dejar "jugar con fuego", seg¨²n dijo el propio Dirceu en una entrevista con el embajador norteamericano en Brasilia, John Danilovich. No hay certeza de que Dirceu fuera as¨ª de tajante con Ch¨¢vez o solo se trat¨® de una promesa encaminada a complacer a EE UU, aparentemente irritado por el silencio de Brasilia ante los excesos verbales del ex teniente de paracaidistas.
No parece que la recomendaci¨®n cursada por Lula haya tenido efecto pues el presidente venezolano continu¨® atacando a Estados Unidos en todos los frentes y, frecuentemente, al colombiano ?lvaro Uribe, aliado de Washington en una regi¨®n donde Ch¨¢vez quiere consolidar su influencia. Los insultos contra George W. Bush fueron terribles un a?o despu¨¦s la reuni¨®n de Dirceu con los diplom¨¢ticos norteamericanos: "burro", "alcoh¨®lico" y "asesino", fueron algunos calificativos pronunciados en p¨²blico. El informe del embajador Danilovich al Departamento de Estado, en abril de 2005, informaba de que el principal asesor de Lula viajar¨¢ a Caracas con el permiso del presidente "llevando el contundente mensaje de que Ch¨¢vez deber¨ªa renunciar a su provocadora ret¨®rica y centrarse en los problemas internos de su pa¨ªs".
El jefe de la legaci¨®n diplom¨¢tica explic¨® a Dirceu que la pol¨ªtica de Washington en ese sentido era no contestar a Ch¨¢vez para no darle excusas y facilitar que con sus palabras ¨¦l mismo demostrara su verdadera naturaleza, "es decir, que se ahogue ¨¦l mismo". Los choques entre Ch¨¢vez y Estados Unidos fueron especialmente intensos desde que el presidente venezolano llegara a la conclusi¨®n de que el golpe petrolero del a?o 2002, que casi lo expulsa del poder, estuvo promovido por Washington en reuniones secretas con la oposici¨®n. "Las provocaciones de Ch¨¢vez contra Estados Unidos perjudican a los intereses nacionales de Venezuela y son motivos de preocupaci¨®n para Brasil y sus vecinos", escribe el diplom¨¢tico norteamericano.
Dirceu prometi¨® comunicar a Ch¨¢vez que no solo el Gobierno de Estados Unidos le es hostil, sino que tambi¨¦n las ¨¦lites norteamericanas, e incluso el hombre de la calle, comenzaba a ver a Venezuela como un problema, y que esa tensa situaci¨®n con la sociedad norteamericana no le beneficiaba ni a ¨¦l, ni a su pa¨ªs". No obstante, el embajador subray¨® al asesor principal de Lula su criterio de que la "alianza estrat¨¦gica" entre Lula y Ch¨¢vez y la aparente resistencia de Lula y otros l¨ªderes regionales a criticar p¨²blicamente las declaraciones m¨¢s ofensivas de Ch¨¢vez "puede llevar a algunos observadores a asumir que Brasil y otros pa¨ªses coinciden con lo que se dice en esas declaraciones y que, en la realidad, Ch¨¢vez es el portavoz de una alianza [con Brasil y otros pa¨ªses]".
En aquella reuni¨®n, tambi¨¦n se abord¨® la posici¨®n cubana al respecto. En opini¨®n de Dirceu, a pesar de las excelentes relaciones entre Venezuela y Cuba, la crispaci¨®n regional no interesa a La Habana. Contrariamente, "los problemas internos de Cuba son tan profundos y su econom¨ªa tan fr¨¢gil que el r¨¦gimen de Castro necesita desesperadamente un ambiente regional calmado para trabajar en la soluci¨®n de sus problemas y atraer inversi¨®n extranjera. ?l [Dirceu] reiter¨® lo que dijo en sus reuniones de Washington, en el sentido de que si el Gobierno de Estados Unidos permitiera el comercio y los contactos privados con Cuba, la isla caribe?a "ser¨ªa irreconocible en cinco a?os".
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