Berlusconi: "Los comunistas existen y usan a los jueces cercanos para eliminarme"
El primer ministro italiano empieza el a?o atacando a la magistratura y a la oposici¨®n "que toma caviar y champ¨¢n"
"Los comunistas existen, vaya que si existen, y me quieren eliminar con la ayuda de los fiscales". Lo ha dicho hoy Silvio Berlusconi, primer ministro italiano, en una entrevista telef¨®nica con un programa de televisi¨®n que ha servido como inicio del curso pol¨ªtico. Berlusconi ha usado un tono entre festivo y feroz, que parece vaticinar que la hip¨®tesis de las elecciones anticipadas est¨¢ m¨¢s cerca de lo que ha admitido en p¨²blico en los ¨²ltimos d¨ªas.
El periodista que le entrevistaba, Alfonso Signorini, es el director de la revista de cotilleo Chi (editada por Mondadori, el grupo editorial de Berlusconi). Signorini ha mostrado en pantalla una fotograf¨ªa de Massimo D'Alema, l¨ªder en la sombra del Partido Democr¨¢tico, de vacaciones con su mujer en Saint Moritz, y ha preguntado a Berlusconi si los comunistas existen todav¨ªa, dado que gente como D'Alema, un ex comunista, pasa sus d¨ªas de descanso en Saint Moritz y viste ropa de cachemir. Berlusconi ha respondido: "El cachemir no puede cambiar el cerebro y el coraz¨®n de la gente. Nuestros post-comunistas fingen haber venido de Marte y dicen que nunca han sido comunistas, pero siguen mistificando la realidad como siempre han hecho, demonizando al adversario, intentando eliminarlo como hacen conmigo, utilizando a los jueces cercanos porque me consideran un obst¨¢culo al que hay que eliminar para llegar al poder".
"Los comunistas italianos han pensado que bastase cambiar el nombre del partido para borrar el pasado", ha a?adido. "Han cambiado el nombre varias veces pero el truco no ha funcionado porque son siempre los mismos, tienen los mismos prejuicios y el mismo modo de hacer pol¨ªtica. Es verdad que se han aburguesado, ahora llevan trajes firmados, zapatos a medida, comen con caviar y champ¨¢n, pero son siempre los mismos".
Y a la pregunta del presentador sobre d¨®nde han terminado los comunistas, Berlusconi ha replicado: "Antes iban a las casas del pueblo, ahora frecuentan los salones m¨¢s chic, pero no han perdido el vicio de calumniar al adversario para eliminarlo como hacen conmigo".
El primer show de Berlusconi en 2011 ha terminado con una broma sobre sus aventuras galantes. El presentador le ha preguntado si alguna vez ha tenido un asunto con una mujer de izquierdas, y Berlusconi ha espetado: "?Nunca, puedo jurarlo!". "Pero su mujer (Ver¨®nica Lario) se ha convertido en un icono de la izquierda", ha insistido Signorini. "Sobre ese tema me abstengo", ha concluido Berlusconi.
El ataque a la oposici¨®n y a los jueces revela la inquietud de Berlusconi ante la inminente decisi¨®n del Tribunal Constitucional, que el d¨ªa 11 decidir¨¢ sobre la ley del Leg¨ªtimo Impedimento, que permite al primer ministro no ser juzgado mientras se halle al frente del Gobierno. Las primeras filtraciones indican que el alto Tribunal podr¨ªa decantarse por una soluci¨®n salom¨®nica, dejando a los jueces de cada proceso establecer si las tareas de Gobierno de Berlusconi le impiden realmente acudir a los juzgados. Berlusconi tiene en este momento tres procesos pendientes: el caso Mills, el caso Mediaset y el caso Mediatrade.
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