Kirchner y los piqueteros, "un matrimonio de conveniencia"

La relaci¨®n desarrollada por los piqueteros y los sindicatos de trabajadores con N¨¦stor Kirchner, fallecido el pasado a?o, y su esposa, Cristina Fern¨¢ndez, fue definida por la embajada norteamericana en Buenos Aires como "un matrimonio de conveniencia", una alianza de intereses: apoyo pol¨ªtico a cambio de subsidios oficiales. La legaci¨®n diplom¨¢tica observa, sin embargo, un mayor distanciamiento de esas centrales con Cristina Fern¨¢ndez, a quien los piqueteros presionan intensamente para ser incluidos en el manejo de los programas de creaci¨®n de empleo.

Los informes enviados a Washington perciben que el movimiento nacido en los a?os noventa apoya al gobierno en funci¨®n de los subsidios conseguidos y de su presencia en la administraci¨®n. El l¨ªder de la Confederaci¨®n General de Trabajadores (CGT), Hugo Moyano, y una parte del activismo piquetero son los casi ¨²ltimos socios del ejecutivo tras los cismas registrados en las filas del Partido Justicialista (PJ, peronistas), entre gobernadores, alcaldes y legisladores contrarios a la l¨ªnea oficial del partido.

Contrariamente a la percepci¨®n de la embajada, las ¨²ltimas encuestas reflejan que, desaparecido su esposo, Cristina Fern¨¢ndez ha ampliado su base pol¨ªtica y est¨¢ m¨¢s fuerte ahora, en febrero del 2010, que hace un a?o "para desesperaci¨®n de la oposici¨®n", seg¨²n coment¨® ayer un analista.

Los piqueteros, encuadrados en un izquierdismo de amplio espectro, adquirieron simpat¨ªa, relevancia y poder durante la crisis econ¨®mica argentina de los a?os 2001 y 2002, pero las encuestas recogidas por la embajada certifican su declive: la mayor¨ªa de la clase media los rechaza, pero la sociedad en su conjunto en el apoyo y la condena pues sus m¨¦todos han sido muy controvertidos. El bloqueo de carreteras de sus piquetes ascendi¨® a 27 en 1997 y a 7269 el n¨²mero de protestas lanzadas hasta el a?o 2005. La relaci¨®n de esos grupos con los sucesivos gobiernos es antigua: comienza con los gobiernos de Fernando de la R¨²a (1999-2001) y de Eduardo Duhalde (2002-2003), con quienes las relaciones fueron menos amigables.

Los intentos del fallecido presidente Kirchner por controlar a los piqueteros, afirma la embajada, llevaron a su divisi¨®n en varias facciones: aquellas alineadas con Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner, las opositoras al gobierno y los neutrales. Supuestamente uno de sus dirigentes actu¨® en ocasiones como portavoz oficioso de N¨¦stor Kirchner, dice la embajada

300.000 personas

Los piqueteros se distribuyen en 60 grupos, que agrupan a cerca de 300.000 personas, la mayor¨ªa con residencia en el per¨ªmetro de Buenos Aires, seg¨²n el recuento de la legaci¨®n, y "compiten entre s¨ª por los recursos gubernamentales". "Se odian unos a otros", dijo el soci¨®logo consultado por los funcionarios, El grupo principal est¨¢ dirigido por Luis D`Elia, financiado parcialmente por Hugo Ch¨¢vez, organizador de actos contra EE.UU, defensor de Ir¨¢n, pa¨ªs al que viajo "invitado por su gobierno", y proclive a la violencia, a juzgar por el retrato que se le hace. El cable recoge una frase atribuida al jefe piquetero: "no tendr¨ªa ning¨²n problema en matar a algunos de esos (oligarcas)".

Los diplom¨¢ticos estadounidenses dicen que D`Elia "ha servido como alter ego de N¨¦stor Kirchner, promoviendo feas y racistas opiniones sin expl¨ªcitamente relacionar al gobierno con sus palabras". Otros dirigentes piqueteros son Emilio P¨¦rsico, definido como el m¨¢s oportunista de todos, y el de menor preparaci¨®n escolar, Lito Borello y Nadia Mart¨ªnez. N¨¦stor Kirchner, que gan¨® la presidencia en el a?o 2003, se gan¨® su confianza, seg¨²n la embajada, "no restringiendo sus marchas e invitando a sus l¨ªderes a la Casa Rosada (sede de la presidencia). Medio centenar obtuvo nombramiento en la administraci¨®n nacional y local.

Dada la importancia del movimiento y "como parte de los esfuerzos de la embajada para llegar a un amplio espectro de la sociedad argentina, la embajada celebr¨® una serie de reuniones con los l¨ªderes de los piqueteros, adem¨¢s de contar con un experto". Los diplom¨¢ticos se interesaron en varios despachos por los or¨ªgenes, motivaciones y estrategia de un activismo todav¨ªa presenta en la pol¨ªtica nacional y en la administraci¨®n, con fuertes presiones para lograr sus objetivos: su entrada en programas oficiales. Parte del peronismo quisiera que desaparecieran de la escena o se agruparan org¨¢nicamente en sindicatos existentes.

Objetivos diferentes

A pesar de compartir los mismos objetivos, la creaci¨®n de empleo, la inclusi¨®n social y la intervenci¨®n del Estado en la econom¨ªa, los l¨ªderes piqueteros difieren sobre c¨®mo alcanzar estos objetivos. Tampoco el dirigente sindical Moyano comparte el dec¨¢logo de la econom¨ªa de mercado, pero se aprovecha de sus servicios al gobierno, dice un informe de la embajada. Las maniobras de Moyano, especialmente respaldado por el sindicato los camioneros, a quienes consigui¨® un aumento salarial del 17%, hizo "a la pareja gobernante m¨¢s dependiente que nunca del sindicato (la CGT), siempre listo para rentabilizar su apoyo al gobierno". El cable cita como ejemplo el nombramiento de Mariano Recalde, abogado de la CGT, como presidente de Aerol¨ªneas Argentinas.

El an¨¢lisis de EE.UU es ¨¦ste: al igual que N¨¦stor Kirchner necesit¨® de los sindicatos para mantener el orden social y ocuparse de la crisis econ¨®mica del bienio 2001-2002, Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner los necesita "para contener la r¨¢pida erosi¨®n de su base pol¨ªtica, as¨ª como para mantener la paz en un entorno de deterioro econ¨®mico". La actual realidad econ¨®mica en Argentina, sin embargo, no es de deterioro, sino de claro crecimiento: un pujante 7%.

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