Breivik declara que organiz¨® con "otras dos c¨¦lulas" el doble atentado en Noruega

El ultraderechista Anders Behring Breivik, de 32 a?os, autor confeso de la matanza de Noruega, ha asegurado que cont¨® con la colaboraci¨®n de "otras dos c¨¦lulas" en la organizaci¨®n del doble atentado que ha conmocionado al pa¨ªs n¨®rdico y al resto de Europa. As¨ª lo ha revelado el juez instructor Kim Kim Heger tras tomar declaraci¨®n al asesino. Breivik ha finalizado poco despu¨¦s de las 14.30, hora local y peninsular espa?ola, su primera declaraci¨®n ante el juez, tres d¨ªas despu¨¦s del ataque y sin la presencia de medios de comunicaci¨®n. Al t¨¦rmino de la vista, el magistrado ha comparecido ante los medios para explicar que Breivik ha confesado estar detr¨¢s del doble atentado, aunque se ha negado a declararse culpable. El juez ha aceptado la petici¨®n de la polic¨ªa y ha decretado prisi¨®n provisional por ocho semanas renovables, el doble del tiempo habitual. La polic¨ªa ha rebajado de 93 a 76 la cifra de muertos.

"Hay dos c¨¦lulas m¨¢s en nuestra organizaci¨®n", ha dicho Breivik al juez, quien ha asegurado que "el acusado ha realizado declaraciones que requieren una investigaci¨®n adicional". Seg¨²n un portavoz del juzgado, el reo ha argumentado que su objetivo era "castigar a la socialdemocracia" por "importar" musulmanes. "El detenido asegur¨® que necesitaba perpretar estos atentados para salvar a Noruega y a Europa occidental de los musulmanes y del marxismo cultural", ha continuado esta misma fuente. Breivik ha defendido ante el juez que pretend¨ªa "limitar" las opciones de los laboristas, hoy en el Gobierno, para acceder al poder.

Seg¨²n adelant¨® ayer Geir Lippestad, abogado del acusado, este cree que los cr¨ªmenes fueron "atroces pero necesarios" y considera que no se merece ning¨²n castigo por ellos. Las im¨¢genes tomadas por la televisi¨®n noruega han mostrado la llegada del acusado en un veh¨ªculo todoterreno negro. En el asiento trasero de su interior y junto a un agente de polic¨ªa se sentaba Breivik -que no pudo asistir en uniforme policial como pretend¨ªa-, de pelo corto rubio y vestido con un atuendo rojo. El autor confeso de la matanza ha llegado tranquilo y no ha podido hablar con la prensa, apostada frente al garaje de donde ha salido.

Una hora antes de que las miradas se tornaran hacia el juzgado, Noruega ha rendido un nuevo homenaje a las v¨ªctimas del doble atentado con un minuto de silencio. Desde las escalinatas de la Universidad de Oslo, la familia real noruega encabezada por el rey Harald, acompa?ada del primer ministro del pa¨ªs, Jens Stoltenberg, ha presidido el minuto de silencio al que se ha unido toda la capital noruega. Coches y autobuses han detenido sus motores para respetar los 60 segundos de recuerdo a los muertos, solo roto por el vuelo de las gaviotas sobre la ciudad.

Revisi¨®n a la baja de la cifra de muertos

La polic¨ªa noruega ha rebajado de 86 a 68 el n¨²mero de v¨ªctimas mortales en la isla de Utoya, y ha elevado de siete a ocho los muertos por la bomba en el centro de Oslo, por lo que el balance provisional se quedar¨ªa en 76. Un portavoz policial ha aclarado que esta revisi¨®n se debe a las "circunstancias dif¨ªciles" en las que se ha llevado a cabo el rescate y se ha gestionado la informaci¨®n. Tambi¨¦n hoy ha trascendido que entre las v¨ªctimas mortales del tiroteo de Utoya est¨¢ Trond Berntsen, un hermanastro de la princesa Mette-Marit. De 51 a?os, Berntsen, polic¨ªa de profesi¨®n, se hab¨ªa trasladado hasta la isla para colaborar en la seguridad privada. El hermanastro de la Pr¨ªncesa habr¨ªa muerto al enfrentarse con Breivik.

La actuaci¨®n de la polic¨ªa sigue suscitando serias dudas entre la poblaci¨®n. Un portavoz policial reconoci¨® que llegaron tarde a la isla de Utoya porque no dispon¨ªan de un barco con la capacidad necesaria para transportar al personal y al equipo capaces de hacer frente al asesino. Tampoco dispon¨ªan de helic¨®pteros, seg¨²n el jefe policial Sveinungn Sponheim, porque la base de los helic¨®pteros se encuentra en el sur del pa¨ªs.

La polic¨ªa trata ahora de averiguar si Breivik est¨¢ conectado con alg¨²n grupo ultraderechista en el extranjero y si recibi¨® ayuda de alg¨²n tipo. Esas investigaciones han dado por ahora pocos resultados. Ayer domingo por la ma?ana seis personas fueron arrestadas por haber colaborado con el joven noruego de 32 a?os y liberadas poco despu¨¦s sin cargos. Por ahora, lo ¨²nico que se sabe es que Breivik, vestido de polic¨ªa, burl¨® la escasa seguridad que controla las oficinas del Gobierno y coloc¨® un coche bomba que mat¨® a siete personas. Era solo una maniobra de distracci¨®n para desarrollar su aut¨¦ntico plan. Desde all¨ª fue a la isla de Utoya, a una hora en coche del centro de Oslo, y armado de un rifle fue disparando a sangre fr¨ªa a un grupo de j¨®venes del Partido Laborista, que gobierna en Noruega desde 2005.