El Gobierno israel¨ª arremete contra las ONG cr¨ªticas con la ocupaci¨®n
El Ejecutivo impulsa en el Parlamento una ley para ahogar la financiaci¨®n exterior de las organizaciones
¡°El Gobierno de Netanyahu solo quiere callar a la izquierda israel¨ª. Esta ley es una excusa m¨¢s¡±, dice Hagit Ofran, directora del departamento de Seguimiento de los Asentamientos en la ONG israel¨ª Shalom Ajsav (Paz Ahora). Esta activista sufri¨® en primera persona uno de los ¨²ltimos ataques de grupos radicales de la ultraderecha cuando d¨ªas atr¨¢s recibi¨® varias llamadas de tel¨¦fono amenaz¨¢ndola de muerte y su coche apareci¨® con los cristales rotos y con pintadas como ¡°Muerte a los izquierdistas¡±.
El proyecto de ley al que se refiere Ofran (promovido por dos miembros del Likud, el partido de Netanyahu) se aprob¨® el domingo por el Comit¨¦ Ministerial para la Legislaci¨®n y afectar¨¢ principalmente a las ONG calificadas como ¡°pol¨ªticas¡± y que principalmente trabajan en la defensa de los derechos humanos en los territorios palestinos. Seg¨²n esta ley, el techo m¨¢ximo de ayuda procedente del exterior para cada una de estas organizaciones ser¨¢ de 20.000 shekels (unos 4.000 euros), lo que supone un serio riesgo para las finanzas de estas organizaciones.
Las ONG? no podr¨¢n ingresar m¨¢s de 4.000 euros de ayuda exterior
Incluso el partido ultraconservador Israel Beitenu, liderado por el titular de Exteriores, Avigdor Lieberman, presiona para que se apruebe una segunda iniciativa por la que se gravar¨ªan con un 45% las donaciones extranjeras dirigidas a aquellas organizaciones.
Sin embargo, las ONG no son las ¨²nicas que han puesto el grito en el cielo en lo que llaman una derechizaci¨®n salvaje de la pol¨ªtica del Gobierno. Incluso en las entra?as del propio partido de Netanyahu, el conservador Likud, surgen voces discordantes. Una de ellas es la de Reuven Rivlin, presidente del Parlamento, acusado en varias ocasiones de politizar su cargo, supuestamente neutral. ¡°Algunos dentro del Likud se est¨¢n aislando incluso en casa¡±, dec¨ªa este fin de semana en la sede de su partido en Tel Aviv en referencia a los dos diputados de su formaci¨®n, Tzipi Hotovely y Ofir Akunis, que han impulsado la ley despu¨¦s del intento fallido por aprobarla el pasado verano.
Entonces, el fiscal general del Estado la declar¨® inconstitucional, lo que paraliz¨®, al menos moment¨¢neamente, su aprobaci¨®n en el Parlamento. Hotovely dec¨ªa al t¨¦rmino del Gabinete que ¡°es el derecho del Estado de Israel no sucumbir a los intentos extranjeros para comprar influencia dentro de Israel¡±.
El Comit¨¦ Ministerial para la Legislaci¨®n tambi¨¦n aprobaba el domingo varios proyectos de ley igualmente controvertidos. Uno por el que el Comit¨¦ Constitucional del Parlamento (formado en su mayor¨ªa por legisladores conservadores) podr¨¢ vetar el nombramiento de cualquier juez en la Corte Suprema israel¨ª. La ¨²ltima, una enmienda a la Ley Antidifamaci¨®n, destinada a endurecer las penas por ¡°comportamientos antinacionales¡± y donde los periodistas israel¨ªes considerados de izquierdas son el principal blanco.
Tzipi Livni, l¨ªder de Kadima, principal partido de la oposici¨®n, dec¨ªa tras conocerse la aprobaci¨®n de los proyectos de ley que ¡°Israel es el tipo de pa¨ªs donde todo el mundo puede decir sus opiniones, incluso si no nos gustan¡±. La experiodista Shelly Yachimovich, actual l¨ªder de Partido Laborista, iba m¨¢s all¨¢. ¡°Netanyahu no puede seguir escondi¨¦ndose detr¨¢s de los miembros de su partido y lavarse las manos ante esta avalancha de leyes antidemocr¨¢ticas¡±.
El Primer Ministro israel¨ª parece haberse mostrado en su c¨ªrculo m¨¢s cercano contrario a la ley que reformar¨ªa el sistema judicial, pero s¨ª ha dicho p¨²blicamente que apoyar¨¢ la que limita la financiaci¨®n de las ONG, aunque con algunas enmiendas. Entre ellas, elevar el techo financiero de 20.000 shekels y distinguir entre organizaciones de defensa de derechos humanos y otras de car¨¢cter pol¨ªtico, lo que para su Ejecutivo son casi todas las que denuncian la actuaci¨®n de su Gobierno. Estas iniciativas se someter¨¢n a debate parlamentario en los pr¨®ximos d¨ªas.
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