M¨¢s de 30 reclusos mueren en una reyerta en una c¨¢rcel del norte de M¨¦xico

El Estado mexicano de Tamaulipas vivi¨® el mi¨¦rcoles la primera tragedia del a?o ligada a sus c¨¢rceles. 31 reclusos de una prisi¨®n de Altamira, en la regi¨®n de Tampico, a 500 kil¨®metros al noreste de la capital federal, han muerto en una reyerta que comenz¨® al mediod¨ªa de ayer y que se prolong¨® durante horas antes de que pudiera ser sofocada por las autoridades. Otros 13 presos resultaron heridos. En la pelea, los reclusos usaron armas punzantes de fabricaci¨®n artesanal.

Seg¨²n el informe de la Secretar¨ªa de Seguridad P¨²blica y la Fiscal¨ªa de Tamaulipas, la batalla campal comenz¨® cuando internos de un m¨®dulo se trasladaron a otro que no les correspond¨ªa. La polic¨ªa necesit¨® varias horas para dominar la situaci¨®n, y un d¨ªa despu¨¦s de la tragedia las autoridades no hab¨ªan informado sobre la identidad de los fallecidos. Solo hab¨ªan especificado que 22 de ellos ingresaron en prisi¨®n acusados por delitos del fuero com¨²n (que persiguen las autoridades locales) y nueve por violaciones de leyes federales.

La noche del mi¨¦rcoles, 13 reclusos fueron interrogados por su presunta participaci¨®n en la ri?a y tambi¨¦n se tom¨® declaraci¨®n a los custodios del penal que es considerado de mediana seguridad y que, seg¨²n informaciones de la prensa local, padece hacinamiento, pues la c¨¢rcel alberga 3.000 internos cuando fue dise?ado para 2.000. La tarde del mi¨¦rcoles familiares de internos llegaron al reclusorio para demandar sin ¨¦xito informaci¨®n sobre lo que ocurr¨ªa en el interior del penal.

Las c¨¢rceles de Tamaulipas, Estado fronterizo con Tejas, han sido escenario de asesinatos colectivos y fugas masivas desde 2010. En octubre pasado, 20 reclusos murieron en el penal de Matamoros; en julio, en la c¨¢rcel de Nuevo Laredo, fueron siete los muertos y 59 los que lograron fugarse. Tan solo entre 2010 y marzo de 2011 fueron 400 los internos que se fugaron de c¨¢rceles tamaulipecas, regi¨®n que padece el enfrentamiento entre el c¨¢rtel del Golfo y el grupo criminal de los Zetas.

Entre 2010 y marzo de 2011, 400 internos se han fugado de c¨¢rceles del Estado de Tamaulipas

El problema carcelario de M¨¦xico est¨¢ lejos de limitarse a lo que ocurre en Tamaulipas. En los ¨²ltimos siete d¨ªas, en Jalisco se han fugado cinco presos, tres de la c¨¢rcel de Puente Grande, cercana a Guadalajara, y dos del municipio de Cihuatl¨¢n, en la regi¨®n de la costa del Pac¨ªfico. En el primer caso, el padre de uno de los reclusos que se fug¨® muri¨® el viernes despu¨¦s de que agentes de la polic¨ªa lo golpearan al interrogarlo sobre el paradero de su hijo.

En un an¨¢lisis publicado el a?o pasado, Ernesto L¨®pez Portillo, director del Instituto para la Seguridad y la Democracia, recordaba que el modelo penitenciario mexicano est¨¢ en crisis porque ¡°campean la corrupci¨®n, mercados ilegales y violaci¨®n a la ley y a los derechos humanos¡±. Alertaba adem¨¢s de que ¡°cuatro de cada 10 personas de la poblaci¨®n penitenciaria del pa¨ªs no han sido condenadas¡±, es decir, est¨¢n inmersos en un juicio que puede tardar a?os. ¡°El saldo es contundente: m¨¢s gente en prisi¨®n no nos ha ofrecido m¨¢s seguridad y justicia y, por el contrario, muchas de las personas que entran se profesionalizan en el crimen justamente dentro de las prisiones¡±.

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