Tropas de ¨¦lite del Ej¨¦rcito sirio toman el feudo rebelde en Homs

Homs vuelve a estar en manos del Gobierno sirio. Los milicianos rebeldes han anunciado hoy una ¡°retirada t¨¢ctica¡± y han desaparecido de los barrios que hab¨ªan controlado durante meses. Casi al mismo tiempo, la Media Luna Roja y la Cruz Roja Internacional han recibido la autorizaci¨®n de Damasco para entrar el viernes en Homs y atender a la poblaci¨®n civil. Distintos portavoces oficiales han se?alado que las fuerzas opositoras hab¨ªan sufrido una derrota casi definitiva, pero ese mensaje parec¨ªa m¨¢s relacionado con la propaganda pol¨ªtica que con la realidad.

Tambi¨¦n Burhan Ghalioun, jefe del Congreso Nacional Sirio y te¨®rico l¨ªder de la oposici¨®n en el exilio, lanz¨® en Par¨ªs mensajes propagand¨ªsticos. Ghalioun proclam¨® la formaci¨®n de un comit¨¦ militar con la funci¨®n de coordinar a los distintos grupos armados que se enfrentan a las fuerzas de seguridad gubernamentales. ¡°La revoluci¨®n comenz¨® de manera pac¨ªfica y mantuvo esa naturaleza durante meses, pero la realidad es hoy diferente y el Congreso Nacional Sirio debe asumir sus responsabilidades¡±, ha dicho.

Ghalioun asegur¨® que se esforzar¨ªa por conseguir la m¨¢xima cantidad de armamento para los milicianos y que a la vez tratar¨ªa de evitar una guerra civil. No explic¨® c¨®mo se podr¨ªan alcanzar esos dos objetivos aparentemente contradictorios.

En realidad, Ghalioun y el Consejo Nacional tienen una influencia muy limitada sobre los acontecimientos en Siria. Altos oficiales del Ej¨¦rcito de la Siria Libre, formado principalmente por desertores, dijeron que no acatar¨ªan la autoridad militar creada por el Congreso Nacional. Otros grupos que combaten contra el presidente Bachar el Asad, formados por guerrilleros islamistas sirios, iraqu¨ªes y de otras nacionalidades, funcionan de forma completamente aut¨®noma y proclaman como objetivo la creaci¨®n de un r¨¦gimen teocr¨¢tico.

La voluntad declarada por varios gobiernos del golfo P¨¦rsico, encabezados por el saud¨ª, de proporcionar armas a los milicianos de la oposici¨®n, y la proliferaci¨®n de enfrentamientos entre musulmanes sun¨ªes (la religi¨®n mayoritaria) y musulmanes chi¨ªes y alau¨ªes, identificados con el Gobierno, hace prever un conflicto largo y sangriento.

No hay noticias fiables sobre la situaci¨®n en Homs y, m¨¢s concretamente, en el barrio de Bab Amro, hasta ahora basti¨®n rebelde. Los tel¨¦fonos no funcionan, no hay comunicaciones por sat¨¦lite y las informaciones proceden de fuentes indirectas. Seg¨²n activistas de la oposici¨®n, en Bab Amro quedan unos 4.000 civiles que se negaron a huir y sobreviven en condiciones muy precarias, sin agua ni corriente el¨¦ctrica y con muy poca comida. La nieve agudiza las penurias. Los mismos activistas aseguran que los soldados gubernamentales pasaron a cuchillo a m¨¢s de una decena de guerrilleros que hab¨ªan permanecido en Bab Amro para proteger la retirada de sus compa?eros.

Se desconoce el trato que el Ej¨¦rcito dispensa a la poblaci¨®n civil tras su irrupci¨®n en Homs. A juzgar por previas actuaciones militares y por el dur¨ªsimo bombardeo al que la ciudad ha sido sometida durante casi un mes, cabe temer una represi¨®n muy violenta. El Consejo de los Derechos Humanos de la ONU ha aprobado hoy una resoluci¨®n de condena contra el Gobierno sirio por su ¡°sistem¨¢tica violaci¨®n¡± de los derechos de los civiles. Rusia, China y Cuba, que respaldan a Bachar el Asad, votaron en contra del texto.