El nuevo Estado libio
Frente a la hiperconcentraci¨®n de poderes que impuso el gadafismo durante d¨¦cadas es perfectamente comprensible que, una vez ca¨ªdo el dictador, se abra -o se recupere- el debate sobre el modelo de organizaci¨®n territorial y pol¨ªtica para la nueva etapa. En Libia han existido rivalidades regionales desde tiempos lejanos, pero tambi¨¦n voluntad de mantener el pa¨ªs unido. Si los habitantes de la Cirenaica hubiesen querido la partici¨®n, lo habr¨ªan tenido f¨¢cil durante los inicios de la revoluci¨®n de 2011. Sin embargo, aunque no represente a la mayor¨ªa, lo ocurrido en Bengasi es el reflejo de un malestar profundo que podr¨ªa complicar la construcci¨®n del nuevo Estado libio. Por ello, tanto las autoridades transitorias como las que se elegir¨¢n en los pr¨®ximos meses tendr¨¢n que trabajar duro para atender a la poblaci¨®n, crear un sistema inclusivo y avanzar serenamente hacia la descentralizaci¨®n del poder. La poblaci¨®n libia, que tanto ha sacrificado para vivir en libertad, tiene que sentir una mayor presencia del Estado en todo el territorio, con instituciones al servicio del ciudadano y no s¨®lo con fuerzas de seguridad encargadas de la represi¨®n.
La poblaci¨®n libia tiene que sentir una mayor presencia del Estado en todo el territorio
Los pr¨®ximos meses ser¨¢n clave para el dise?o del nuevo Estado libio, con unas elecciones previstas para junio y la redacci¨®n de una nueva Constituci¨®n. De ah¨ª que se est¨¦ intensificando la movilizaci¨®n pol¨ªtica y se est¨¦n echando pulsos que sirvan como elementos de negociaci¨®n. El reto est¨¢ en que las distintas fuerzas pol¨ªticas y sociales libias sean capaces de distanciarse del unilateralismo y la exclusi¨®n propias de la anterior era. Si consiguen crear mecanismos de gobierno y de gesti¨®n transparentes e inclusivos, en Libia hay recursos de sobra para todos sus habitantes. Esos recursos, puestos al servicio del desarrollo del pa¨ªs, pueden contribuir a la prosperidad de vecinos como Egipto o T¨²nez, pero tambi¨¦n de otros m¨¢s al norte. Espa?a cuenta con una importante experiencia de su propia transici¨®n pol¨ªtica. Darla a conocer a los libios podr¨ªa redundar en el beneficio mutuo.
Haizam Amirah Fern¨¢ndez es investigador principal de Mundo ?rabe en el Real Instituto Elcano
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