La extrema derecha da la batalla para sacar a Holanda del euro

La escena pol¨ªtica holandesa, de natural sosegada y estable, est¨¢ en ebullici¨®n. El pa¨ªs lleva dos a?os en recesi¨®n y el Gobierno de centro-derecha, abocado a un ajuste de 18.000 millones de euros para 2015, tiene que seguir ahorrando. El a?o pr¨®ximo, el d¨¦ficit llegar¨¢ al 4,5%, y liberales y democristianos en el poder conocen el monto del nuevo recorte: 9.000 millones de euros. Si la coalici¨®n tuviera mayor¨ªa, la situaci¨®n ser¨ªa dura, muy dura. Como est¨¢ en minor¨ªa y se apoya en la extrema derecha de Geert Wilders, el l¨ªder antimusulm¨¢n, las cosas son a¨²n m¨¢s complicadas.

Mark Rutte, primer ministro liberal, no quiere enfrentamientos p¨²blicos y ha cerrado la puerta de la sala donde debate los nuevos presupuestos con su socio en el poder, el democristiano Maxime Verhagen. Les acompa?a Wilders, que ha exigido ya una muestra de sumisi¨®n a su Partido de la Libertad, la segunda fuerza pol¨ªtica del pa¨ªs. Quiere que convoquen un refer¨¦ndum para salir del euro y volver al flor¨ªn.

El euroescepticismo de Wilders es tan conocido como su rechazo al islam. ?ltimamente ha a?adido a los inmigrantes del Este de Europa a su lista de agravios. Tradicionalmente, sus quejas iban dirigidas ¡°a las intromisiones de Bruselas en la situaci¨®n holandesa¡±. Ahora que el discurso pol¨ªtico es econ¨®mico, se ha crecido. Ha encargado un informe sobre el abandono del euro a un centro de investigaci¨®n brit¨¢nico, tan euroesc¨¦ptico como ¨¦l. Como era de esperar, los expertos de Lombard Street Research han calculado que todo ser¨¢n beneficios para una Holanda fuera de la eurozona. ¡°Perder¨ªamos dinero al principio, pero a partir de 2013 y 2014 ser¨ªa m¨¢s rentable¡±, dice Wilders que le han asegurado los brit¨¢nicos. ¡°El euro es un proyecto fallido, si bien nuestro informe es independiente¡±, han remachado en el instituto.

El Gobierno ya le ha dicho que ¡°no ve las ventajas de desempolvar el flor¨ªn¡±. Eminentes economistas holandeses han se?alado que el estudio est¨¢ lleno de fallos contables. Alguno ha dicho que si fuera una tesina de fin de carrera, la suspender¨ªa. A los que les parece una buena idea, inciden en que la vida ser¨¢ m¨¢s barata. Poco dado a las florituras verbales, Jan Kees de Jager, ministro democristiano de Hacienda, no quiere o¨ªr hablar del flor¨ªn. ¡°Hay que bajar el d¨¦ficit hasta el 3% marcado por la UE. Aunque haya m¨¢rgenes y todo se pueda discutir, no debemos salirnos del guion¡±, exclam¨® al leer la propuesta del jefe xen¨®fobo.

Para Wilders, tal vez osado, pero de ninguna manera ingenuo en materia econ¨®mica, la situaci¨®n es bien simple. El Gobierno le necesita para sacar adelante el nuevo recorte y por eso lanza el guante del euro. Luego pide varias cosas m¨¢s. Si al final tiene que aceptar recortes en los subsidios de paro y las deducciones fiscales por las hipotecas, espera mano dura en asuntos sociales. Lo dijo muy claro al inaugurar la mesa redonda de las negociaciones, en La Haya: ¡°No me gusta esto. Hablaremos tambi¨¦n de inmigraci¨®n y asilo¡±. La ayuda al desarrollo le tiene sin cuidado. Hasta la califica de ¡°ejercicio izquierdoso que cuesta millones¡±. En otras palabras, Holanda, y todas sus cuentas, para los holandeses.

?Hasta d¨®nde ceder¨¢ a sus deseos la coalici¨®n de centro-derecha en aras de cuadrar las cifras? En un Parlamento donde la oposici¨®n socialdem¨®crata jadea en busca de l¨ªder, la respuesta es acuciante.