China destituye al l¨ªder de la izquierda del partido comunista

Cuando el pr¨®ximo oto?o China celebre su m¨¢s importante cita pol¨ªtica quinquenal ¨Cel Congreso del Partido Comunista Chino (PCCh)-, cerrar¨¢ meses, si no a?os, de intrigas y luchas de poder entre la ¨¦lite dirigente para hacerse con uno de los asientos en el todopoderoso Comit¨¦ Permanente del Politbur¨®, actualmente integrado por nueve miembros. El presidente, Hu Jintao, y el primer ministro, Wen Jiabao, ceder¨¢n en ese momento el testigo en la jefatura del PCCh a una nueva generaci¨®n de l¨ªderes, para retirarse de sus cargos en el Gobierno en marzo de 2013. Se prev¨¦ que les sucedan el actual vicepresidente, Xi Jinping, y el viceprimer ministro Li Keqiang.

Si se cumple el ritual de congresos anteriores, el ¨²ltimo d¨ªa del c¨®nclave comparecer¨¢n ante la prensa en el Gran Palacio del Pueblo, en Pek¨ªn, los miembros del nuevo Comit¨¦ Permanente, entre los cuales se prev¨¦ que figuren solo dos de sus actuales integrantes: Xi y Li. Saldr¨¢n por riguroso orden de jerarqu¨ªa, se colocar¨¢n de frente apenas separados por un metro y se dejar¨¢n fotografiar para ofrecer al mundo las primeras instant¨¢neas del grupo que regir¨¢ los destinos de la segunda econom¨ªa del mundo durante los siguientes cinco a?os.

La composici¨®n del m¨¢ximo ¨®rgano de poder de China ser¨¢ el resultado de intensas negociaciones y consenso entre las distintas facciones del partido, tal y como ha ocurrido desde que China puso fin a los gobiernos personalistas, como los de Mao Zedong y Deng Xiaoping.

Pero en el Comit¨¦ Permanente del Politbur¨® que saldr¨¢ del XVIII Congreso del PCCh no se sentar¨¢ ¨Csalvo grandes sorpresas- un pol¨ªtico controvertido y populista que ha hecho todo lo que ha estado a su alcance en los ¨²ltimos a?os para llegar a la cima: Bo Xilai.

Bo, l¨ªder del partido en la municipalidad de Chongqing y uno de los dirigentes m¨¢s extrovertidos y de apariencia rutilante en este pa¨ªs cuya clase pol¨ªtica se caracteriza por todo lo contrario, ha sido apartado de su cargo en Chongqing, seg¨²n ha informado hoy la agencia oficial china Xinhua en un escueto comunicado. La destituci¨®n sigue al esc¨¢ndalo surgido en torno al supuesto intento de uno de sus colaboradores de huir a Estados Unidos. Bo es tambi¨¦n uno de los 25 miembros del Politbur¨® del PCCh. No ha trascendido si conserva este puesto.

La salida de Bo Xilai parece poner fin a la carrera pol¨ªtica de uno de los l¨ªderes chinos m¨¢s ambiciosos y llamativos, que aspiraba a ocupar uno de los codiciados asientos en el Comit¨¦ Permanente, y, seg¨²n algunos analistas, marca el fin de una de las batallas por entrar en el ¨®rgano de poder del partido. Otros aseguran que puede indicar la existencia de una lucha de poder entre el ala conservadora del partido y la liberal, representada esta ¨²ltima por Wen Jiabao y Hu Jintao. La destituci¨®n de Bo Xilai favorece en principio a su rival desde hace tiempo Wang Yang, l¨ªder reformista en la provincia sure?a de Guangdong y aspirante tambi¨¦n a sentarse en el Comit¨¦ Permanente del Politbur¨®.

En un signo de los delicados equilibrios de poder que marcan la alta pol¨ªtica en China, Bo ha sido sustituido en Chongqing por el viceprimer ministro Zhang Dejiang, un especialista en econom¨ªa que durante muchos a?os trabaj¨® en las provincias de Zhejiang y Guangdong, dos de las m¨¢s industriales del pa¨ªs.

Bo Xilai, teleg¨¦nico y extrovertido, se hab¨ªa convertido en centro de inter¨¦s y motivo de especulaci¨®n en las ¨²ltimas semanas despu¨¦s de que Wang Lijun, vicealcalde de Chongqing y anteriormente jefe de polic¨ªa en la municipalidad, se refugiara a principios del mes pasado en el consulado de Estados Unidos en Chengdu (capital de la provincia de Sichuan). Tras ser persuadido por las autoridades centrales de que abandonara el consulado, fue llevado a Pek¨ªn y sometido a investigaci¨®n.

Wang Lijun fue el brazo ejecutor de la pol¨¦mica campa?a de lucha contra la criminalidad y la corrupci¨®n llevada a cabo por Bo en Chongqing, que desemboc¨® en la detenci¨®n de 2.000 personas, el enjuiciamiento de 500 y la ejecuci¨®n de 13, incluido el antiguo director de la Oficina Judicial. La campa?a le granje¨® a Bo Xilai la simpat¨ªa de muchos residentes, pero fue criticado por saltarse los procedimientos legales y haberla realizado con el ¨²nico af¨¢n de ganar notoriedad y servir de catalizador para su carrera pol¨ªtica.

Las relaciones entre Bo y Wang Lijun se agriaron, seg¨²n algunas informaciones, despu¨¦s de que fuera puesta en marcha una investigaci¨®n a antiguos subordinados de Wang en su cargo anterior en la ciudad de Tieling (provincia norte?a de Liaoning). Tras ser transferido a un puesto de menor rango, el 6 de febrero Wang condujo desde Chongqing a Chengdu en un aparente intento de pedir asilo en el consulado de Estados Unidos. Se qued¨® all¨ª toda la noche y solo lo abandon¨® una vez que lleg¨® un equipo de investigadores del Ministerio de Seguridad del Estado enviado desde Pek¨ªn, quienes se lo llevaron a la capital.

El carism¨¢tico Bo Xilai -de 62 a?os e hijo de Bo Yibo, uno de los grandes revolucionarios chinos- se hizo famoso tambi¨¦n por su campa?a para relanzar las canciones rojas y la parafernalia mao¨ªsta con programas patri¨®ticos en la televisi¨®n y el env¨ªo de funcionarios a trabajar en el campo. La iniciativa provoc¨® preocupaci¨®n entre los miembros m¨¢s liberales del PCCh.

El estilo ambicioso y abierto de Bo Xilai ya hab¨ªa da?ado su carrera antes del esc¨¢ndalo de Wang Lijun, en un pa¨ªs donde las salidas de tono y el protagonismo abierto son vistos como ofensivos por muchos dirigentes. El perfil bajo, la discreci¨®n y los movimientos detr¨¢s de las bambalinas, no ante las c¨¢maras y los periodistas como le gustaba al l¨ªder destituido, siguen siendo requisitos para triunfar en pol¨ªtica en China.

Las referencias, el mi¨¦rcoles, del primer ministro, Wen Jiabao, a la crisis en Chongqing, sobre la que dijo, sin citar a Bo Xilai, que los funcionarios y dirigentes deb¨ªan ¡°aprender la lecci¨®n¡± sugirieron que la suerte de la estrella ascendente estaba echada. Seg¨²n fuentes cercanas al Gobierno de Chongqing citadas por la agencia Reuters, Bo ser¨¢ probablemente sometido tambi¨¦n a investigaci¨®n.

La ca¨ªda del dirigente chino, que fue ministro de Comercio y alcalde de la ciudad portuaria de Dalian (provincia norte?a de Liaoning), ha provocado gran revuelo en los servicios de mensajes cortos en Internet, donde millones de personas han dejado comentarios, unos a su favor, otros en contra.

Pek¨ªn no ha ofrecido, de momento, una explicaci¨®n sobre lo que ha ocurrido realmente con Bo Xilai y Wang Lijun, en un entorno marcado por las luchas que caracterizan los arcanos de la pol¨ªtica china en v¨ªsperas de los congresos del partido. De Wang solo se sabe que est¨¢ siendo investigado y ha sido apartado de su cargo como vicealcalde de Chongqing.

Si Bo pierde finalmente su asiento actual en el Politbur¨®, ser¨¢ la primera vez que un miembro de la jefatura colegiada del partido es destituido desde 2006, cuando el secretario del PCCh en Shanghai, Chen Liangyu, fue purgado y condenado posteriormente por corrupci¨®n. La ca¨ªda de Chen fue vista como un movimiento orquestado por Hu Jintao para consolidar su poder y deshacerse de un rival cuando se encontraba a medio camino de su mandato de 10 a?os. La de Bo ser¨ªa la del ¨¢ngel ca¨ªdo.