Ahmadineyad se muestra desafiante ante la sesi¨®n de control del Parlamento

¡°No ha sido un interrogatorio muy dif¨ªcil¡±, resumi¨® con tono chulesco el presidente iran¨ª, Mahmud Ahmadineyad, al concluir la sesi¨®n de control a la que le oblig¨® el Parlamento el mi¨¦rcoles. Despu¨¦s de meses de lucha pol¨ªtica, sus rivales consiguieron que, por primera vez desde la revoluci¨®n de 1979, el jefe del Gobierno se sometiera al escrutinio de la C¨¢mara. Pero a pesar de que los legisladores tienen la potestad te¨®rica de presentar una moci¨®n de censura y apartarle de sus funciones, la mayor¨ªa de los observadores descartaban hoy esa posibilidad. El objetivo parece m¨¢s bien limitar su poder hasta que concluya su mandato a mediados del a?o que viene.

El diputado Ali Motahar¨ª, un destacado oponente de Ahmadineyad, ley¨® una lista de diez preguntas al presidente en una sesi¨®n abierta del Parlamento, que fue trasmitida en directo por la radio estatal. Parte de ellas estaban relacionadas con las acusaciones de mala gesti¨®n econ¨®mica, como la elevada inflaci¨®n o la falta de presupuesto para el metro de Teher¨¢n. Pero las m¨¢s duras se centraron en su rechazo durante 11 d¨ªas a obedecer la orden del l¨ªder supremo, Al¨ª Jamenei, para que anulara la destituci¨®n del ministro encargado de los Servicios Secretos, Heidar Moslehi, en abril de 2011.

Aquel suceso, sumado a la aparente reticencia de Ahmadineyad a escuchar los consejos de los expertos econ¨®micos, convenci¨® a muchos conservadores de que intentaba expandir sus poderes como jefe del Gobierno y les enemist¨® con ¨¦l. El presidente neg¨® haber desafiado al l¨ªder supremo.

¡°Esa es una de esas cosas... Ahmadineyad qued¨¢ndose en casa y descansando. Algunos de mis amigos me han pedido repetidamente que descanse. En este Gobierno, el trabajo no se ha parado ni un solo d¨ªa¡±, manifest¨® Ahmadineyad en un tono que los diputados no consideraron suficientemente serio. Algunos incluso amenazaron con presentar una moci¨®n de censura a la vuelta de las vacaciones de Nowruz, el a?o nuevo persa, que se prolongan hasta primeros de abril.

¡°No creo que vayan a hacerlo. Este Parlamento no tiene motivos por ahora. Simplemente hay cr¨ªticos que quieren mantenerle bajo control¡±, interpreta Mohammad Marandi, un profesor de la Universidad de Teher¨¢n citado por la agencia Reuters. Marandi admite que el fracaso de Ahmadineyad en responder de forma adecuada a las preguntas de los diputados sobre sus diferencias con el l¨ªder supremo, constituye ¡°un punto d¨¦bil¡±. No obstante, subraya que el presidente a¨²n es popular.

En opini¨®n del analista Sadeq Zibakalam, el tono empleado por Ahmadineyad indica que a¨²n tiene cuerda para rato. ¡°Algunos conservadores quieren librarse de ¨¦l antes de que concluya su mandato, pero ha demostrado que no ser¨¢ f¨¢cil hacerlo. Al mostrarse firme y no tomar en serio a ese sector, ha reforzado su posici¨®n¡±, asegura.

El intento del Parlamento, o m¨¢s bien de sus rivales dentro de la C¨¢mara, por limitar el poder del presidente sali¨® a la luz el pasado 7, apenas cinco d¨ªas despu¨¦s de las elecciones legislativas, cuando los diputados aprobaron la salida del presidente de los consejos de administraci¨®n de las principales compa?¨ªas dependientes del Ministerio de Petr¨®leo, incluida la Compa?¨ªa Nacional de Petr¨®leo. Seg¨²n la nueva ley, su puesto en ellos ser¨¢ ocupado por el ministro del ramo.

Queda por saber cu¨¢l ser¨¢ finalmente la composici¨®n del nuevo Parlamento para poder evaluar el da?o que sufri¨® en las urnas la facci¨®n proAhmadineyad. Zibakalam apunta que no est¨¢ claro si los al menos 70 nuevos diputados elegidos como independientes estar¨¢n a favor o en contra del presidente. Adem¨¢s, a¨²n quedan por dilucidar otros 65 esca?os en una segunda vuelta prevista para abril. La C¨¢mara tiene 290 y hasta ahora 91 de ellos se atribuyen con seguridad a grupos rivales del presidente.