Sarkozy quiere votos de Le Pen pero no ministros lepenistas

Nicolas Sarkozy y Fran?ois Hollande han levantado la veda sobre la crucial reserva de sufragios que suponen los 6,4 millones de votantes del Frente Nacional (FN), grupo hasta ahora considerado como indeseable. A ambos candidatos les va en ello la vida pol¨ªtica y defienden con matices su cortejo de este electorado complejo y en expansi¨®n social y geogr¨¢fica, que ha pasado de vilipendiado a hacedor de reyes. Un sondeo revela que dos de cada tres electores de Sarkozy aceptan un acuerdo con los lepenistas. El candidato presidente asegura que esos hipot¨¦ticos votos no se traducir¨¢n en ministros en el Gobierno que llegue a formar si repite en el El¨ªseo. ¡°No habr¨¢ acuerdo con el Frente Nacional¡±, asegura Sarkozy.

Primero Hollande con su ¡°A m¨ª me toca convencer a los electores del Frente Nacional¡± y luego Sarkozy diciendo que ¡°Le Pen es compatible con la Rep¨²blica¡± han hecho gui?os a ese voto nacionalista puro y duro, socialmente conservador y sociol¨®gicamente rural y proletarizado con vetas xen¨®fobas que reflejan su victimaci¨®n por la globalizaci¨®n. El socialista quiere atraerse a los obreros de las regiones desindustrializadas que ven en Marine Le Pen el ¨²nico refugio fiable de una clase pol¨ªtica que les ha dado la espalda. Mientras Hollande ofrece justicia social a esas cohortes desheredadas, Sarkozy les ofrece eso y todo los dem¨¢s, hablando de los ¡°olvidados¡±, de ¡°los que sufren¡±, de la ra¨ªces cristianas de Europa, de la patria, de la seguridad, de las fronteras, de los que abusan del Estado de bienestar en beneficio propio y del voto a los extranjeros no comunitarios en elecciones locales, promesa de Hollande que repugna a los electores del Frente Nacional.

Prominentes sarkozystas han dado la campanada al decir que jam¨¢s dar¨¢n su voto al Frente Nacional

El discurso de Sarkozy se parece tanto al de Le Pen que los analistas creen que podr¨ªa enajenarse a su electorado natural, aunque el 64% de sus votantes aceptar¨ªa un acuerdo en las legislativas de junio entre lepenistas y sarkozystas, seg¨²n un sondeo. En el tercio que se opone a tal maridaje pol¨ªtico hay prominentes sarkozystas, dos de los cuales (una senadora y ex ministra y un ministro en ejercicio) han dado la campanada al decir que ellos jam¨¢s dar¨¢n su voto al Frente Nacional.

Al paso de la tesis de que est¨¢ haciendo excesivos gestos de identificaci¨®n con el FN ha salido Sarkozy este mi¨¦rcoles asegurando que ¡°no habr¨¢ acuerdo con el Frente Nacional, no habr¨¢ ministros¡±. Seg¨²n el candidato presidente hay demasiadas diferencias pol¨ªticas entre ¨¦l y Le Pen. No se hacen visibles en los m¨ªtines, en los que la cuesti¨®n del voto a los extranjeros es una de las no-diferencias sobre la que Sarkozy vuelve repetidamente. Este mi¨¦rcoles en Alsacia, donde ha apelado directamente al voto de los lepenistas al pairo del voto a los extranjeros, que el sarkozysmo tampoco desea: ¡°Si los electores del Frente Nacional no lo quieren, que nos den su voto¡±.

Sobre la Uni¨®n Europea si hay diferencias, empezando por el deseo de Le Pen de abandonar el euro. Sarkozy se ha puesto duro con Bruselas al considerar intolerable que la Comisi¨®n Europea proponga un incremento del 6,8% de su presupuesto para 2013 cuando toda Europa est¨¢ apret¨¢ndose el cintur¨®n ¡°Es imposible, injustificable e inaceptable que la UE pida a cada uno de sus socios esfuerzo en la reducci¨®n del d¨¦ficit mientras reclama un aumento del 7% de su presupuesto¡±, ha dicho la portavoz del Gobierno franc¨¦s.

Para Sarkozy la austeridad y el rigor presupuestarios son irrenunciables, una rigidez que da?a a los electores del Frente Nacional, con nutrida presencia de obreros no cualificados. En esa disciplina en el gasto se empe?a el presidente frente a las propuestas de Hollande. El socialista, que controla el Senado, se opone a la constitucionalizaci¨®n de la regla de oro del equilibrio presupuestario. ¡°Todos los pa¨ªses de Europa se han comprometido a hacerlo¡±, ha explicado Sarkozy en su mitin en alsaciano. ¡°Si el Senado se opone, convocar¨¦ un refer¨¦ndum para preguntar al pueblo franc¨¦s qu¨¦ piensa¡±.

A la espera de esa respuesta, Mario Draghi, presidente del Banco Central Europeo se ha alineado con las ideas de Hollande de que el pacto presupuestario debe convertirse en uno de crecimiento. El socialista ha prometido que si gana las elecciones el pr¨®ximo 6 de mayo renegociar¨¢ el pacto presupuestario inspirado por la canciller alemana, Angela Merkel, y el presidente franc¨¦s: ¡°Ella ha dirigido Europa junto a Nicolas Sarkozy. ?Ya vemos el resultado!¡±