38 a?os de debates presidenciales en Francia

Las previsiones dicen que veinte millones de franceses estar¨¢n hoy pendientes del enfrentamiento de dos hombres en la televisi¨®n a partir de las 21.00. Son Fran?ois Hollande y Nicolas Sarkozy, candidato del Partido Socialista franc¨¦s y de la Uni¨®n por un Movimiento Popular respectivamente. Los expertos consideran que los debates televisados entre los candidatos a la presidencia nunca han tenido una gran influencia en el voto de los electores y, sin embargo, son una tradici¨®n que despierta un gran inter¨¦s medi¨¢tico.

1974: Giscard D'Estaing- Fran?ois Mitterrand

El primer debate en la historia de las presidenciales francesas tuvo lugar el 10 de mayo de 1974, cuando la tradici¨®n se hab¨ªa consolidado ya en Am¨¦rica tras el legendario enfrentamiento entre Kennedy y Nixon. En aquella ocasi¨®n, Val¨¦ry Gircard D'Estaing y Fran?ois Mitterand se sentaron frente a frente durante 1 hora y 40 minutos en un escenario entre pomposo y l¨²gubre. Los tiempos se med¨ªan con unos cron¨®metros semejantes a los de la Estaci¨®n de Saint Lazare de Par¨ªs y los periodistas no ten¨ªan opci¨®n a hacer preguntas. De ese duelo queda una frase hist¨®rica para la pol¨ªtica francesa. Cuando parec¨ªa que Mitterrand se llevaba el gato al agua en el debate, Giscard D'Estaing le dijo: "Se?or Mitterrand, usted no tiene el monopolio del coraz¨®n". La leyenda dice que esa frase hizo mucho por la victoria del candidato conservador.

1981:Giscard D'Estaing- Fran?ois Mitterrand

El 5 de mayo de 1981, los mismos protagonistas se enfrentaron con diferente resultado. Esta vez, el socialista saldr¨ªa victorioso en las elecciones tras un debate gris en el que, no obstante, regal¨® dos frases de revancha contra Giscard D'Estaing. "Usted tiene tendencia a llamarme a m¨ª hombre del pasado pero ha acabado por ser el hombre del pasivo", espet¨® Mitterrand. No tuvo suficiente con esto. Cuando el presidente le interrogaba sobre el marco alem¨¢n, el socialista le respondi¨®: No me gustan mucho sus formas, yo no soy su alumno ni es usted el presidente de la Rep¨²blica aqu¨ª, es simplemente mi oponente". Miterrand se alz¨® con la victoria por el 51,7% de los votos.

1988: Fran?ois Mitterrand - Jaques Chirac

El tercer debate presidencial en Francia se recuerda como el que dej¨® una de las humillaciones m¨¢s grandes en la pol¨ªtica del pa¨ªs. Se enfrentaban el presidente de la Rep¨²blica y su primer ministro, una cuesti¨®n jerarquica a la que Chirac trat¨® de restar importancia recordando que en ese debate eran solo dos candidatos. "Tiene usted toda la raz¨®n, se?or primer ministro", le espet¨® con malicia Miterrand. Minutos despu¨¦s, cuando Chirac le preguntaba por la subida de una tasa sobre la comida de los animales dom¨¦sticos, el presidente, sin poder olvidar tantos a?os despu¨¦s, a Giscard D'Estaing, le dijo a su oponente: "Usted no tiene el monopolio del coraz¨®n de los perros y los gatos, a mi tambi¨¦n me gustan". El presidente venci¨® no solo en oratoria, tambi¨¦n en las urnas, con un 54,02%.

1995: Lionel Jospin - Jaques Chirac

Demasiada educaci¨®n para pasar a los anales de la historia. Es lo que se dice de este debate que no tuvo nada que ver con la edici¨®n anterior entre dos candidatos muy sonrientes que intu¨ªan el resultado final. Solo una frase para recordar. El socialista propuso una reforma constitucional para que los mandatos presidenciales fueran de cinco a?os frente a los siete que a¨²n duran: "Ser¨ªa mejor cinco a?os con Jospin que siete con Chirac", asegur¨® el socialista que perdi¨® las elecciones con un 47,4%.

2002: ?nica edici¨®n sin debate

Jaques Chirac se neg¨® a debatir con el ultraderechista Jean-Marie Le Pen que se hab¨ªa impuesto al socialista Jospin en la primera vuelta protagonizando la sorpresa del a?o. Chirac se impuso con un 80% de los votos en la segunda vuelta al llevarse todos los votos del resto de opciones pol¨ªticas en un frente antilepenista.

2007: Nicolas Sarkozy-S¨¦gol¨¨ne Royal

Muy agrio debate en el que Sarkozy no dej¨® de remarcar la palabra "madame" cada vez que se dirig¨ªa a la candidata socialista.? "La se?ora Royal trata de todos los temas al mismo tiempo y muy por encima. No es precisa", comenz¨® Sarkozy, que en ning¨²n momento dej¨® de llamar a su adversaria con un ir¨®nico "Madame". Royal quer¨ªa demostrar que Sarkozy era un hombre nervioso. Solo consigui¨® todo lo contrario. El actual presidente consigui¨® crispar a la socialista que le interrump¨ªa constantemente. "Usted alcanza el s¨²mmum de la inmoralidad pol¨ªtica. Ese abismo entre las palabras y los hechos no es aceptable", dijo indignada. "Yo nunca me dirigir¨ªa a usted en estos t¨¦rminos. Veo que pierde los nervios f¨¢cilmente. Para ser presidente hay que conservar la calma", respondi¨® un sonriente Sarkozy. Royal, intentando controlarse, sentenci¨®: "No he perdido los nervios, estoy enfadada y hay enfados muy sanos".