L¨®pez Obrador y Yo Soy 132 arremeten contra los medios de comunicaci¨®n

¡°Los j¨®venes del movimiento Yo Soy 132 son admirables. Est¨¢n luchando por el derecho a la informaci¨®n¡±, respond¨ªa el candidato del PRD a la Presidencia de M¨¦xico, Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador, a la pregunta de una periodista en la rueda de prensa ofrecida en el hotel Hilton de la capital. Sobre una tarima con un fondo que le daba el t¨ªtulo de presidente, casi 24 horas despu¨¦s de que la autoridad electoral mexicana lo dejase en un segundo puesto, L¨®pez Obrador denunci¨® ¡°miles de irregularidades¡± en los comicios y arremeti¨® contra los medios de comunicaci¨®n por ¡°haber patrocinado¡± al candidato del PRI, Enrique Pe?a Nieto.

A pocos metros de distancia, en el monumento a la Revoluci¨®n, miles de manifestantes de la plataforma ciudadana Yo Soy 132 recopilaban pruebas de supuestos delitos electorales y protestaban con id¨¦nticos argumentos a los de L¨®pez Obrador. ¡°Pe?a no gan¨®, el IFE [Instituto Federal Electoral] se vendi¨®¡± y ¡°fraude¡± eran las consignas m¨¢s repetidas.

Adem¨¢s de poner en duda la limpieza del proceso, los medios tambi¨¦n han sido objeto de cr¨ªticas por parte del movimiento nacido en la Universidad Iberoamericana, y que se ha definido abiertamente contra el PRI. A lo largo de la campa?a, los j¨®venes se han rebelado contra la ¡°manipulaci¨®n¡± de algunas cadenas de televisi¨®n a favor de Pe?a Nieto, e incluso durante la jornada de reflexi¨®n se manifestaron delante de las instalaciones de Televisa.

La indignaci¨®n de la izquierda contra la forma en la que la prensa ha informado de los comicios se hizo patente tambi¨¦n en la cercana rueda de prensa de L¨®pez Obrador. En la audiencia, de aproximadamente un centenar de personas, los simpatizantes del Movimiento Progresista superaban en n¨²mero a los periodistas. Tras recibir con gritos de ¡°presidente¡± a AMLO, intervinieron en varias ocasiones para expresarle su apoyo y no dudaron en increpar y abuchear a los informadores cuando consideraban que las preguntas no eran las adecuadas. Micr¨®fono en mano, un asistente se?alaba con el dedo a los c¨¢maras de televisi¨®n: ¡°D¨ªgannos si otra vez no van a hacer su trabajo¡±. ¡°?Contesten! Contesten!¡± gritaba otro, encendido. El propio candidato respondi¨® con sorna a algunas de las periodistas: ¡°?Usted no ve Milenio Televisi¨®n?¡±. Al final de su comparecencia, trat¨® de rebajar la tensi¨®n que se hab¨ªa generado en la sala y matiz¨® sus palabras: ¡°Respeto su labor [¡­] Una cosa son los trabajadores de los medios y otra los due?os¡±.

Cuando L¨®pez Obrador concluy¨® su intervenci¨®n, y pese al aguacero que ca¨ªa sobre el centro de la ciudad, cientos de manifestantes lo esperaban fuera del hotel con la convicci¨®n de que fue la izquierda la que gan¨® las elecciones del domingo. ¡°Es un honor estar con Obrador¡±, coreaban bajo los paraguas.