Primeros culpables en el mayor caso de corrupci¨®n pol¨ªtica en Brasil

Cinco a?os despu¨¦s de haber recibido la denuncia,?el Tribunal Supremo brasile?o ha empezado este mi¨¦rcoles a dirimir el caso de corrupci¨®n conocido como mensal?o (la mensualidad), que a punto estuvo de costarle el cargo al presidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva en 2005. Se trata del mayor caso de corrupci¨®n pol¨ªtica en la historia democr¨¢tica del pa¨ªs, que juzga supuestos desv¨ªos de fondos p¨²blicos para sobornos en el Congreso y financiaci¨®n ilegal de campa?as electorales. Entre los implicados figura el poderoso Partido de los Trabajadores (PT), en el que militan el propio Lula y la actual presidenta, Dilma Rousseff. Aunque el tribunal todav¨ªa no hab¨ªa dictado el fallo, la mayor¨ªa de los once magistrados del colegio ya hab¨ªan pronunciado anoche su voto de condena para los cinco acusados sometidos a juicio en esta primera fase del proceso. En total, hay 38 personas sentadas en el banquillo.

Uno de los juzgados en esta primera fase es el diputado Jo?o Paulo Cunha, expresidente del Congreso y figura importante del PT, al que se acusa de los delitos de peculado (desv¨ªo de fondos p¨²blicos), blanqueo de dinero y corrupci¨®n pasiva. Con ¨¦l recibir¨¢n su sentencia el empresario publicitario Marcos Valerio y sus socios Cristiano Paz y Ram¨®n Hollerbach, acusados de peculado y corrupci¨®n pasiva, y el exdirector del Banco de Brasil, Henrique Pizzolato, acusado de corrupci¨®n pasiva, peculado y blanqueo. A falta de que los ¨²ltimos jueces expresaran su posici¨®n, cada uno de los acusados ya ha sido considerado culpable por al menos seis de los once magistrados del tribunal.

El proceso est¨¢ siendo un aut¨¦ntico reto para los jueces, que el d¨ªa 2 de agosto iniciaron la vista con el mayor n¨²mero de acusados en la historia del tribunal, que ha generado 45.000 p¨¢ginas de sumario.

La mayor inc¨®gnita era precisamente la votaci¨®n sobre el expresidente del Congreso, ya que se trata del primero de los pol¨ªticos acusados, cuya sentencia puede influir sobre la absoluci¨®n o condena del resto de los pol¨ªticos enjuiciados. Entre ellos se encuentra buena parte de la c¨²pula del PT en 2005 y el exministro de la Casa Civil y expresidente del partido, Jos¨¦ Dirceu, que era entonces la mano derecha de Lula y que ha sido acusado por el fiscal general y por el relator del Supremo de ser el ¡°responsable intelectual¡± del esc¨¢ndalo de corrupci¨®n, a pesar de que existen pocas pruebas concretas. ?l siempre se ha declarado inocente. Las declaraciones de voto pronunciadas ayer por los magistrados dejan presagiar sentencias duras para los acusados.

La mayor preocupaci¨®n del PT y del expresidente Lula es que el Supremo se est¨¦ inclinando hacia la tesis de que se trat¨® de desv¨ªo de ¡°dinero p¨²blico¡±, algo que siempre fue negado por el PT, que admiti¨® solo que se hab¨ªa tratado de recursos de empresas privadas para financiar las campa?as electorales.

El desv¨ªo de dinero p¨²blico, supone un delito penal, mientras que el desv¨ªo de dinero privado, aunque il¨ªcito, est¨¢ contemplado en Brasil solo como ¡°delito electoral¡±, castigado con una multa.