Mark Rutte, liberal de derecha, primer ministro saliente y europe¨ªsta convencido

A los 45 a?os, Mark Rutte, primer ministro saliente de Holanda, es un liberal de derecha de pata negra. Ya formaba parte de las juventudes del partido durante sus estudios de Historia en la universidad de Leiden, la m¨¢s antigua del pa¨ªs. Se gradu¨® en 1992, y entre sus asignaturas favoritas a?ade con entusiasmo el arte. Pocas veces recuerda, al menos en p¨²blico, que quiso ser concertista de piano. Hijo de familia numerosa protestante, logr¨® su primer empleo en la multinacional alimentaria Unilever nada m¨¢s licenciarse. Hasta el a?o 2002, se movi¨® en la ¨®rbita de la empresa desde el departamento de personal. A partir de entonces, entr¨® de lleno en la pol¨ªtica oficial. Consigui¨® el acta de diputado y enseguida tuvo responsabilidades. Fue secretario de Estado de Asuntos Sociales y despu¨¦s de Educaci¨®n, en sendos Gobiernos de centro derecha al mando del cristianodem¨®crata Jan Peter Balkenende. Esa experiencia le permite hablar hoy con soltura de los recortes presupuestarios forzados por la crisis en ambos terrenos.

Rutte tiene madera de orador, habla a gran velocidad y termina sus frases en las circunstancias m¨¢s apremiantes, ya sea en televisi¨®n o en un pleno del Congreso. Cuando le preguntan por su vida privada, es a¨²n m¨¢s agudo. Soltero y muy pr¨®ximo a su familia y amigos, intenta mantener su vida de siempre. Incluso es f¨¢cil verle pasear por La Haya, bocadillo en mano y con una seguridad discreta en las cercan¨ªas, a la hora del almuerzo. ¡°No crea que seguir soltero es un problema. Tampoco estoy casado con mi trabajo, si es lo que pretende decirme. Mi familia y amigos son el lugar donde me relajo y estoy a gusto, y la pol¨ªtica me encanta¡±, ha dicho, en una entrevista reciente. Europe¨ªsta convencido y firme defensor de la disciplina fiscal de la UE, cree que el problema de Grecia ¡°es de los griegos y del resto de la eurozona¡±. Y sobre todo, que ¡°Holanda es una pa¨ªs comerciante necesitado de Europa y de la solidaridad comunitaria¡±.