"No cambiaron la tiran¨ªa de un dictador por la tiran¨ªa de la turba"

El presidente Barack Obama y la secretaria de Estado, Hillary Clinton, participaron este jueves en una ceremonia de honor a los cuatro ciudadanos fallecidos en el asalto a la embajada de Estados Unidos en Bengasi, Libia, el pasado martes. Tanto Obama como Clinton hicieron defendieron los esfuerzos diplom¨¢ticos en la regi¨®n tras la Primavera ?rabe, que acab¨® con reg¨ªmenes dictatoriales en T¨²nez, Libia y Egipto.

"No cambiaron la tiran¨ªa de un dictador por la tiran¨ªa de la turba", aleg¨® Clinton durante su discurso en la base militar de St. Andrews, a las afueras de la capital. La secretaria de Estado, visiblemente afectada por lo sucedido y con la voz entrecortada, agradeci¨® a los familiares de los fallecidos el servicio que prestaron a EE UU y destac¨® especialmente la figura de Chris Stevens, el embajador fallecido en Libia. ¡°Chris hizo suyos los sue?os de los libios¡±.

Los cuerpos de Stevens y de los otros tres fallecidos -un funcionario de la embajada, Sean Smith, y Tyrone Woods y Glen Doherty, dos miembros retirados de las fuerzas especiales de la marina- fueron recibidos en St. Andrews por Obama, Clinton, el vicepresidente Joe Biden, y el secretario de Defensa Leon Panetta, as¨ª como otras autoridades y familiares de los fallecidos.

La secretaria de Estado mencion¨® al comienzo de su discurso los mensajes de muchos libios que han convocado diferentes concentraciones para agradecer al pa¨ªs su trabajo durante la revoluci¨®n que termin¨® con el r¨¦gimen de Muamar el Gadafi. ¡°Hemos le¨ªdo pancartas en las que se defiende que los ladrones y los asesinos no representan a Bengasi ni a Libia¡±, dijo Clinton. Y como ya afirmara el mi¨¦rcoles en sus primeras reacciones a los ataques, que calific¨® de ¡°inaceptables¡±, insisti¨® en que ¡°EE UU no tiene nada que ver¡± con el v¨ªdeo que ha desatado las protestas.

¡°Los l¨ªderes responsables de estos pa¨ªses tienen que hacer todo lo que puedan para restaurar la seguridad y traer a la justicia a aquellos que est¨¢n detr¨¢s de estos actos violentos¡±, afirm¨® la secretaria de Estado. El Gobierno norteamericano se mantiene en permanente contacto con los l¨ªderes de la regi¨®n para seguir el avance de las protestas y este viernes Clinton les ped¨ªa as¨ª que impidieran su expansi¨®n.

Clinton tambi¨¦n defendi¨® la operaci¨®n desarrollada en Libia, en la que colabor¨® desde un principio el embajador. Stevens fue el enviado especial de Estados Unidos desde el comienzo de las revueltas en Libia y se convirti¨® en el principal interlocutor entre Washington y los rebeldes. "EE UU debe liderar el mundo, se lo debemos a los que han perdido la vida por ello¡± afirm¨® la secretaria de Estado. ¡°Estoy tremendamente orgullosa por el trabajo realizado".

En un momento en el que diversos miembros del Partido Republicano consideran que la estrategia adoptada en Libia y en otros pa¨ªses de la regi¨®n ha desembocado en un debilitamiento del liderazgo internacional de EE UU, Obama reiter¨® su defensa de la estrategia diplom¨¢tica: "En instantes tan dif¨ªciles como ¨¦ste se ha puesto en duda el trabajo realizado. Pero quiero recordar a las decenas de libios que han salido a las calles para darnos las gracias y decir que Chris Stevens era su amigo".

"Ese es el trabajo realizado en Bengasi y ese es el trabajo que seguiremos realizando¡±, afirm¨® el presidente, quien prometi¨® una vez m¨¢s que ¡°se har¨¢ justicia¡± por la muerte de Stevens y otros tres empleados de la embajada. ¡°Estos sacrificios nunca ser¨¢n olvidados. Llevamos la cabeza alta. Somos americanos".

Obama reiter¨® que los fallecidos en Libia ¡°encarnaban el ideal estadounidense de que siempre podemos hacer que las cosas mejores. Ellos mostraron al mundo que no s¨®lo nos preocupan nuestros intereses, sino tambi¨¦n los suyos¡±. El presidente afirm¨® que EE UU nunca dar¨¢ la espalda a sus aliados. ¡°Nunca dejaremos de trabajar por la dignidad y la libertad que merecen todos los ciudadanos, sin importar su religi¨®n¡±, a?adi¨®.