Seis pa¨ªses de fuera de la OTAN ayudar¨¢n en la nueva misi¨®n en Afganist¨¢n

Seis pa¨ªses de fuera de la OTAN se han ofrecido ya a participar junto con los aliados en la misi¨®n de sostenimiento a la seguridad de Afganist¨¢n que seguir¨¢ al repliegue definitivo de la Fuerza Internacional de Asistencia a la Seguridad (ISAF) previsto para el 31 de diciembre de 2014. Suecia, Finlandia, Ucrania, Georgia, Australia y Nueva Zelanda est¨¢n pendientes de la aprobaci¨®n de sus respectivos parlamentos para hacer bueno un compromiso con los 28 aliados que est¨¢ a¨²n por detallar y del que recibir¨¢n una primera informaci¨®n este mi¨¦rcoles los ministros de Defensa de los 50 pa¨ªses que participan en ISAF.

El futuro de Afganist¨¢n ser¨¢ el plato fuerte del Consejo Atl¨¢ntico que empieza el martes y, en lo relativo a operaciones, tambi¨¦n debatir¨¢ sobre la situaci¨®n en Kosovo, cuya inestabilidad pol¨ªtica retrasa una y otra vez los planes para retirar los alrededor de 6.000 soldados que all¨ª tiene desplegada la comunidad internacional.

Los ministros, adem¨¢s, discutir¨¢n sobre el mejor modo de hacer frente a las necesidades de la defensa en momentos de austeridad financiera generalizada y cada vez m¨¢s estricta. La aparente soluci¨®n pasa por la etiquetada como Defensa Inteligente, que pide compartir esfuerzos y especializaciones para responder a las necesidades del conjunto en un mundo expuesto m¨¢s que a las amenazas cl¨¢sicas protagonizadas por Estados, que no por ello desaparecen, a amenazas de nuevo cu?o, como los ciberataques.

Afganist¨¢n sigue siendo la m¨¢xima prioridad aliada, una campa?a que no deja de producir contratiempos a los aliados, pese a la l¨ªnea oficial de que la evoluci¨®n hacia la transferencia de responsabilidad a las fuerzas afganas sigue el curso previsto. En la actualidad, el 75% de los afganos viven en territorios cuya seguridad corresponde en primer lugar a compatriotas de uniforme (soldados y polic¨ªas). Para mediados de 2013 piensa ISAF haber cedido a las fuerzas de seguridad afganas el liderazgo de esa responsabilidad sobre la totalidad del pa¨ªs.

Ese plan se ve peri¨®dicamente enturbiado por los golpes de mano de los talibanes contra las fuerzas de ISAF y sus colaboradores afganos, con ataques de infiltrados que este a?o ya han costado 53 vidas a los soldados de ISAF. Es un asunto que preocupa mucho a los aliados. De las dimensiones del problemas y de las medidas tomadas para combatirlo ser¨¢n informados los ministros.

En esta reuni¨®n bruselense, los responsables pol¨ªticos recibir¨¢n las primeras informaciones sobre la planificaci¨®n prevista para el post 2014 afgano, cuando ISAF desaparezca de escena y sea sustituida por un contingente a¨²n por determinar de soldados aliados y de otros pa¨ªses. Los 28 miembros de la OTAN seguir¨¢n comprometidos de distinta manera con el futuro afgano lo mismo que seis de los otros 22 pa¨ªses (la oferta est¨¢ abierta a todos) que participan en ISAF. Suecia, Finlandia, Ucrania, Georgia, Australia y Nueva Zelanda ya han dado el esperado paso adelante y comunicado oficiosamente su voluntad de seguir en el empe?o afgano. Los detalles de la futura misi¨®n y sus componentes (se habla de entre 10.000 y 20.000 soldados que deben seguir formando y aconsejando a unos 350.000 uniformados afganos a partir de 2015) quedan para m¨¢s adelante. En principio, los ministros deber¨ªan recibir comunicaci¨®n m¨¢s precisa en su reuni¨®n del pr¨®ximo mes de febrero.

Fuera de agenda, pero asomando en el horizonte aparece la crisis siria, que afecta a la OTAN por hacerlo a las fronteras de uno de sus miembros, Turqu¨ªa, que hace una semana las vio mortalmente violadas (cinco v¨ªctimas civiles) por proyectiles sirios. ¡°Estoy seguro de que los ministros lo discutir¨¢n, como lo han hecho ya en distintas ocasiones¡±, adelanta una fuente diplom¨¢tica aliada.

Pero la discusi¨®n no versar¨¢ sobre la utilizaci¨®n de la fuerza. ¡°D¨¦jeme ser muy claro en esto: la OTAN no tiene intenci¨®n de intervenir militarmente en Siria¡±, subraya enf¨¢ticamente Anders Fogh Rasmussen, secretario general aliado. Rasmussen asegura que, como corresponde con un pa¨ªs aliado, la OTAN ¡°tiene planes para proteger a Turqu¨ªa si fuera necesario¡±, pero hace notar c¨®mo Ankara no invoc¨® la semana pasada el art¨ªculo 5 del Tratado de Washington, que obliga a acudir en ayuda de cualquier miembro que sea atacado, sino el 4, que solo prev¨¦ la celebraci¨®n de consultas.

El secretario general, que huye siempre de las especulaciones, no quiere anticipar qu¨¦ har¨ªa la OTAN en el caso ¡°hipot¨¦tico¡± de que Turqu¨ªa invocase el art¨ªculo 5 y recuerda que solo en una ocasi¨®n, tras el 11-S, se activ¨® el mecanismo de defensa mutua.

El m¨¢ximo responsable aliado deja meridianamente claro el escaso entusiasmo de la OTAN por intervenir en el conflicto sirio al apuntar que all¨ª no se dan las condiciones que se dieron en Libia (autorizaci¨®n del Consejo de Seguridad y apoyo de los pa¨ªses vecinos), adem¨¢s de advertir de las ¡°impredecibles consecuencias de una intervenci¨®n extranjera en Siria¡±.

Esta posici¨®n aliada no menoscaba el derecho de Turqu¨ªa a ejercer la ¡°autodefensa¡± ante la ca¨ªda en su territorio de proyectiles sirios, precisa un Rasmussen que elogia la ¡°contenci¨®n¡± de Ankara y dice confiar en que no se produzca una escalada, palabras diplom¨¢ticas que debe traducirse como que la OTAN no quiere de ninguna manera que Turqu¨ªa estire la cuerda del conflicto con Siria.