Ir¨¢n transporta crudo de Siria por el Mediterr¨¢neo para saltarse el bloqueo

La presi¨®n de las sanciones internacionales contra Ir¨¢n ha obligado al r¨¦gimen teocr¨¢tico a virar el rumbo de los petroleros que llegan a las costas de Siria para cargar crudo y transportarlo de vuelta al golfo P¨¦rsico. Si hasta ahora, la v¨ªa de acceso era el Canal de Suez, controlado por las autoridades egipcias y ubicado al suroeste de la l¨ªnea costera siria, el cerco a los cargueros iran¨ªes, en la diana de las sanciones de la ONU y hu¨¦rfanos ya de padrinos que quieran prestar su bandera, ha hecho girar a estribor para recorrer el Mediterr¨¢neo, cruzar el Estrecho de Gibraltar y salvar los controles en alta mar hasta bordear la silueta africana de camino a casa. As¨ª lo hizo recientemente el barco cisterna iran¨ª AMIN. Pese a que Siria no es un gigante en la producci¨®n de petr¨®leo, su extracci¨®n y venta le generaban, antes de la revoluci¨®n, alrededor de un 25% de sus ingresos. La violenta represi¨®n de Bachar el Asad contra la revuelta ha motivado el embargo de crudo desde EE UU y la UE. Pero al r¨¦gimen alau¨ª controlado por la familia El Asad le queda un gran aliado: Ir¨¢n, pa¨ªs de mayor¨ªa chi¨ª empe?ado en aliviar el bloqueo contra Damasco y evitar la toma del poder de la poblaci¨®n sun¨ª siria.

Seg¨²n el seguimiento realizado por miembros de la oposici¨®n siria en el exilio europeo, el petrolero AMIN, de 274 metros de eslora, cruz¨® entre el 10 y 11 de septiembre el Estrecho de Gibraltar con alrededor de 100.000 toneladas m¨¦tricas de crudo. El AMIN pertenece a Irano Hind Shipping Company, empresa participada en un 51% por Islamic Republic of Iran Shipping Lines (IRISL), propiedad del Gobierno iran¨ª que hoy encabeza Mahmud Ahmadineyad. El desarrollo de un programa nuclear con fines no civiles ha multiplicado en los ¨²ltimos seis a?os las sanciones en el seno de la ONU contra el sector energ¨¦tico iran¨ª y algunas de las firmas que operan bajo mando de los ayatol¨¢s. Desde 2010, en esa lista negra aparece el conglomerado IRISL y sus empresas.

La oposici¨®n siria cree que Teher¨¢n podr¨ªa estar pagando con armas el crudo que compra a la familia El Asad y posteriormente vende a, entre otros, China e India. Y eso pese a las trabas que encuentra Ir¨¢n para vender su propio petr¨®leo, sujeto tambi¨¦n a embargo.

¡°No hay transparencia bancaria para seguir los pagos de Ir¨¢n¡±, afirma desde Par¨ªs Isma?l Darwish, miembro de la oposici¨®n siria, que junto a Bassma Kodmani, exportavoz del Consejo Nacional Sirio, trabajan en el monitoreo de las sanciones contra El Asad. Lo que s¨ª tienen claro, tras consultar a diplom¨¢ticos europeos es que, pese a las presiones internacionales, ¡°el AMIN sigue navegando, lo hace sin bandera y no se puede detener¡±. Fe de ello dan las autoridades espa?olas de Marina mercante. Seg¨²n este departamento del Ministerio de Fomento, el AMIN tuvo permiso de tr¨¢nsito por el Estrecho de Gibraltar, puesto que el veto dictado por las resoluciones de la ONU solo afecta a ¡°carga y descarga¡±. Para lo dem¨¢s, el derecho mar¨ªtimo protege la libertad de navegaci¨®n en aguas internacionales.

Una libertad que tiene sus normas. La circulaci¨®n por el Estrecho est¨¢ vigilada desde Espa?a por el dispositivo de separaci¨®n del tr¨¢fico de Tarifa, controlado por Seguridad Mar¨ªtima, organismo al que deben notificar su tr¨¢nsito las embarcaciones que quieran cruzar. Y as¨ª lo hizo el AMIN. ¡°Solo si un buque lleva mercanc¨ªas peligrosas no permitidas¡±, explica Adolfo Serrado desde el puesto de Tarifa, ¡°se informa a capitan¨ªa mar¨ªtima y esta al Ministerio de Exteriores¡±. Otra cosa ser¨ªa el control en el Canal de Suez, donde operarios de la autoridad egipcia conducen el tr¨¢fico, incluso f¨ªsicamente desde el interior de los cargueros, de Port Said hasta Suez y luego a mar abierto. La presi¨®n de EE UU y los problemas de bandera har¨ªan casi imposible ahora a un petrolero iran¨ª obtener el pl¨¢cet de los funcionarios egipcios.

S¨ª logr¨® atravesar el Canal de Suez el pasado verano el Tour, otro carguero de la sancionada empresa IRISL, seg¨²n inform¨® entonces la agencia de noticias Reuters. Pero Washington ha elevado la presi¨®n contra todo aquel que ose registrar bajo su bandera a un buque de la compa?¨ªa iran¨ª. El departamento del Tesoro difundi¨® el pasado 19 de julio una nota en la que alert¨® de las ¡°pr¨¢cticas enga?osas¡± llevadas a cabo por IRISL e inst¨® a negar la bandera a todos sus buques. ¡°Es muy posible¡±, dec¨ªa la circular, ¡°que las embarcaciones de IRISL no est¨¦n usando de forma correcta las banderas¡±. El Tesoro llam¨® a las autoridades mar¨ªtimas a estrechar los controles y ¡°emprender acciones¡± en caso de fraude de ley. En el comunicado, Washington inform¨® precisamente de que Sierra Leona hab¨ªa retirado su bandera al AMIN. Ahora resulta dif¨ªcil saber bajo qu¨¦ ense?a navega dado que, como se?ala Marina mercante espa?ola, el AMIN cambia de bandera a su antojo y ¨²ltimamente lo ha hecho en tres o cuatro ocasiones.

Antes que Sierra Leona, Malta y Bolivia prestaron su pabell¨®n al AMIN. Seg¨²n revela un colaborador cercano del grupo activista Avaaz, Ir¨¢n puede navegar libremente por aguas internacionales con el AMIN, pero infringe la ley con sus tejemanejes con las banderas, gracias a los que sortea el bloqueo. C¨®mplice necesario de esas maniobras ser¨ªa, entre otros, la filial en Nueva York del banco brit¨¢nico Standard Chartered, que administra los pagos a Bolivia de los buques registrados y que, por tanto, se salt¨® las sanciones impuestas por la ONU y EE UU cuando acept¨® el dinero del AMIN.

Navegue por un canal o por un estrecho, lo que ha puesto en alerta a la ONU es el tr¨¢fico de armas de Teher¨¢n a Damasco, prohibido sin duda por las sanciones contra el r¨¦gimen iran¨ª. El Consejo de Seguridad de la ONU, apoyado en el ¨²ltimo informe del panel de expertos que monitorea las sanciones contra Ir¨¢n, inform¨® a finales de septiembre de que Siria se ha convertido ¡°en la parte central de la transferencia il¨ªcita de armas iran¨ªes¡±. El panel denunci¨® en su reporte la incautaci¨®n de dos cargamentos con sello iran¨ª que trataron de cruzar la frontera turco-siria el pasado a?o: uno, dividido en 19 contenedores llenos de rifles, ametralladoras y morteros, y transportados en un avi¨®n de la aerol¨ªnea iran¨ª Yas Air; otro, en el interior de un cami¨®n y formado por explosivos. ¡°Los Estados de la regi¨®n¡±, manifest¨® tras conocer el informe Susan Rice, embajadora estadounidense en la ONU, ¡°deben redoblar sus esfuerzos para rechazar, inspeccionar o incautarse de cargamentos il¨ªcitos iran¨ªes¡±. Eso, al menos en las autopistas mar¨ªtimas, sin un canal o puerto hostil a Teher¨¢n, resultar¨¢, cuando menos, dif¨ªcil.