En el fondo, esto da risa

Ni la pol¨ªtica es tan seria como dicen los pol¨ªticos ni los pol¨ªticos se llevan tan mal como aparentan ante el p¨²blico. En el fondo, nada es tan trascendental como aparece en los peri¨®dicos, ni en las elecciones est¨¢n en juego asuntos de vida o muerte. La pol¨ªtica, en realidad, es algo mucho m¨¢s sencillo y trivial, y, como se han encargado de recordar Barack Obama y Mitt Romney, deber¨ªa tambi¨¦n poder llegar a ser mucho m¨¢s cordial.

Despu¨¦s de dos debates en los que pelearon por un cargo y, se supone, por la ideas en las que creen, Obama y Romney se juntaron el jueves por la noche en Nueva York en una cena en el que el prop¨®sito es relajar los m¨²sculos, re¨ªrse de lo que hacen y, de paso, comunicarle a los ciudadanos que, aunque lo parezca, las elecciones no son tan importantes como para impedir que dos personas conversen amigablemente y pasen un buen rato juntas. A nadie le gusta perder unas elecciones, pero tampoco es el fin del mundo.

La ocasi¨®n era un evento cl¨¢sico de la pol¨ªtica norteamericana, la llamada gala Al Smith, que se celebra desde hace 67 a?os en honor de un gobernador de Nueva York que fue el primer candidato cat¨®lico a la presidencia de Estados Unidos. El prop¨®sito es el de reunir dinero para obras de caridad de la Iglesia cat¨®lica. Pero, por la costumbre desde 1960 de invitar a los dos candidatos presidenciales, se ha convertido en un acontecimiento de relevancia social y pol¨ªtica. Los oradores recurren a sus mejores chistes para ridiculizarse a s¨ª mismos y sus contrincantes.

En esa cena comenz¨® a perfilarse la victoria de John Kennedy sobre Richard Nixon, a quien no le fue muy dif¨ªcil batir en el terreno del humor. En esa cena pronunci¨® John McCain hace cuatro a?os el mejor discurso de toda su campa?a, el m¨¢s sentido, el m¨¢s tierno. Las mesas est¨¢n ocupadas por millonarios y gente que cuenta en Nueva York. Como dijo George W. Bush en una de sus intervenciones, ¡°esta audiencia est¨¢ dividida entre los que tienen y los que tienen m¨¢s, algunos les llaman la ¨¦lite, yo les llamo mi base¡±.

Hablando de ricos, Obama dijo que estar en Nueva York la daba la oportunidad de ¡°salir de tiendas y hacer unas compras, mientras que Romney saldr¨¢ a comprar algunas tiendas¡±. Mencion¨® que se le hab¨ªa visto tan en¨¦rgico en el segundo debate porque estaba ¡°muy descansado tras la siesta que tom¨¦ en el primero¡±. Romney tampoco ocult¨® su s¨®lida situaci¨®n financiera. Impecable en su frac, como el resto de la audiencia, Romney afirm¨® que ¡°es un placer relajarse un rato y vestirnos como Ann y yo nos vestimos cuando estamos c¨®modamente en casa¡±.