El carcelero del soldado Gilad Shalit

Ahmed Yabari, comandante del brazo armado de Ham¨¢s, las Brigadas de Ezedin el Kasam, fue a lo largo de su vida perseguido tanto por las fuerzas de seguridad israel¨ªes como por las palestinas. Nacido en un barrio pobre de la ciudad de Gaza en 1960, tras estudiar Historia en la Universidad Isl¨¢mica y a la edad de 22 a?os, Israel ya le encarcel¨® por su militancia en la organizaci¨®n palestina Al Fatah, entonces considerada como organizaci¨®n terrorista. Durante los 13 a?os que permaneci¨® en prisi¨®n entr¨® en contacto con importantes figuras del movimiento islamista, tales como Abdelaziz Rantisi o Salah Shehade, tambi¨¦n encarcelados por su activismo durante la Primera Intifada. Un contacto que con el paso del tiempo terminar¨ªa convirti¨¦ndose en amistad e incluso en relaci¨®n de parentesco, pues a?os despu¨¦s Yabari se casar¨ªa con una de las hijas de Shehade, uno de sus predecesores como l¨ªder de la rama militar del movimiento fundamentalista. Pero su suegro, al igual que ¨¦l, fue v¨ªctima de otro ¡°asesinato selectivo¡± en julio de 2002, que al ser efectuado con una bomba de una tonelada en vez de con un misil dirigido por l¨¢ser no s¨®lo acab¨® con la vida del sospechoso, sino tambi¨¦n con la de su mujer y otros 15 civiles, la mayor¨ªa de ellos ni?os.

Tras cortar sus lazos con Al Fatah y pasar a formar parte de Ham¨¢s, Yabari volvi¨® a ser encarcelado de nuevo en 1998 ¡ªen este caso tras ser acusado de participar en acciones armadas¡ª, aunque esta vez por el Servicio de Seguridad Preventiva de la Autoridad Nacional Palestina (ANP). Despu¨¦s de permanecer otro a?o detenido ¡ªesta vez en una prisi¨®n de la ANP¡ª se reincorpor¨® a la disciplina de la rama militar de Ham¨¢s.

Fueron a?os de intensa actividad clandestina que, en el transcurso de la Segunda Intifada, culminaron en su nombramiento como nuevo comandante de las Brigadas de Ezedin el Kasam. Su sucesor inmediato en el cargo, Mohamed Deif, perdi¨® la visi¨®n en un ojo y otras capacidades sensoriales tras ser objeto de otro intento de ¡°asesinato selectivo¡± similar, aunque en este caso fallido. El propio Yabari ya hab¨ªa sido objetivo de las Fuerzas A¨¦reas israel¨ªes que intentaron asesinarle en una operaci¨®n previa en la que, sin embargo, muri¨® su hijo mayor, un hermano y varios primos.

Los dirigentes de la rama pol¨ªtica del movimiento le atribuyen la profesionalizaci¨®n de la milicia, seg¨²n un modelo similar a la de la organizaci¨®n chi¨ª libanesa Hezbol¨¢, aunque sin los mismos sistemas de armamento ni el apoyo log¨ªstico y financiero que ¨¦sta recibe por parte de Ir¨¢n y Siria. De hecho, se piensa que fue el estratega que prepar¨® meticulosamente el golpe de Estado de junio de 2007, en el que Ham¨¢s se hizo con el control de la franja de Gaza. Y aunque no particip¨® directamente en la planificaci¨®n y ejecuci¨®n del secuestro del cabo israel¨ª Gilad Shalit en junio de 2006 (una operaci¨®n que fue dirigida por los Comit¨¦s de Resistencia Popular en venganza por el asesinato previo de su carism¨¢tico l¨ªder, Yamal Abu Samhadana, en la que las Brigadas de Ezedin el Kasam jugaron un papel secundario), lo cierto es que luego pas¨® a dirigir el operativo de custodia del secuestrado, movi¨¦ndolo entre diferentes zulos hasta el momento de su intercambio por un millar de presos palestinos en octubre de 2011.

Tanta fue la implicaci¨®n personal de Yabari en la custodia de Shalit que el d¨ªa en que ¨¦ste fue entregado a los intermediarios egipcios en el paso fronterizo de Rafah, el 18 de octubre de 2011, ¨¦l mismo hizo acto de presencia, en una de las rar¨ªsimas ocasiones en las que se dej¨® ver en p¨²blico.